Capítulo 18

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Comienza el entrenamiento. Tenemos dos semanas para formarnos a todos los niveles. No sólo debemos entrenarnos físicamente sino que como nuestras habilidades son mayormente literarias tenemos que dar clases de todo tipo.
Yo tengo creación poética y clases de piano.
La formación más extraña es la de Yioua. Le están enseñando técnicas de para poder controlar la tele transportación.
Cuando descubrió que poseía esa habilidad casi le da un infarto.
Ella no era consciente de que era ella la que se trasladaba de habitación con tanta frecuencia. Creía que eran los Kiops los que lo hacían.
Sin embargo, es una persona muy inteligente y en cuanto se le pasó el shock inicial vio que tenía sentido lo que le pasaba y se dispuso a entrenar lo más duro posible.
Sin embargo, lo más difícil fue comunicar al equipo su misión.
Cuando los cinco reclutados llegaron a la sala de entrenamiento empezaron a hacer preguntas con tanta velocidad que fui incapaz de comprender alguna de ellas.
En vez de responder decidí soltar un discurso que tenía medio preparado.
-Chicos estamos aquí con un fin muy claro. Destruir a los Trionps.
Son un grupo que cuenta con un sistema tecnológico impresionante.
Fueron ellos los que enviaron los meteoritos a nuestras ciudades y las arrasaron.
Por ello, los Kiops decidieron pedirme ayuda para formar un grupo que pudiese plantarle cara. Y aquí estamos. Pido la máxima colaboración posible y que no haya muchas dudas al respecto pues quizás yo sepa lo mismo que vosotros.
No sé quiénes son los Trionps y mucho menos cómo hacerles frente.

En cuanto terminé empezaron a surgir preguntas de nuevo.
-¿Por qué nosotros? - Preguntó Bianca.
-¿Cómo un grupo de niños va a hacerles frente? - Soltó Sam.
En cuanto formuló la pregunta Natham saltó.
-Lo de niños irá por ti criajo.
En cuanto acabó la frase comenzó a desatarse el caos. No conseguía poner orden, habían empezado a discutir entre ellos y yo no sabía cómo pararlos.
-Chicos. Chicos. ¡CHICOS PARAD YA!
Al menos esta vez surgió efecto y se callaron.
-Estamos aquí para acabar con un grupo poderoso. No vamos a conseguir nada si nos peleamos entre nosotros. Sé que es difícil entender que nosotros vayamos a acabar con ellos pero si nos han elegido será por algo.
Evité decir que había sido yo el que les había escogido. No quería más problemas.
Se calmaron un poco.
-¿Y por qué debemos confiar en los Kiops? ¿Quién nos asegura que nos están diciendo la verdad?- Preguntó Sanda.
Era difícil responder a esa pregunta. Sobre todo porque ni yo mismo sabía si realmente podía confiar en ellos.
Lo que dijo Teo...
¿Cómo decían que no existía? Lo había visto y más de una vez ya.
No podía estar volviéndome loco. A pesar de ello, decidió ser sincero.
-No sé si podemos confiar en ellos. Sólo sé que no tenemos otra opción.
Sinceramente, prefiero estar aquí intentando hacer algo que volviéndome loco entre cuatro paredes blancas.
Parece que aquello acabó convenciéndoles.
Al menos estaban de su lado por el momento. Iban a acabar con los Trionps y a resolver todo aquello.

Comer sin ser comidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora