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Después de unos minutos ella despertó, yo estaba sentado en un sillón que estaba al lado de la cama y me levanté rápidamente.

-Hola- dije con una sonrisa y un tono de emoción.

Ella solo me miró como si no me conociera, -¿Hola?- preguntó al verme.

Empecé a sentir una sensación y un sentimiento muy raro, no sabía que estaba pasando y no aceptaba que fuera lo que estaba pensando así que llame al doctor.

Después de unos minutos llegó el doctor a examinarla, -¿Que tiene?- le pregunté cuando la termino de examinar, -parece que son solo los efectos secundarios de quedar inconsciente, como le dije el golpe fue muy duro y al parecer perdió la memoria- dijo haciendo que se empezarán a poner llorosos mis ojos.

-Temporalmente- continuó el doctor, le aseguro que mañana en la mañana ya volverá a recordar todo, si gusta puede intentar que recuerde quien eres y quien es ella, pero trate de no darle mucha información- dijo haciendo que suspirara aliviado pero a la vez estaba confundido.

-Trate de no decirle cosas graves de la vida de ella, como momentos tristes, la perdida de algún ser querido o algo que le pueda afectar- dijo para después irse.

Tal y como recomendó el doctor le dije quien era y trataba de hacer que ella recordara quien era, fue difícil pero aún así solo logré que ya supiera mi nombre y mis gustos, aún así no tenía ningún recuerdo conmigo.

-Sebastian- me llamo a lo cual la mire para que me dijera -¿Que hora es? Tengo mucho sueño- dijo a lo cual miré mi celular, me asombre al ver cómo ya era casi media noche.

-Son las 11, ya duérmete, yo iré a mi casa para cenar y traerme unas cobijas- dije mientras agarraba mis cosas para salir.

-No te vallas, no te conozco pero me siento bien contigo aquí, no me gusta estar sola en un hospital, eso da miedo- dijo al ver cómo me levantaba para irme a lo cual reí, era como una niña chiquita, no sabía que necesitaba ver esa parte de ella pero era muy tierna.

-Me tengo que ir, pero solo será por un momento, no me voy a tardar te lo prometo- dije con una sonrisa a lo cual ella solo me miraba.

-Tienes una sonrisa muy bonita, igual que tú- dijo haciendo que me sonrojara un poco, -está bien, vete pero no te demores- dijo con una sonrisa y después de unos segundos alistando todo me fuí.

Me dejó pensando lo que dijo, me hacía feliz que me hubiera dicho eso, la enana que conozco nunca lo hubiera dicho, o lo diría pero con sarcasmo.

Llegué ai casa y pedí algo de comer, comí mientras miraba mi celular, hablé con Osvaldo para contarle todo y el me dijo que todo iba a estar bien, después de comer lleve una maleta con unas cosas para pasar la noche allá.

Me subí al carro y manejé hasta el hospital, al llegar fui directo a la habitación de ___, ella estaba sentada con su cabeza agachada, no entendía nada así que me acerqué y pude ver qué estaba a dibujando algo.

-Hola- dije al ver que lo había notado mi presencia, ella solo levantó la mirada y me sonrió.

-Mira estoy dibujando- dijo pero aún no me quería mostrar que era, -¿Quien te dió la hoja y el lápiz?- pregunté, - la enfermera me los dió porque se los pedí- dijo con una sonrisa orgullosa.

Después de unos minutos mientras acomodaba todo lo que había traído ella me dijo que ya había terminado el dibujo y me lo mostró.

Sonreí al ver que era un dibujo de los dos, estábamos en lo que parecía un parque mientras comíamos, yo decía que me dolía la tripita y ella reía pero seguía comiendo, estaba viendo lo lindo que había quedado hasta que ví que estábamos con un perrito así que le pregunté quien era ese perrito.

-Oh, la verdad no sé- dijo entre risas -solo lo dibuje porque me gustan mucho y mi sueño de chiquita siempre fue tener uno- dijo con una sonrisa muy linda.

Ella se estaba quedando dormida minutos después así que yo doblé su dibujo y lo puse en la funda de mi celular, no se veía ya que mi funda no era transparente pero igual lo tendría ahí por siempre.

Al día siguiente me desperté porque me dolía el cuello, era de esperarse ya que estaba mal acomodado en la silla.

Mientras me estiraba pude ver qué ___ aun seguía durmiendo, inconscientemente me quedé viéndola, era muy linda, incluso dormida.

Dejé de pensar en eso y saque mi celular para revisar redes, estaba entretenido viendo tik tok hasta que ella se despertó.

-Sebas- su voz llamo mi atención, -hasta que despiertas enana- dije al ver que ya estaba despierta.

-¿Dónde estoy?- dijo confundida, estaba a punto de decirle pero tenía que asegurarme de que ahora sí recordaba todo.

-Te loz voy a decir, pero antes, dime quién soy- dije a ver si se acordaba, -estas wey o que, pues Sebastián, quien más vas a ser.

Me alivio un poco hasta que me llegó un pensamiento a la cabeza ¿Y si sabe porque le conté ayer? Empecé a rebuscar en mi mente algo de mi o de ella que no le hubiera dicho, pero le había dicho todo, exepto quien era Sabi.

-Estas en un hospital- dije rápidamente, -QUE- se limitó a decir ella, ya había cumplido con decirle donde estábamos, ahora necesitaba responder mi duda.

-Quien es Sabi- le dije y ella me miró extrañada, -pendejo, déjame procesar, ¿como que estoy en un hospital?- preguntó ella.

-Despues te cuento, responde la pregunta- dije serio, no sabría que hacer si solo se acordaba de lo que dije ayer, algo dentro de mi me decía que ya había recuperado la memoria por como hablaba, ya no parecía una niña dulce y amable, ahora solo era ___, no tenía nada de malo pero por su actitud presentía que ya había recuperado sus recuerdos, aún así tenía que asegurarme.

-Me asustas, pues tú ex novia ¿No?- dijo y por fin me sentí aliviado y la abracé, -que traes tripa quemada, estás muy rare amigue- dijo correspondiendo el abrazo.

Después le expliqué todo lo que había pasado, ella estaba sorprendida pero logro acordarse del accidente, lo único que no se acordó fue lo que pasó el día de ayer.

Llegó el doctor a examinarla y le dió de alta, tenía que guardar reposo así que la llevé a su casa y me quedaría con ella, pendiente.

you're my world (roier x tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora