𝐶ℎ𝑒𝑡𝑎 𝑒𝑛 𝑏𝑎𝑟𝑟𝑖𝑜||Danilo Sánchez||ᴀᴘᴀᴄʜᴇ||

[10]

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Cuando llegue a casa me bañe y al salir vi mamá ya está en casa.

—hola ma, ¿como te fue? —le di un beso en cachete.

—bien, ¿a vos en el cole?

—bien también —sonreír.

—me alegro

—Javier, ¿viene más tarde?

—si —respondió corta.

Me fui a sentar en el sillón y prendi la tele.

—hable con tu tía, viene mañana —hablo.

—¡encerio! —la mire contenta. Porfin.

—si. Mira que la semana que viene es su cumpleaños eh

—si ya se —me acordé del plan que tenía en mente. No estaba tan segura en decírselo, pero no perdía nada intentándolo. —hablando de eso... Te quería proponer algo

—que a ver— se apoyo en la mesada.

—bueno... Antes de todo, me prometes que no en vas a putear

—¿que me queres decir?

—¿me prometes o no?

—bueno, te prometo —asintió.

—bueno... —pause. —Te quería proponer ir a lo de los tíos, a su casa

—que-

—dijiste que no en ibas a putear —la interrumpi.

—no te estoy puteando, pero ¿como es eso de que queres ir?

—quiero ir por su cumple, ya que nunca vamos

—tu tía no va querer que estemos ahí y yo menos —se dio la vuelta.

—pero quiero ir de sorpresa, para su cumple, ella no hace nada nunca —justifique.

—si pero yo no quiero ir ahi dije

—ya se que no queres saber nada de ese lugar, pero si vamos... Te prometo que no voy a joder más con ese tema, encima, ya no es como antes ese lugar, es más tranquilo ahora

—¿y como sabes eso vos? —se dio la vuelta cruzada de brazos.

—eeh... —busque una excusa rápida. —Por que se, la otra vez hable con Gio por teléfono, y me dijo que está todo tranquilo ahí últimamente

—si pero tu tío es un pelotudo, dice pelotudeces, no le tenes que hacer caso

—ay, dale ma, te juro que no te jodo más si es que vamos —suplique.

Ella me miro algo dudosa.

—porfa, es solo una vez ma, te juro —junte las manos suplicando.

Nos quedamos unos segundos en silencio.

Suspiro. —esta bien —accedio. —pero nunca más me escuchaste —me apuntó.

—ay te amo —la fui a abrazar.

—bueno, bueno, solo por que estoy buena hoy, o si no no te dejaba

Reímos un poco y me separe. Nos quedamos mirando un rato hasta que se escuchó la puerta abrirse. Giramos a ver y vimos entrar a Javier.

—hola señoritas —hablo él.

—hola amor —le dio un beso.

—hola Javi —salude y chocamos cachetes.