P R O L O G U E .

2.4K 212 19
                                    




¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


ERA DE JUEGO
DE
TRONOS.





O M N I S C I E N T E .





LA DINASTÍA TARGARYEN HABÍA prevalecido por demasiado tiempo, hasta que llegó Daenerys y Rhaella Targaryen. Las únicas dos mujeres que quedaban con Sangre de Dragón.

Ambas hermanas se protegían mutuamente, siendo Daenerys la mayor y Rhaella la menor. Parecía ser todo lo contrario. Rhae juró cuidar a su hermana y eso haría incluso si eso significaba dar su vida por ella. Rhaella era más risueña y feliz, mientras que Daenerys era un poco más seria y fría.

—Los libros tenían razón —dijo la menor mirando Dragonstone.

Daenerys estaba impresionada. Nunca creyó poder tocar la arena de Dragonstone, aquella tierra que había sido habitada por gente.

—Me gustaría saber cómo era este lugar con nuestros antepasados —dijo la mayor.

Rhaella alzó la mirada y pudo ver a los cinco dragones volar por arriba del castillo. Ambas hermanas se acercaron a la enorme puerta que fue abierta por los guardias.

Tyrion Lannister y Missandei observaban cómo abrían la puerta, quedando shockeados al ver el pasto verde y las escaleras de piedra.

No pasó tiempo para que Daenerys y Rhaella fueran a entrar a la sala principal donde el trono de Dragonstone yacía ahí. El lugar era enorme. Las dos se acercaron a verlo de cerca.

—Vamos —expresó Rhaella yendo a otro cuarto oscuro del lado izquierdo.

Tyrion, quien seguía a ambas hermanas, decidió esperar afuera junto con Missandei y Gusano Gris. Allí había una habitación redonda con muros desnudos de piedra negra y cuatro ventanas largas y altas. En el centro había una inmensa mesa de madera tallada por orden de Aegon I Targaryen en los días anteriores a la conquista.

—Es totalmente oscuro —exclamó Daenerys mientras tocaba la mesa de madera.

—Necesitaría algo de luz —dijo Rhaella mientras posaba su mano en un costado—. Iré a explorar el resto del lugar.

Rhaella salió de la habitación y Tyrion entró en su lugar. Fue a caminar por los pasillos largos y fue allí que una habitación llamó su atención, pues tenía algo tallado en la puerta.

—¿A+V? —cuestionó confundida.

Entró al lugar. Un calor cálido se hizo presente y había una cama junto con una mini biblioteca. Se acercó pensando poder encontrar información sobre Dragonstone.

Sin embargo, al agarrarlo, algo llamó su atención: un nuevo color de pared que no era como el resto provenía de detrás del tomo que había movido. Intrigada, apartó el librero con fuerza y descubrió una enorme puerta. Al entrar, encontró un tapiz. En él, una mujer de cabello tan blanco como la nieve y ojos violetas, junto a un joven con la misma tonalidad de pelo y mirada penetrante, parecían estar inmersos en una escena misteriosa.

𝐅𝐎𝐑 𝐔𝐒-Aegon ii Targaryen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora