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Spreen nunca pensó que estaría con un tupper en las manos para dárselo a Shadoune como regalo.
Y es que antes de conocer a Shadoune solía burlarse de las omega que les llevaban comida a las personas que le gustaban e intentaban coquetear con ellos, pero el karma le llegó por burlarse de ellas.
— ¡Spreen! — Juan se interpuso en su camino, lo que menos quería — ¿Eso es para mi?
— No estoy de humor para lidiar con vos, Juan déjame pasar.
Intentó esquivar al chico pero este se lo impidió, colmando su paciencia.
— Deja tus ilusiones conmigo, Juan. Ya tengo alfa y de seguro querrá partirte la cara si se entera de tus insinuaciones — amenazó.
Gran mentira, Shadoune seria el tipo que lo resolvería con palabras, pero eso no lo tiene que saber.
— ¿T-tienes alfa? ¿No estabas sólo saliendo con Shadoune?
— Bueno, en realidad... — detuvo lo que iba a decir, aún no llegaba a sus oídos el rumor de que estuviera saliendo con Shadoune — ¿Y tú cómo sabes?, ¿acaso me espías? -
— ¿Por qué sales con él? — ignoró las preguntas del omega.
— No tengo porque darte explicaciones — dijo sin más, esquivando al pelinegro y yéndose de ahí.
Juan no supo que decir.
...
— Cocinas delicioso
— Lo sé, aprendí de mi mama — le dijo robándose un mordisco del Kimbap — Ella sí cocina rico
— Quisiera probar su comida algún día — murmuró para si mismo, aún así Spreen escuchó.
Y el omega estaría mintiendo si dijera que esas palabras no lo emocionaron.
— ¿Tienes planes para el sábado? — preguntó Spreen, el alfa negó — Mi hermana vendrá a Buenos Aires, quisiera que la conozcas
Shadoune se quedó en silencio unos segundos, procesando la reciente información.
¿Era real lo que estaba escuchando?
¡Spreen lo iba a presentar con su hermana!
¿Debería aceptar o era muy pronto? Claro que debía aceptar, ¿se tiene que poner algo formal o causal? Tendría que preguntarle a Spreen, quería que fuera casual porque así podría estrenar ese pantalón que se compro la semana pasada y usar...
— ¿Shad?
Salió de sus pensamientos, viendo como el lindo omega lo miraban con ojos curiosos.
— ¿No quieres? — preguntó desanimado.
— ¡Sí quiero! — se apresuró a hablar — Lo siento, sí quiero conocer a tu hermana, ¿Debería ir formal o causal? Quiero dar una buena impresión —
— Shadi, ella te amara, no más que yo, pero lo hará — le aseguró.
— Quiero que vea que soy digno de estar contigo
— Ya lo sos
La campana sonó, anunciando que el receso ya había terminado.
— Tengo examen de historia, lastimosamente— se apresuró a dejar un beso en la mejilla del alfa — Nos vemos en la salida, Shad
Spreen se fue de alli dejandoa Shadoune en las nubes, aún sin procesar bien la información
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