¿Primer paso o paso cero?

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Rainbow descubrió recientemente que piensa que Applejack es linda. Gran cosa. No es como si no pudiera apreciar la belleza de una mujer.

Rainbow aprendió a una muy joven edad que los chicos no eran para ella. Cuando se volvió adolescente y veía las novelas junto a su madre, no lograba encontrarle atractivo a los intereses masculinos de las protagonistas. Ella prefería que ellas se quedaran solas. Conforme fue creciendo más, fue prefiriendo que se quedaran con ella mejor. Especialmente cuando eran rudas, atléticas y fuertes.

Su primer enamoramiento, y lo que la llevo a su peor problema de adolescente, el que una vez pensó que la destruiría, ajena a la guerra que vendría tres años después, era la hija del dueño del local de tela. Siempre que acompañaba a su madre, la veía. Era mayor que ella, aunque nunca supo por cuantos años, ya que se veía bastante joven, pero tenía una moto, y un tatuaje ilegal que le mostró una vez. Recuerda lo nerviosa que se ponía y como parecía que su cerebro se desconectaba cuando la veía.

Rainbow estaba perdida.

Así que sí, no es la primera vez que encuentra linda a una mujer, y eso no debería ni será un gran problema.

Solo, claro, desearía que no fuera esta mujer. Applejack. La que Rainbow también anotó en su lista mental como molesta.

Pero está bien, no es la gran cosa. Rainbow estuvo en una guerra. Encontrar a alguien que considera molesto, lindo, no se compara con eso. Así que hace lo que siempre hace con sus problemas: lo ignora.

Después de su sueño, ni siquiera mira a Applejack. Lava sus utensilios usados a la hora de comer y se escabulle al trabajo. Luego, cuando escucha la radio en el salón y el invierno ha comenzado, lo que quiere decir que tanto Applejack como Big Mac están dentro de la casa, ella se sienta en el comedor. No se escucha bien desde allí, pero ella finge estar tomando té. Cree que Applejack se ha dado cuenta, pero la verdad es que Applejack ni siquiera parece notarla.

Ella sigue esta rutina durante una semana. Y se siente relativamente normal. El cartero llega, no hay noticias de Pinkie Pie, aunque no las esperaba pronto.

Entonces, Big Mac tiene que salir. Rainbow no sabe por qué, o a dónde, pero escucha sigilosamente la conversación desde el perchero, donde cuelga el feo uniforme.

Primero, lo detesta, porque eso significa doble trabajo. Luego, lo detesta aún más, porque significa más Applejack. Al cien. Duda que trabaje sola todo el día, así que es molesto darse cuenta que efectivamente tendrá que estar junto a ella mas de lo necesario.

Si no fuera porque fue enviada aquí, Rainbow pensaría que eso es lo peor que podría pasarle después de haberse roto la pierna.

Sin embargo, una vez ve a Big Mac alejándose en la carreta vieja y sucia que tienen detrás de la granja, sabe que no es lo peor.

Voltea y Applejack ya está dirigiéndose al puesto de Big Mac. A penas son las nueve de la mañana de un lunes. Se recuerda as sí misma que tiene que estar agradecida de no estar muriendo como sus camaradas, y la culpa se siente tan grande que podría ahogarse en ella. Mira sus botas rotas y desgastadas con asco. Asco de sentir tierra bajo sus pies y no sangre, que es lo que debería estar haciendo. No logró salvar a Soarin, así que se lastimó por nada. Las cosas deberían ser al revés, piensa.

Pero es lo suficientemente valiosa como para arriesgarse a la muerte. O al menos eso dijo Spitfire.

Y también se odia por eso.

Así que va a trabajar. Su fiel bastón es su único amigo en esta batalla. La maquinaria comienza a sonar antes de que ella entre, y ve el humo, que da la señal de que las moledoras están encendidas, y ella debería estar en su puesto de trabajo. Como puede, aumenta su débil velocidad de paso.

Arcoíris sin color. (sombraverse, appledash)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora