Capitulo 0

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Se sentía preocupado, no estaba listo para el último año de instituto, aunque ya tenía prisa de tener mayor tiempo de trabajo en el día y poder seguir estudiando en la noche, en algo que enserio le apasionaba.

Vivía en un piso junto a sus amigos Miguel Ángel,  Frank y Raúl, 2 de ellos decidieron salir de casa por la toxicidad que vivían en ella, y los dos sobrantes no tuvieron opción.

Frank ya estaba graduado, era el adulto del grupo y el que podía proveer un poco más de dinero que los otros Tres, los cuales después del colegio trabajaban en medio tiempo para poder subsistir.

El piso era algo grande, ninguno compartía habitación pero eran algo pequeñas, perfectas para ellos.
La sala, comedor y cocina era una sola, grande por supuesto, era el mejor lugar el cual pudieron haber encontrado.

—Rubén, ¿ya estás listo? Vamos a llegar tarde este año también—Suspiró— Aparte, ya perdiste la apuesta, Auron te acompañará después de clases ya que hoy los dos tienen libre en el trabajo—.

—No vuelvo a hacer una apuesta con ustedes— Soltó enojado—Ni a tomar en lo absoluto—pensó que la apuesta solo quedaría en eso, pero no fue así.

Era hora de salir rumbo al colegio, frank antes de que los 3 muchachos se marchen les preparó el almuerzo para el colegio.
Frank era como su padre, cuando los chicos tuvieron que salir de casa, estuvo dispuesto a irse de su apartamento para buscar uno más grande y estar con los chicos, no dejarlos solos en ningún momento y estar pendiente en sus estudios y salud.

El mayor aún recordaba el día en que llegó Rubén, el primero de todos que se mudó con frank. El muchacho tenía 15 años, se conocían en un parque de skate que el noruego tanto frecuentaba desde los 10 años, frank por su parte iba por la chica que en ese tiempo era su novia.
Le había gustado el carisma del muchacho y lo bien que patinaba, y decidió hablarle.

Desde ese día se hicieron inseparables, Frank es cuatro años mayor que el resto del grupo, cuando Rubén le pidió ayuda Frank este recién se había independizado, pero nunca le negó ayuda.
El prácticamente fue criado por su amigo quien siempre velaba por su seguridad, hasta el sol de hoy.

—Oye calvo, ¿pasas por nosotros hoy o te irás con tu chica?—vaciló Raúl—que me duelen los pies de ir del cole hasta casa, esta muy lejos—dramatizó, haciendo reír al mayor—.

—Claro que iré niño, quiero verlo... verlos—se ganó la mirada confundida de Raúl, la cual cambió a una mirada burlona—No comiences Raúl, quiero verlos a ustedes, asegurarme que no se están escapando de nuevo—soltó nervioso.

—Eres un viejo calvo, Alex es pequeño de porte y de edad para ti—Frank soltó una risa y le dió su almuerzo.

Los tres amigos se encaminaron hacia su colegio.
Al momento de llegar pudieron diferenciar a Alejandro entre todos los alumnos.

Pero no estaba solo, tenía 3 amigos cerca de él.

El noruego pudo diferenciar entre ellos, un chico pálido y de músculos, con ojos negros morados penetrantes, el cual lo conocía por ser el líder del equipo de futbol del colegio, quien ya había representado partidos intercolegiales los cuales casi siempre ganaban.

Rubén siempre tuvo algo de curiosidad sobre este chico, pero él era el popular del colegio, ni siquiera lo volteaba a ver.

Pero eso iba a cambiar.

Aquí estoy - RubegettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora