14.

397 41 10
                                    

Advertencias: stony como pareja principal, cositas lindas y fluff.

Steve estaba paseando nerviosamente frente a él, moviendo sus manos con evidente ansiedad, y Tony tampoco estaba colaborando mucho, callado y sin dejar de mirarlo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Steve estaba paseando nerviosamente frente a él, moviendo sus manos con evidente ansiedad, y Tony tampoco estaba colaborando mucho, callado y sin dejar de mirarlo.

Después de que Steve le dijera que era su ex prometida, Tony tuvo que sentarse en el sofá. No había dicho nada en todos esos minutos, a pesar de que su rostro parecía estar pidiendo una explicación. El único que hacía ruido alguno era Peter, sentado a metros de ellos y jugando con sus juguetes. El bebé no parecía entender qué estaba ocurriendo.

—Ella...

—Me dijiste que no tenías tiempo para esas cosas —le interrumpió Tony—, que no... Steve, ¿cómo puede ser tu ex prometida? ¿Por qué no me hablaste de ella? —añadió, con expresión herida.

—No es importante —contestó Steve, pero vio que Tony no parecía satisfecho con esa respuesta, y el alfa decidió sentarte—. Escúchame, precioso, no es lo que estás creyendo. Ella y yo... salimos hace muchos años, ¿está bien? Cuando yo tenía diecinueve y ella dieciocho.

Tony quedó sorprendido con sus palabras, porque eso significaba que ocurrió por lo menos once años atrás. Steve debía ser recién un estudiante universitario, al igual que Sharon.

—¿Cómo? —tartamudeó, atónito.

Steve parecía algo avergonzado.

—Vengo de una familia... tradicional. Los matrimonios concertados son pan de cada día. Sharon... es hija de una amiga de mi padre, y ellos creyeron que sería buena idea —Steve rascó su nuca—. Lo acepté al inicio, ella y yo nos conocimos y teníamos muchas cosas en común. Puedo decir que me gustaba.

Tony escuchó todo en silencio, sintiendo una pizca de celos por esas últimas palabras. No debería desconfiar de Steve, se lo estaba explicando todo con calma, pero no podía evitarlo. Esa dolorosa relación con Tiberius le dejó muy inseguro acerca de tener novio, a pesar de que no quisiera demostrarlo, porque temía demasiado volver a ser utilizado. No quería quedar como un idiota, con el corazón roto por haber caído ante las redes de un nuevo alfa.

—Estuvimos comprometidos dos años cuando me di cuenta de que no podía hacerlo. Sharon me gustaba como amiga, pero como nada más, y estar en la universidad abrió un nuevo mundo para mí, no limitado sólo a la burbuja en la que crecí —continuó Steve, agarrándole la mano—. Lo que quiero decir, Tony, es que la terminé, ¿vale? La terminé hace mucho tiempo, y no hay nada entre ella y yo. No quiero a Sharon de esa forma y tú eres el único que ocupa mi corazón, precioso.

—Pero... —Tony no podía evitar la desconfianza, los celos y el miedo—, pero ¿qué hacía acá, Steve?

El alfa le acarició la palma de la mano, como si quisiera relajarlo, sin embargo, seguía muy tenso. El encuentro con Margaret a la hora de almuerzo ya le había arruinado el día, y esto terminó por rebasar el vaso. Una parte de él quería volver a su departamento con Peter, aunque una más grande insistía en abrazar a Steve y acurrucarse contra él. Tony estaba un poco asustado de lo que podía significar eso.

WAY BACK HOMEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora