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{ "Me perteneces." }

En The Death Cure.

Habían llegado al edificio de CRUEL.

Thomas, Newt y Gally iban vestidos con los típicos uniformes que estaban usando los guardias de CRUEL para poder camuflarse y pasar desapercibidos ahora que ya no tenían ningun rastreador.

Gally iba el primero delante de ellos, vigilando a su alrededor. Newt y Teresa iban después, el chico cogiendo del brazo a Teresa para escoltarla.

—Esto no es necesario —habló Teresa mientras miraba como le cogía del brazo—, ya he dicho que no voy a resistirme.

Esta vez miró a Thomas, haciendo que Newt la empujara hacia delante, casi provocando un suspiro en Thomas. Gally los miró desde delante, viendo que estaban llamando la atención de los demás guardias.

—Newt, relájate un poco. —Dijo en bajo, ahora notando que los guardias los tenían en su punto de mira.

Pero Teresa había soltado un quejido adolorida cuando Newt había apretado el agarre en su brazo.

Thomas decidió que aquello ya era suficiente.

Se acercó con cuidado, apartando a Newt de la chica. Empujó hacia delante a Teresa, que fue atrapada por Gally, sujetándola del brazo. Thomas cogió el brazo de Newt, y antes de que el rubio se quejara, habló para ellos:

—Llévate a Teresa donde cortaremos la comunicación —le ordenó a Gally, que asintió sin replicar, la chica poniendo una expresión molesta en su rostro.

—Thomas, ¿pero qué coño...? —Newt se quejó, pero el chico lo ignoró y los llevó a ambos a una habitación pequeña, lo que parecía ser el cuarto donde guardaban las herramientas o los uniformes.

Empujó a Newt dentro de este, sacando una queja del chico, pero no le hizo caso y cerró la puerta tras él. Newt se quitó la máscara en cuanto estuvieron solos, jadeando y tirándola al suelo, su ceño fruncido en confusión.

—¿Qué mierda hacemos aquí, Thomas?

Thomas sabía cuando Newt estaba enfadado con él por el simple hecho de que, cada vez que lo estaba, el chico decía su nombre completo.

El castaño se quitó también la máscara, lanzándola al suelo y entreabriendo los labios. Newt lo observó y, sin decir nada, se dejó hacer cuando Thomas lo apoyó contra las vigas de hierro que había detrás suya.

—¿Qué tengo que hacer para que lo entiendas? —Thomas habló por fin, pero sólo lo confundió más—. ¿Eh, Newt? ¿Qué tengo que hacer para que entiendas que Teresa ya no me interesa?

Newt casi rodó los ojos. —Thomas, no tienes que darme ninguna explicación o si quiera hacer algo para que lo sepa. Ella solo hace esto porque tú se lo dices, porque piensa que sigues colada por ella.

—¿De verdad? Porque parece que querías romperle el brazo a Teresa hace sólo dos minutos. —Entrecerró los ojos, acercándose ahora a su cuerpo.

—Odio estar cerca de ella. Pero prefiero eso a que esté cerca de ti.

—¿Por qué? —intentó no gritar, pero estaba empezando a molestarse por el hecho de que siempre lo alejaba de Teresa—. Quiero una respuesta. Siempre es lo mismo contigo.

Newt apretó los labios, volviendo a una expresión enfadada. Thomas sabía que la había fastidiado con ese tono de voz. El mayor lo sujetó de la parte de los hombros del uniforme, estampándolo contra las vigas donde él había estado antes.

You belong to meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora