CAPITULO 1

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ALINA

— Cora por dios, sigues con lo mismo desde hace días, creo que es suficiente.

— Ay por favor, no me vas a decir que no has pensado en ello también.

Por supuesto que lo he pensado, pero decírselo solo le daría rienda suelta a su cabeza, alguien tiene que ser la persona cuerda.

— Por última vez, no estamos en una simulación — digo cansada.

— Eso tu no lo sabes — responde desesperada.

<<Que maldito karma estoy pagando para tener que seguir con esta conversación>>

— ¿Por qué no vamos por algo de comer? —  Muero de hambre.

Enseguida su cara se ilumina.

— Pero yo elijo que vamos a comer hoy.

<< Ah no, con mi comida no >>

— No.

Antes de que pueda decirme algo comienzo a caminar hacia nuestro lugar para desayunar.

— Oh vamos, nunca me dejas elegir.

— Porque mi comida es sagrada, además haces combinaciones que se ven de dudosa procedencia.

— Por dios, fue una sola vez.

— Bastó para no poderme despegar del baño por dos horas, Cora.

Seguido de ello, suelta una carcajada que provoca que varios alumnos de los que pasaban en los pasillos voltearan a vernos, pero poco me importa.

— Te ríes como una foca retrasada — suelta entre risas mientras nos alejamos.

***

Al cabo de un rato terminamos nuestras clases y nos encaminamos a nuestros respectivos autos.

Cora y yo compartimos algunas clases por nuestras carreras, yo estudio paisajismo y ella arquitectura. Muchas personas llegado el momento de tener que elegir una carrera de la que vivirán el resto de su vida les parece estresante y no tienen idea que hacer, no es mi caso, al contrario, desde pequeña he tenido una fascinación por las flores y supe que quería dedicarme a ello siempre y mi decisión se plantó totalmente al terminar la secundaria.

Cora no estudia lo que ella quisiera, estudia arquitectura porque no quiere decepcionar a sus padres y ellos la presionan. Su sueño es estudiar criminología, dejamos de hablar de ello hace tiempo porque ella insiste que lo mejor para ella es arquitectura.

La veo encaminarse a su auto alzando la mano en forma de despedida, levanto la mía en respuesta hasta que pierdo el tono rojizo de su cabello de vista.

Lo normal entre dos personas cuando se están conociendo es que se cuenten cosas del otro, pero en mi mundo intercambiar la más mínima información con alguien fuera de tu círculo cercano era traición o ponerse e riesgo, así que por el bien de Cora le dije una verdad a medias, para ella mis padres eran una de las familias más importantes de Palermo, y lo eran, pero no de la manera que ella se imaginaba.

Al principio decidí no contarle mi verdadera vida por desconfianza, temía que cualquier cosa que le contara la rebelara, con el tiempo me di cuenta que Corina no era ese tipo de persona, así que comencé a abrirme un poco más con ella, sin exponer a mi familia. Ahora decido no contarle mi verdadera vida por protección, sería un grave error.

Las cosas en mi mundo son totalmente diferentes al de ella, irónico porque vivimos en el mismo, pero con diferentes reglas. Cuando le conté de mis padres, ella mencionó a los suyos, su padre es de los mejores arquitectos de Italia y su madre la mejor abogada en el mejor bufete de Italia. Sentí una punzada de envidia porque ella podía presumir con orgullo a sus padres, mientras que yo tenía que armar una fachada para los míos, magnífico.

***

Tomar un baño es lo que necesito, me desespera sentir las gotas de sudor bajando por mi sostén. Entro al baño quitándome la ropa y abro la llave dejando que mi cabello se moje. Ahí en la ducha, deslizando la esponja por todo mi cuerpo, mi mente vuela e imagina que sería mi vida si no perteneciera al mundo en que lo hago, tener amigos, poder relacionarme con cualquier persona sin miedo a que acaben con su vida por el simple hecho de intercambiar algunas palabras, un mundo en el que no sintiera esta pérdida constante.

Cuando era pequeña soñaba con casarme, tener una familia, disfrutarlo con mi esposo, mis padres y mi hermana. Pero conforme pasaba el tiempo, me di cuenta que en mi mundo era imposible. Ahora pienso en mi futuro y lo único que veo es muerte.

Salgo de la ducha un poco más relajada, me pongo mi pijama favorito, que consta de un short y blusa blanco, esta con un estampado de la bella y la bestia en el centro. Adoro este pijama. Sí, puede ser infantil, pero yo la amo, además que fue un regalo especial. Claramente se nota que es mi favorita porque el short ya es transparente, tanto, que mis bragas se notan por debajo de la tela, pero no me importa, no es como si alguien fuera a verme vestida así.

Después de pasar horas haciendo bocetos, mis ojos ya comienzan a pesarme, así que apago mi portátil, guardo mis cosas y me voy a la cama. Mañana deberé continuar si o si. Joder.

***

¡Hola, holaa!

¿Qué les pareció el primer capítulo?

¿Qué opinan de la vida de nuestra querida protagonista? 👀

Espero que les guste tanto como a mí y que disfruten el proceso🫶 nos leemos pronto bellos...

Perversa Venganza (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora