-¡Lamento haber sido una idiota! ¡Tenía sólo veinte años! - Gruñí frustrada jalando mi cabello.
Ari estaba de pie observando la noche pero notaba debido al farol las lágrimas que escurrían en sus mejillas.
-¡Ya casi tienes treinta y sigues siendo...
Buenas aquí Saurex 🤘🏼 con una nueva adaptación rivari, espero les guste y la disfruten.
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Abril pov:
- ¡Leo! - Grité y mi pequeño de cinco años corrió hasta mí emocionado.
- ¡Mami! -
Se colgó de mi cuello y me aferre a el acariciando su cabello rubio
- Al fin llegas, estábamos aburridos - Murmuró mi novio dejando un beso sobre mis labios - El capitán pañales no dejaba de quejarse.
- Juan, no le digas así. - Me reí levemente.
-Nena, le encanta. ¿A qué si, amigo? - Preguntó
-No. - Bufó mi pequeño. - ¡Mami quiero ir con la tía Ama! - Gritó emocionado.
- Leo hoy no podemos, la tía Ama está con el tío Fili en su luna de miel, ¿lo recuerdas? - Asintió lentamente.
-¿Y cuándo se acaba? Quiero ir con La tía Ama a la nieve.
-Cariño, podemos ir con Juan. - Murmuré. - E invitar al tío Osvaldo.
-No. - Murmuró. - Ya no quiero.
El rubio giró sus ojos y tomó mi cintura mientras caminábamos hasta su auto.
-¿Cómo te ha ido en el trabajo, nena? - Preguntó.
-Bien, he tenido un turno libre, se han cancelado las últimas clases. - Murmuré. - Y los niños de preescolar no llevan mucho trabajo en una clase de artes... ¿Qué tal todo en la tienda?
-Mejor que otros días, ya sabes... Cargar cosas, firmar otras. Dolores de cabeza y todo eso...
-Debes ir a un doctor, haz tenido muchos dolores de cabeza últimamente, Juan. - Murmuré. - No quiero sonar paranoica, pero puede ser grave.
-Cariño, por favor. - Se burló. - Debe ser solamente el estrés por el matrimonio.
- Juan Guarnizo - Lo observé molesta. - Falta todo un año para eso, ve a un médico.
Juan me besó suavemente y abrió la puerta del auto.
-Princesa, por favor. - Insistió. - Vamos a almorzar a mi casa, luego haz dormir a tu hijo y... Podríamos divertirnos. - Sonrió.
-Yo también quiero divertirme, si mi mami se divierte es conmigo, no contigo. - Gruñó Leo.
Aún no acepta a Juan dentro de mi vida, le costó muchísimo cuando lo llevé a casa y le dije que tenía novio. Siempre fuimos sólo él y yo, no acepta otro hombre en nuestras vidas... Jamás debí decirle que él tenía dos mamás, desde ahí está empeñado en que quiere saber si su otra mamá también es rubia.