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Pov Bea

vi que Ava tenía una pequeña mancha de comida cerca de su boca así que acerque mi mano para limpiarla delicadamente. Luego de hacer eso ví como se sonrojo levemente y desvió la mirada, cosa que me sacó una sonrisa, creo que es la primera vez que veo a Ava sonrojarse desde que volvió, se ve hermosa.

-oh Bea, ayer recordé que tengo que comprar ropa y no tengo ni la menor idea de donde comprarla, podrías acompañarme?- habló volviendo su mirada a mí.

-claro, hay varios lugares que se me ocurre que te podrían gustar- dije sonriéndole.

-gracias- me devolvió la sonrisa.

-vamos- hablé después de un rato cuando ambas habíamos terminado de comer -no creo que tengas más nada que hacer así que podemos ir ahora a comprar tu ropa, vamos en mi carro.

-aaa cierto, vi cuando te compraste ese carro, necesito que me lo enseñes ya- dijo con sus ojos iluminados, recuerdo cuando estábamos en suiza y siempre insistió en que comprara un carro.

caminamos un poco hasta el jardín delantero donde tenía estacionado el auto, y cuando Ava lo vio sus ojos se iluminaron y sonrió casi automáticamente.

-es hermoso Bea, me alegra que lo hayas comprado- dijo aún sonriendo volteando a mirarme.

-si, es muy lindo- hablé devolviéndole la sonrisa -sabes? lo compré pensando en ti, en las veces en Suiza que me insistías en que comprara un auto- al decir esto me sonroje porque mis palabras habían salido casi que automáticamente y acto seguido vi cómo su sonrisa se hizo más grande.

abrí el auto y enseguida subió a verlo por dentro y no paraba de decir lo mucho que le gustaba. Un rato después ambas tomamos nuestros asientos y nos dirigimos a un centro comercial cercano.

al llegar caminamos por varios locales, ya habíamos comprado varias prendas pero Ava quería seguir viendo más, así que paramos en un local en donde varias cosas llamaron su atención.

-buenas tardes- saludó la mujer que atendía en aquel lugar con su mirada especialmente clavada en mi -en que puedo ayudarlas?- preguntó, acercándose.

-estamos buscando ropa para ella- dije amablemente señalando a Ava.

-ah claro, pero si tu necesitas algo puedes decirme, hermosa- dijo sonriéndome y luego volteó a ver a Ava, quien le sonrió de una manera tan falsa que me causó gracia.

-pensándolo bien, en realidad no me gustó nada- habló Ava agarrándome del brazo -ya podemos irnos-

-segura? dijiste que te habían gustado varias cosas, no quieres ver?- pregunté

-no, ya con lo que llevamos esta bien, vamos- respondió sonriéndome y luego volteando a ver de mala gana a aquella mujer cuándo volvió a hablar.

-bueno, siempre son bienvenidas cuando gusten, en especial tu, linda- me dijo haciendo que me sonrojara mas por lo fuera de lugar que estaba el comentario que por otra cosa y vi de reojo a Ava con una expresión pesada en su rostro, como de fastidio -ten- habló la mujer de nuevo extendiendo un papelito que suponía era su número.

-lo tomaré yo, muchas gracias- habló Ava casi que arrebatándole el papel de las manos antes de que yo pudiera agarrarlo, ocasionando una fuerte mirada fulminante por parte de aquella mujer -adiós- volvió a hablar Ava, si la mirada de la mujer había sido fuerte, la de Ava mataría universos.

-y esa que se cree?- dijo un rato después que habíamos salido del local y nos dirigíamos al carro.

-de que?- pregunté haciéndome la inocente, no iba a negar que me causaba algo de gracia esta situación

-como que de que Beatrice?- habló parando de caminar repentinamente y volteando a verme -se estaba tomando muchas confianzas y ni siquiera te conoce, o si?- preguntó mirándome intrigada

-no, no la conozco, tal vez solo intentaba ser amable- dije tratando de suprimir una sonrisa.

-claro, amable- murmuro rodando los ojos

-por que te importa? no me digas que... estas celosa?- pregunté tratando de encontrar su mirada

-que? celosa, yo? pss si claro- respondió fingiendo una risa y apresurándose a llegar al carro. al llegar encendí el auto y ambas entramos.

no hablamos por un rato pero no era un silencio incomodo, era un silencio que generaba tranquilidad, y eso me dio una idea de donde podíamos ir.

-bueno, llegamos- dije parqueando el carro.

-a donde llegamos?- preguntó Ava curiosa

-ya lo verás- respondí bajando primero del carro para luego abrirle la puerta.

caminamos un poco y llegamos al lugar que tenia pensado.

-wow, Bea esto es... hermoso- dijo contemplando la vista que tenia al frente. mientras se sentaba en el suelo y luego yo me senté a su lado, hacía mucho había encontrado este lugar y me parecía espectacular, era la cima de una pequeña montaña donde habían unas bancas y una vista hermosa, y lo mejor, casi siempre estaba solo.

-es cierto, me gusta venir aquí a relajarme y aclarar mis pensamientos desde que lo encontré- dije viendo también hacia el frente, duramos así un rato, sentadas en el suelo contemplando el paisaje, hubo un momento en el que Ava recostó su cabeza en mi hombro. El paisaje, el clima y la presencia de Ava hacían que todo este momento fuera simplemente perfecto.

-a por cierto había olvidado darte esto- habló rompiendo el silencio, fingiendo una sonrisa y extendiendo en su mano el papel que le había quitado a aquella mujer, pero cuando estuve a punto de agarrarlo, echó la mano para atrás impidiendo que lo tomara -o mejor no te lo doy- volvió a hablar abriendo el papel para leer lo que decía -"escríbeme cuando gustes, hermosa", ew, no, no le vas a escribir nunca- dijo arrugando el papel y tirándolo en un bote de basura que estaba cerca.

-y por que no puedo escribirle Ava? cuéntame, que tal si solo quería hacer una amiga?- dije acercándome a ella.

-claramente no quería una amiga Beatrice, se notaba desde lejos- dijo rodando los ojos haciendo ademán de levantarse pero antes de que eso pasara la tome del brazo impidiéndolo.

-porque te molesta?- pregunté aguantando una sonrisa, no se de donde estaba sacando tanta valentía para decir estas cosas, normalmente no hablaba mucho.

-quien dijo que me molestaba?- respondió ella alzando los hombros-me da igual, es más, si quieres llámala ahora

-segura?- pregunté y no respondió al instante, como si estuviera pensando.

-no- dijo volteando a verme y acercándose un poco mas a mi -ugh, si me molesta, en realidad me molesta mucho- puso delicadamente una mano sobre mi rostro -no me gusta que nadie mas te trate de esa manera Bea, me pone los pelos de punta- dijo volteando los ojos mientras acercaba lentamente su rostro al mío -quiero ser la única persona que te trate de esa manera-

-de que manera?- pregunté con un dejo de sonrisa teniendo su rostro peligrosamente cerca del mío

-de esta- dicho esto, me sonrió y cortó la distancia que había entre nosotras, fusionando nuestros labios en un beso que llevaba esperando un largo tiempo, y en ese momento, todo en mi vida pareció encajar como un rompecabezas.

"ese beso vale todas las lágrimas, toda la angustia, todo el dolor, toda la lucha, toda la espera (Colleen Hoover)"









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;)
imagínense a Bea con un Ferrari Purosangue gris oscuro ✨
<3

Valió la pena // Beatrice x AvaWhere stories live. Discover now