I HATE YOU, I LOVE YOU ︴Karlnap

Capitulo 12: Parque

Mientras caminaban bajo la suave luz de la luna, Karl y Sapnap se detuvieron en un claro del parque, rodeados por altos árboles y el susurro del viento entre las hojas. Se miraron el uno al otro con una mezcla de amor y emoción en sus ojos, sabiendo que este momento sería uno que recordarían para siempre.

--- "Sapnap, ¿te gustaría hacer algo loco?" --- sugirió Karl con una sonrisa traviesa en los labios.

--- "¡Por supuesto, Karl! ¿Qué tienes en mente?" --- respondió Sapnap, intrigado.

Karl sacó de su bolsillo un pequeño frasco de burbujas de jabón y una sonrisa juguetona se extendió por su rostro. Sin decir una palabra, comenzó a soplar suavemente, creando burbujas brillantes que flotaban en el aire y reflejaban la luz de la luna.

Sapnap se rió con alegría y se unió a él, creando un espectáculo de burbujas que llenaba el claro con su belleza efímera. Juntos, se sumergieron en la diversión simple y despreocupada, olvidando el mundo que los rodeaba mientras disfrutaban el uno del otro.

Después de un rato, se sentaron juntos en el césped, las risas aún resonando en el aire a su alrededor. Miraron el cielo estrellado, sintiendo una profunda conexión entre ellos mientras compartían este momento especial.

--- "Gracias por hacer esta noche aún más increíble, Karl. Eres realmente especial para mí." --- dijo Sapnap, mirando a Karl con cariño.

--- "Y tú para mí, Sapnap. Esta noche ha sido mágica, y todo es gracias a ti." --- respondió Karl, tomando la mano de Sapnap en la suya.

Con el corazón lleno de felicidad y amor, se quedaron juntos en el claro del parque, sabiendo que habían encontrado algo verdaderamente especial en el otro. Y mientras el mundo seguía girando a su alrededor, ellos permanecieron unidos, listos para enfrentar cualquier desafío que el futuro les trajera, siempre juntos.

Con el suave murmullo de la noche envolviéndolos, Karl y Sapnap se recostaron juntos en el césped, disfrutando del abrazo reconfortante de la naturaleza y el calor del amor que compartían. Los minutos parecían eternos mientras se perdían en la serenidad del momento, sin más preocupaciones que el latido tranquilo de sus corazones.

--- "Karl, ¿alguna vez has deseado poder detener el tiempo?" --- preguntó Sapnap, rompiendo el silencio con una voz suave.

--- "A veces, sí." --- respondió Karl, mirando las estrellas brillantes sobre ellos. --- "Pero entonces me doy cuenta de que cada momento que pasamos juntos es único y precioso, y no cambiaría eso por nada en el mundo."

Sapnap asintió, sintiendo una calidez reconfortante inundando su corazón. En ese instante, el universo parecía conspirar a su favor, uniendo sus destinos en un vínculo irrompible de amor y complicidad.

--- "Prométeme que siempre estaremos juntos, sin importar qué." --- dijo Sapnap, buscando la mirada de Karl con determinación en sus ojos.

--- "Te lo prometo, Sapnap. Siempre." --- respondió Karl, sellando su promesa con un beso suave pero lleno de significado.

En ese momento, el tiempo parecía detenerse, y el mundo entero desapareció a su alrededor, dejando solo a Karl y Sapnap, unidos en un amor que trascendía cualquier límite.

Con el corazón lleno de esperanza y determinación, se levantaron del césped, listos para enfrentar el futuro juntos, con la certeza de que su amor los llevaría a través de cualquier desafío que el destino les presentara.

Y así, con el brillo de la luna como testigo silencioso, Karl y Sapnap caminaron juntos hacia el horizonte, listos para escribir el siguiente capítulo de su historia de amor, unidos para siempre en cuerpo, mente y corazón.

Mientras caminaban de regreso hacia la ciudad, Karl y Sapnap compartieron sueños y planes para el futuro. Hablaron de viajes que querían hacer juntos, metas profesionales que querían alcanzar y pequeñas alegrías cotidianas que esperaban compartir.

A medida que avanzaban por el sendero, el aire fresco de la noche envolvía sus cuerpos, pero el calor de su amor los mantenía cálidos. Se detuvieron de vez en cuando para abrazarse bajo la luz de la luna, recordándose mutuamente lo afortunados que eran de haber encontrado el uno al otro.

--- "Sapnap, nunca antes había sentido algo tan fuerte por alguien. Contigo, todo parece posible." --- dijo Karl, mirando a Sapnap con admiración.

--- "Lo mismo digo, Karl. Contigo, siento que puedo conquistar el mundo." --- respondió Sapnap, apretando la mano de Karl con ternura.

A medida que se acercaban a la ciudad, el resplandor de las luces nocturnas iluminaba el horizonte, anunciando el final de su mágico paseo por el parque. Pero para Karl y Sapnap, el final de la noche solo marcaba el comienzo de una nueva aventura juntos.

Con pasos ligeros y corazones llenos de esperanza, se dirigieron de regreso al bullicio de la ciudad, listos para enfrentar lo que el destino les deparara, con la certeza de que mientras estuvieran juntos, nada podría detenerlos.

Y así, con una sonrisa en los labios y el amor como su guía, Karl y Sapnap continuaron su camino, listos para escribir su historia de amor en las páginas del tiempo, una página a la vez, hasta el final de los días.
837 palabras