ACCIDENTALMENTE ENAMORADAS - SuperCorp [Terminada]

CAPÍTULO 20

Como prometí esta el último capítulo de está noches, gracias por el apoyo 🥰💙

Días después...

— ... Los declaro marido y mujer. Puede besar a la novia — La oda de aplausos no se hizo esperar en cuanto Nía y Briany se miraron emocionados y luego sus labios se unieron en un beso corto y casto. Kara no dejaba de aplaudir emocionada mientras las lágrimas se le asomaban por los ojos.

Finalmente, después de dos años, ese par se había casado. Estaba tan feliz por ellos dos. Se veía a leguas que Briany era un hombre cariñoso y devoto a ella. Aunque su amiga Nía siempre hacía comentarios terriblemente inapropiados sobre su ahora esposo siendo un mujeriego y pervertido, nunca los entendió porque nunca le constaron; así que no le dio mayor importancia. Porque era evidente que se amaban y no había forma de negarlo.

La gente no dejaba de felicitarlos mientras la pareja iba saliendo del recinto, al ritmo del golgorio de los invitados. La familia de Briany era pequeña; no así la de Nía, que si bien era huérfana de padres, tenía tantos tíos y primos que la fiesta seguramente estaría desbordando de gente.

— Kara, ¿me acompañas un poco a tomar aire fresco? — Kara sintió el tirón en su brazo, mientras veía a la novia más abochornada del mundo escurrirse entre la gente, dejando a su novio a merced de las felicitaciones, en un intento vano en trasladarse a la recepción.

Habían sido terriblemente afortunados en conseguir que todo el evento pudiese llevarse en un solo espacio. La iglesia estaba junto al salón, que en realidad era un precioso jardín floral.

Así que ahora Kara iba detrás de la novia, que parecía caminar apurada y con pasos cautelosos, mientras encontraba una pequeña banca escondida entre los jardines y se sentaba, respirando suave pero con un ritmo más rápido de lo usual.

— ¿Estás bien, Nía? ¿Quieres que te traiga un poco de agua? —

— Estoy bien, Kara. Solo dame un segundo. Una... una de mis tías traía un perfume horrendo con olor a vainilla y me dio un asco terrible — Explicó Nía mientras se abanicaba, tratando de recomponerse — En cambio tú, hueles delicioso. Una mezcla de jazmín y naranja que no me cansaría nunca de oler — Kara se rió, de buena gana

— ¿Quieres que hable con tu tía y le pida que se cambie el perfume? — Soltó una carcajada — ¡Aunque no sé qué excusa le voy a dar! Seguramente lo primero que va a pensar es qu-... —

— Estoy embarazada —

— ... estás embaraz-... ¿Estás embarazada? — Kara le miró como si le hubiese crecido una segunda cabeza y abrió la boca en una O perfecta, sin salir de su shock — Nía, ¿Estás embarazada? — Nía se sonrojó furiosa antes de hablar, mirando hacia cualquier lado que no fuera su amiga

— ... Sí —

— ¡Nía! — Kara la atrajo hacia ella y la abrazó, mientras la castaña le devolvía el abrazo, tímida — ¡Qué hermosa noticia! Yo-... ¡ustedes dos son un par de pícaros! ¿Cuándo pensabas decírmelo? ¿Estabas esperando que me tragara el cuento de que se embarazaron en la luna de miel? — Nía estaba sonrojada mientras se soltaba del agarre y sonreía, con un brillo tan particular y precioso en los ojos

— Estaba pensando en decírtelo pronto. Es solo que con todo esto de la boda no hubo ocasión para hacerlo antes —

— ¿Y te pareció perfecto decírmelo este día? —

— Bueno, andaríamos emocionales de todas formas — Nía se encogió de hombros mientras la veía— Así que... ¿por qué no? Además... creo que es ahora o tal vez te enterarías muy tarde. Conociendo a mi familia, seguro poco te veré durante la celebración — Kara le dio un suave golpecillo en el hombro, antes de sonreírle con la genuina felicidad en los ojos. Nía le acompañó