No más patanes.

Capítulo 2

Y ahi iba yo, caminando hacia Daniel, no se que queria lograr Ari con esto,obviamente hablarle no me llevaria a nada,en realidad nisiquiera sabia que decirle, no teniamos nada en común NADA, nunca lo habia visto leyendo, o con un libro en mano, nisiquiera estaba segura que él supiera lo que era una biblioteca; pero ahí iba yo sin saber tema de conversación.
-Hola Daniel, ¿Quieres ir a tomar un helado conmigo?- dije sin ganas, el estaba con su grupito de amigos como siempre, obviamente todos se me quedaron viendo raro.
-Claro baby!- me guiño, el me habia guiñado el ojo?,alto habia aceptado? ¿QUÉ?, se supone que debia decir que no.
-Si?- hubiera jurado que estaba con la boca abierta por la sorpresa.
-Si! Es más vamos ahora mismo- me agarro de la mano y comenzó a caminar dejando a su grupito atras, no sabia como reaccionar, tenia que inventar algo para no ir.
-Se me olvidó mi cartera, mejor vamos después de clases- intento parecer normal pero el comienza a reirse y cuando pense que no podia estar más sorprendida dijo:
-Vamos Holly, yo invito, y quita esa cara, solo sera un helado- y volvio a guiñar el ojo, Dios mio! Sabia mi nombre!, Daniel Huw sabia mi nombre, digo no es que me importe mucho, solo me sorprendia que lo supiera, no era la clase de chica que media escuela supiera de su existencia.
-¿Cómo sabes mi nombre?- el sonrió pero no con una sonrisa burlona si no con una sonrisa amable.
-Claro que lo se!, también tengo amigos que van a la biblioteca, así que es imposible no saber de la dulce, hermosa, divertida y lectora Holly-
Reí inmediatamente al escuchar eso.
-¿Dulce?, ¿hermosa?, debe ser una broma, pero bueno no importa, de que sabor vas a querer tu helado?-
Gracias a Dios ya estabamos en la heladeria, adios platicas incomodas o no?.
-Chocolate obvio y tu?
-Fresas con crema-
-Fresas con crema? ¿Qué?, ay no, no te gusta el chocolate? Qué clase de persona eres?- dijo bromeando.
-No es eso, solo que el helado de chocolate me hostiga-
-¿Cómo te puede hostigar el helado de chocolate?- Ahora él era el sorprendido.
-De pequeña siempre pedia helado de chocolate así que al final termino hostigandome, lamento romper tus ilusiones Daniel- sonreí y el comenzó a reir, pidio los helados y fuimos a sentarnos a la mesa, y si, las cosas se podian poner aun más incomodas.