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Richard se despertó empapado de sudor frío y se sentó, recostado en el asiento duro del auto. Abrió su mochila y sacó la botella de agua, dándose un gran sorbo para aliviar su deshidratación.

Después de eso, se quitó los anteojos y se frotó la cara con las manos. Luego, se levantó para saquear el auto, encontrando en la parte de atrás una pequeña cartera. Al abrirla, encontró dos bolsas de condones, lo que le causó una mueca de disgusto.

—Ew.

Después de revisar la parte de atrás del coche, pasó al asiento del pasajero y encontró en el porta vasos varias botellas y latas de cerveza vacías.

Después, abrió la guantera y encontró una navaja, que guardó en su bolsillo. También encontró varios papeles relacionados con el automóvil, incluyendo el registro y el seguro, que no servían de nada, además de una caja de chicles, que también guardó para usarlo más adelante.

Luego de buscar dentro del carro decidió salir de el y buscar otro lugar para refugiarse como una casa o algo así.

Ya llevaba casi 3 horas caminando ya había entrado a un bosque estaba muy cansado, necesitaba buscar un lugar para descansar.

Sus ojos pesaban estaban a punto de cerrarse, de pronto, una de aquellas criaturas salió de detrás de un árbol y se abalanzó sobre Richard, tirándolo al suelo.

No contaba con su arma, la cual estaba en su bolsillo y no podía alcanzar, y tampoco tenía suficiente energía para luchar.

Simplemente forcejeaba y hacía lo posible para alejarlo, desesperado por no ser mordido.
De repente se escuchó un ruido ensordecedor, como un disparo, y Richard se preparó para lo peor, pensando que querían disparar le a el.

Pero sus pensamientos cambiaron al ver a la criatura caer "muerto" y al escuchar una voz detrás de él, descartando la posibilidad de que le estuvieran disparando a él.

—¡Ey, ey, ey, ey!

Se paró rápidamente al ver a un grupo de personas vivas y se apresuró a apuntarlos con su arma.

—¿!Quienes son ustedes!?—Pregunto alterado.

—Ey, ey, ey, tranquilo chico.— Hablo un hombre tratando de calmar al chico. —Mi nombre es Rick Grimes y ellos son mi grupo.

Richard permanecía inmóvil, presa del miedo. Aunque aún tenía su arma apuntada hacia Rick, temía que las personas con las que se había cruzado pudieran hacerle daño o algo perverso, permaneció callado aun con su arma apuntando al hombre.

—¿Como te llamas chico?— Pregunto Rick.

Richard dudó un momento antes de hablar, pero finalmente se decidió a revelar la información pensando qué tal vez lo podrían ayudar.

—Richie...Richie Gray.— bajo un poco el arma al hablar.

—De acuerdo Rich, te haré unas preguntas.

Richard aún tenía cierto grado de desconfianza, pero al mirar alrededor y no ver a ninguna persona que pareciera perversa, decidió asentir a Rick y guardó su arma. Después de eso, se acercó más a él.

Charlaron un rato y después de una corta conversación Rick le ofreció a Richard quedarse en su grupo.

—Bien...¿te quieres unir a nuestro grupo? Eres un niño no es seguro que estés solo.

Richard analizó a algunos del grupo, según él había un abuelo, un sheriff, un chino, un vagabundo, una embarazada y un niño que lo miraba feo.

—Está por obscurecer, tenemos que buscar algún lugar para dormir.— Hablo una mujer castaña.

Después de unas semanas encontraron una prisión, todavía a no era seguro entrar, el grupo estaba afuera al rededor de una fogata

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Después de unas semanas encontraron una prisión, todavía a no era seguro entrar, el grupo estaba afuera al rededor de una fogata.

—Hey, chino.— Saludo Richard a Gleen.

—Ya te dije más de mil veces que yo no soy chino, Rich.

—¿Entonces que eres?

—Coreano.

—Pues yo no veo la diferencia, chino.— Dijo Richard con una sonrisa la cual hizo que Gleen se riera un poco.

Beth y Maggie cantaban, Richie analizaba a todos los demás, se empezó a sentir observado así que miró a todos lados, su mirada se dirigió al niño que lo miró mal el primer día y lo estaba haciendo otra vez, así que el también lo miró, pero no lo miró mal, solo lo miró fijamente por un rato hasta que Rick habló.

—Deberían ir a descansar.

Eso hicieron y fueron a descansar.

Al día siguiente entraron a la prisión tuvieron que matar a algunos caminantes pero era seguro ahí adentro luego Rick dio instrucciones para compartir las celdas.

Pero Rick decidió que Carl y Richie compartirían una celda.
Al escuchar que Carl y Richie compartirían celda Carl volvió a mirar mal a Richie y él lo notó. Todos se dirigieron a sus celdas, Richie al llegar a la suya se recostó en la cama de abajo estaba muy cansado, no tenía energías, necesitaba dormir.

—¿Que rayos haces?— Hablo Carl

—Ehh, Descansando ¿No es obvio?

—La cama de abajo es mía.

—No veo tu nombre en ella.— Contesto poniéndose más cómodo.

—El tuyo tampoco está en ella.

—Me voy a quedar aquí.— Cerro sus ojos ignorando a Carl.

—No, yo quiero esta cama, bájate.

—No.— Contestó Richie lo que hizo que Carl se enojara más y empezó a empujarlo y forcejear para bajarlo de la cama.

—Ey, ey, ¡Suéltame!

—No. Bájate.— Carl siguió forcejeando jalando del brazo a Richie, este se enojo y empujó a Carl para pararse enfrente de el.

—Bien, Quédate con la cama de abajo.— Habló Richie con el ceño fruncido.— Caprichoso...—Dijo y salió de esa celda.

Apocalypshit Donde viven las historias. Descúbrelo ahora