¿𝐹𝑟𝑖𝑒𝑛𝑑𝑠? - [ℎ𝑒𝑒ℎ𝑜𝑜𝑛]

5

Sunghoon no pudo dormir en toda la noche, había llorado hasta que sus ojos terminaron hinchados y ya nada salía de ellos.

Cerca de las ocho de la mañana, comenzó a oír ruidos en la plata baja. Al parecer Heeseung había despertado.

Aunque no tenía ganas de hacerlo, se terminó levantado de su cómoda cama, su estómago rugía por obtener algo de comida. Estaba muy hambriento, ayer no pudo alimentarse correctamente.

Tomó un buzo que originalmente le pertenecía a Heeseung y se lo colocó, salio a pasos lentos hasta llegar al comedor, donde pudo divisar a su novio ahí, desayunando tranquilamente.

— Oh, buenos dias precioso. — dijo a penas lo vió, mientras en sus labios se formaba una hermosa sonrisa.

— H-Hola...— titubeó un poco pero le devolvió la sonrisa.

Los recuerdos de la noche anterior le llegaron cuando se sentó en la silla frente al mayor.

Las palabras de amor que Heeseung le dedicó en sus primeros meses de novios, ahora se habían transformado en crudas frases de desprecio total

Los bruscos toques en su piel, que no se comparaba con la delicadeza que usaba Lee en su primer año de parejas.

Heeseung lastimó su cuerpo ayer, sin importarle nada...pero el Heeseung de hace años hubiese preferido dañarse él antes de que algo le pasará a su preciado novio.

Todo había cambiado, Sunghoon no supo exactamente desde que momento, pero si sabía que ya nada iba a ser como antes.

¿Valía la pena continuar juntos?

¿Su lugar seguía siendo al lado de Heeseung?

¿Debería pedirle un tiempo, o...terminar todo de una sola vez?

Pero...el amaba tanto a Heeseung.

— Bebé, ¿quieres café? — preguntó Lee, mientras se levantaba de su lugar.

— Yo...sí, por favor, hyung.

— Excelente, entonces me aseguraré de preparar un delicioso desayuno para mi Hoonie.

Heeseung rodeó la mesa, quedando parado al lado de la silla de Sunghoon.

— Te amo mucho, ¿sí?

Agarro su cara entre sus frías manos y dejó cortas caricias sobre sus mejillas, luego lo besó. Heeseung lo besó, y él sintió que por un instante todo estaba bien, que su relación seguía siendo igual al primer día.

Su Heeseung...

El chico que lo enamoró desde que se conocieron.

El chico que estaba temblando cuando le pidió una cita.

El chico de mejillas sonrojadas que le pidió para ser novios de la forma más crusi posible.

El chico que se robó su primer beso.

El chico al que le entregó su primera vez.

El chico con el que decidió vivir.

El chico con el que se imaginó una vida entera.

El chico...el chico que ahora solo parecía querer acabarlo, destruirlo y deshacerse de él.

Pero no podía dejarlo, nunca podría.

— También te amo, Heese...— y lo abrazó, permitiéndose disfrutar de estar rodeado de aquellos brazos, los cuáles se sentían diferentes a la noche anterior.

Todo iba a estar bien...solo es una etapa.

El desayuno estuvo lleno de risas, conversaciones fluidas y besos robados.