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Habían pasado ya 2 meses y el olor a sangre en Stiles no había desaparecido, ni disminuido nada.

Y eso Derek no podía ni quitárselo de la cabeza.

Por mucho que se camuflase con el pestazo a tabaco, la sangre seguía ahí.

Así que no pudo evitar ir a hablar con Melissa, al hospital con quien la encontró con la hermana de Deaton y el Sheriff hablando seriamente.

Seguramente sería de algún paciente en conjunto.

No quiso escuchar nada, así que no usó en ningún momento el oído de lobo por no meterse en donde no lo llamaran.

Si fuera algo importante se lo contarían seguramente.

- Estoy preocupado por Stiles, creo que le pasa algo – Fue directo al grano sin siquiera saludar. Es más importante su novio que ya ni le hablaba que los estúpidos modales – Sigo oliendo sangre en él.

Para su sorpresa le contestó Morrell.

- De él estábamos hablando, psicológicamente no creo que lo esté procesando bien, no reaccionó apenas a que lo violaran varias veces y le mataran a golpes a su bebé, al principio supuse que se apoyó mucho en ti y en Adrianna, pero tras su muerte... nos preocupa y mucho.

- Scott me estuvo comentando el otro día lo de la sangre, así que estaba hablando con la señorita Morrell, para saber si mis sospechas pueden ser ciertas – le habló muy preocupada Melissa.

¿Qué podrían estar pensando para estar así?

Nada bueno seguro.

Y eso no le gustaba ni un pelo a Derek.

- Pensamos que Stiles se puede estar autolesionando – Habló por primera vez roto Noah Stilinski.

El pobre hombre ya no podía más, y se le veía en la cara. Parecía que todas las cosas malas le pasaban a su familia.

- De ser así tendríamos que ingresarlo otra vez en Eichen House – le comentó Melissa.

Pero, ¿cómo lo iba a pagar su padre? Entre tener que pagar todas las medicinas de Stiles y la universidad con todos los gastos, internarlo en un manicomio lo hundiría.

Pero Stiles lo necesitaba.

- Yo lo pagaré de ser así – Se ofreció, aunque todo concordaba y lo odiaba, no sabía cómo podría hacerse daño si nunca estaba solo.

Ahora estaba con Scott.

Pero mejor estar asegurados.


🐺🐺🐺

Fueron los 3 a la casa de los Stilinski ya que Melissa tuvo que quedarse en el hospital.

Pero una alerta alarmó a Derek.

La casa estaba silenciosa, demasiado silenciosa.

Si Stiles hubiera salido con Scott él le habría avisado.

Y había un gran olor a sangre.

Corrió alarmando a los demás directo al dormitorio del chico.

El olor venía del baño.

Estaba echado el pestillo.

Escuchó atentamente.

Había un latido muy débil que le aterró.

La abrió de un golpe encontrándose con su peor pesadilla.

Stiles se encontraba inconsciente en el suelo rodeado de un charco de sangre.

Corriendo lo cargó y se dirigió al coche de policía del Sheriff que lo siguió corriendo al verlo salir de la habitación de su hijo con este en sus brazos.

No paró de gritarle al amor de su vida que siguiera luchando, que aguantara que resistiera unos minutos más.

Lo suficiente para salvarle la vida.

Morrell presionaba las heridas que tenía en el vientre que casi le hacían vomitar.

Tenía todo el torso cubierto de heridas hechas con claramente algo afilado.

En ellas se podía leer las palabras: PUTA, SUCIO, MONSTRUO, ADRIANNA, BEBÉ, INÚTIL...

Algunas ilegibles.

Algunas más viejas que otras.

Quien sabe cuáles son suyas y cuáles de los animales que lo torturaron.

Pero ahora lo importante era que él llegara vivo al hospital.

¿Quién sabe? Tal vez él también necesitaría un psicólogo después de esto.



N.A: Capítulo extra corto, pero lo quería subir ya. Así que aquí tenéis.


No creo que puedas - SterekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora