8

103 9 1
                                    

Stiles sentía como todos daban vueltas a su alrededor, todos hablando, sobre cómo era posible, quien era el padre, o si era bueno o no ser padre a los 20 años que tenía.

Sitió como su padre echaba a todos de la habitación, para luego, tras muchos gritos hacia ellos, abrazarle con fuerza.

Noah Stilinski no entendía por qué su hijo tenía que estar en todos los problemas, ya había sufrido antes, como el nogitsune y muchas otras cosas que seguramente no le contaría.

Las lágrimas se le escapaban por la frustración de no poder hacer nada por su hijo.

¿Por qué él?

¿Por qué siempre él?

No es justo.

Ni de pequeño se libró con Claudia enferma, haciéndole pagar muchas veces a Stiles.

No comprendía por qué su hijo no podía tener una vida normal, después de todo lo que había pasado.

Se odió a sí mismo por no haber protegido lo suficiente a su hijo.

Por no poder evitar que él hubiera pasado por tanto.

Y sobre todo por no ser el padre que Stiles se merecía.

Lo abrazaba con fuerza, no quería soltarlo.

Pensaba en el pobre niño que vendría al mundo, porque conocía a su hijo y acabaría teniéndolo.

Porque un bebé no tenía la culpa de ello.

Pero, ¿cuánto sufriría en el proceso? ¿Sanaría el nuevo Stilinski las heridas de su hijo?

Porque ese bebé da igual quien hubiera dado el esperma, él no tenía la culpa de ser hijo de un violador.

Y aunque estaba seguro de que, aunque ahora no lo creyeran mucho los demás, ese bebé sería muy amado por la manada.

Stiles solo podía pensar en una cosa.

Un bebé.

Un hijo.

Otra vez estaba embarazado.

Pero esta vez el bebé no tendría padre.

Estaría solo.

Tendría solo a Stiles.

Sería odiado seguramente toda su vida por algo que su padre había hecho.

El aire le comenzaba a fallar, su corazón latía nerviosamente.

Un ataque de pánico venía con fuerza y no se calmaría.

No conseguía calmar su respiración.

Era el más fuerte que había tenido en toda su vida.

Odiaba no tener el control de ello.

Sintió como su padre le llamaba a gritos y como volvía a entrar algunas personas a la habitación, pero no podía hacer nada.

No podía respirar, sabía que lloraba por las lágrimas que sentía por toda su cara, pero no podía hacer nada, estaba paralizado del pánico.

Sintió una aguja clavarse en su piel, para luego sumirse en la oscuridad, otra vez perdido en los recuerdos.

Pudo despertarse poco después, llevaba la bata y seguía atado a la camilla, los científicos le seguían inyectándoles cosas y haciéndole pruebas para el cáncer que le habían dicho que sufría.

La rata le dijo que no sabían dónde tenía exactamente el tumor, así que había dos opciones: o hacerle una operación y abrirle de par en par para sanarle, o como indicaban sus sospechas castrarlo, porque pensaba que tenía tumor de testículos y así hacerlo más sencillo.

Pero acabaron tranquilizando que iban a hacerle unas ecografías en su vientre para ver si había tenido más tumores o algo, para situarlos.

Si no era así tomarían la segunda opción, por mucho que les dolieran.

Porque necesitaban más como Stiles para tener más curas.

Como no, la ecografía se la hizo el D. Rata.

Stiles intentó ignorar todas las burlas amenazas vanas y asquerosas que le hacía.

No quiso mirar la pantalla, no le importaba que habría en ella, si se moría mejor, así esos capullos no conseguirían nada.

- Joder, ¿qué coño es esto? – fue lo que alarmó al chico.

Nunca había visto a Jason quitar la fachada de imbécil delante suya.

Miró la pantalla y le pareció distinguir la silueta de... imposible.

- Vaya Stiles, parece que estás lleno de más sorpresas de las que pensábamos.

Chequeó el bebé, haciendo resonar su latido por la sala.

Las lágrimas comenzaron a volver a caer inevitablemente.

Estaba embarazado iba a tener un bebé.

De Derek.

Y ese bebé iba a nacer en las garras de esos monstruos.

Ese bebé no sería libre.

Sería tratado como conejillo de indias.

Y Stiles no podía ver eso.

No podría vivir con ello.

- Parece que el feto está algo débil, supongo que por todo lo que te metemos en el cuerpo, pero es fuerte como tú, es una sorpresa que haya sobrevivido – Dijo contento mientras cojía una jeringa y metía un líquido en la vía de sangre – lamentablemente, no podemos seguir metiéndote cosas Stiles, por ahora.

No pudo decir nada Stiles, se sentía entumecido y adormilado. Notaba como le soltaban de la camilla mientras perdía de nuevo el conocimiento.

Otra vez.

Como odiaba Stiles esto.


--------------------------------

NA: Lo siento, se que no es largo, pero no tenía pensado poder escribir hasta dentro de mucho tiempo y quería subir algo, además estoy escribiendo a las 01.45 y mañana me levanto a las 6.30 asi que dadme las gracias votando y comentando y os subo el siguiente capítulo lo antes que pueda.

Atención, el capítulo que viene ya empiezan cosas interesantes y creo que os gustará, aunque será mucho mas drama para Stiles.

Será capítulo largo, asi que aunque escriba en mis tiempos libres, no se cuándo podré publicarlo.

Pero será largo. Lo prometo.

No creo que puedas - SterekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora