En un parpadeo, las horas escaparon como arena fina entre los dedos y tan rápido como el susurro de un secreto al viento, los días volaron, fugaces como estrellas que atraviesan el manto oscuro del cielo.
En un instante las dos semanas pasaron y tal como se tenía planeado, ese fin de semana regresarían a "casa" para un divertido y bendecido fin de semana.
Por supuesto no olvidaban que venían a devolver la llave que Miku se quedó por "accidente".
Se sentían apenadas por los problemas que pudieron ocacionar y por ende debían ir todas y ayudarla a disculparse por robar la llave...
Y claro... Si se quedaban uno o dos días ahí y disfrutaban pues, no estaba demás.
Ese viernes por la tarde, cuando el tren arribó y las puertas es abrieron, la tercera y última hermana en llegar bajó con una deslumbrante sonrisa saludando y disfrutando del aire de tokyo mientras en su mano una maleta con rueditas era empujada con emoción por ella misma.
En esta por supuesto, a pesar de ser algo normal o hasta algo pequeña, llevaba lo necesario para pasar el mejor fin de semana en mucho tiempo, eso sin mencionar algunas cositas para divertirse junto a las demás.
Miku:... Ahh, esperaba esto *susurro para si misma luego de un suspiro de alegría*
Yotsuba:¡hey Miku! *Gritó desde la cercanía*
Al momento de salir de la estación, la castaña divisó a unos cuantos metros la figura de la pelinaranja que la saludaba con alegría al lado de dos taxis mientras sus demás hermanas la veían desde dentro con una gran sonrisa.
Miku:¡Chicas! ¿Que hacen aquí? *Preguntó con alegría*
Ichika:tardaste mucho hermanita, así que decidimos venir por tí *respondió, sacando la cabeza por la ventana del segundo taxi*
Justo como dijo ella.
3 horas antes, las primeras en llegar a Tokio, la quinta, cuarta y primera de las hermanas se encontraron en el departamento charlando mientras esperaban a las dos últimas para iniciar su gran velada con gran emoción que apenas podían contener.
No pasó mucho antes que Nino y se uniera a su charla luego de darles un gran abrazo a sus hermanas por el tiempo que estuvieron separadas.
La única en faltar era Miku con quién Yotsuba se comunicó rápido para saber sobre su hora de llegada.
Al tener la información, tan veloces como gacelas, sus dedos se movieron sobre las pantallas de sus celulares para calcular, y luego de unos segundos de cronometrar y discutir sobre la hora aproximada de llegada de su tren a la estación, las 4 acordaron ir a recogerla para asi dar por iniciado ahí mismo su tan ansiado fin de semana.
Miku:si, lo siento por eso, tenía que dejar la tienda en orden y bajo buena supervisión antes de venir.
Nino:no te disculpes, ya quedó en el pasado, ahora entra vamos *respondió emocionada al asomar la cabeza desde el primer taxi*
Miku:hehe, ya voy, ya voy.
Yotsuba:te ayudaré con tu maleta, vamos entra *tomando el equipaje de su hermana*
Miku:gracias.
Una vez la Yotsuba tomó las cosas, está apresuró a meterlo en la parte trasera mientras Miku entraba en el 2do taxi.
Ya con todo listo los dos vehículos avanzaron uno seguido del otro.
Centrándonos dentro, mientras los autos se abrían paso hasta su destino, las chicas se encontraron hablando animadamente entre ellas preparando todos y cada uno de los detalles para el día siguiente, no querían perder un segundo en algo que no fuera importante y por ello debían aprovechar cada minuto que tuvieran para ello.
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Go tōbun No Hanayome:Fukushu-sha No jirenma
DiversosDespués de que el chico de sus sueños se graduará sin saber lo que sentían por el, las quintillisas nakano deciden seguir sus sueños cada una por separado, 8 años después, las 5 vuelven a reunirse sólo para saber qué un antiguo sentimiento las esper...