Labios granate

3. Un beso de alivio

Día 3: Robado

Trunks miró a todas las personas de aquel refugio que habían estado manteniendo a flote para las víctimas de Black. Buscó insistente con su mirada a la mujer que lo había estado acompañando en todo eso desde que su madre había sido asesinada.

Sintió su corazón paralizarse por un momento mientras sus pulmones se quedaban por escasos segundos sin oxígeno debido a la emoción.
Pudo ver la silueta de ella con su abrigo verde oscuro y su cabello negro como la noche, no estaba mirando hacia donde él estaba ya que se encontraba abriendo una lata de comida para un pequeño niño.

Aquí tienes- dijo Mai sonriente, le dio un tenedor que había lavado hace poco para que fuera seguro su uso. El niño le agradeció con amabilidad antes de alejarse de ella con la lata- Ten cuidado con los bordes, son filosos-le advirtió. El niño asintió antes de irse con la comida, la mayoría de las personas allí estaban hambrientas debido a la gran escasez de comida.

Mai-dijo Trunks acercándose a ella corriendo, ella volteó de inmediato al escuchar su nombre con esa voz masculina y a la vez tan dulce que conocía muy bien.

Trunks, estás bien-dijo con alegría Mai, el muchacho la abrazó fuertemente sin que ella pudiera hacer nada antes. Lo miró sorprendida, notaba que Trunks estaba temblando, probablemente había tenido mucha ansiedad antes de verla allí.

Tú estas bien-dijo Trunks sin dejar de abrazarla- No sabes cuánto me alegro de eso- le aseguró, aflojó la fuerza con la que estaba dándole aquel abrazo ya que no quería lastimarla.

Claro que si, yo también estaba preocupada por ti-dijo hasta que notó que Trunks tenía sus ojos llorosos- No llores por cosas que no sucedieron, los dos estamos bien, es lo importante- dijo mientras tocaba su mejilla con suavidad.

No le agradaba verlo así, ver al muchacho que la había acompañado en tantas situaciones difíciles en ese estado por ella lograba que su corazón se estrujara. Él no merecía sufrir más después de todo lo que ya le había pasado.

Ven, puedo conseguirte algo de comer y podemos hablar un momento si quieres- le sugirió ella para poder ayudarlo a calmarse, aunque ya no parecía que él quisiera llorar si notaba su expresión algo sombría. Definitivamente no estaba bien todavía, podía asegurarlo debido a lo mucho que ya lo conocía.

Sí, está bien- dijo Trunks mirándola fijo, Mai lo miró confundida al notar que él no se movía de donde estaba parado por mirarla a ella.

¿Qué?- preguntó la chica de cabello negro confundida, Trunks se acercó a ella un poco más acortando la distancia entre ellos de repente. Mai no supo lo que sucedería hasta que sintió el roce de los suaves labios de él sobre los suyos.
Se sonrojó desmesuradamente mientraS sentía un gran calor en sus mejillas, a su vez, sus pensamientos se desmoronaban dejando su mente en blanco. Sintió que su corazón dio un vuelco al poder confirmar que lo que ella sentía por él era recíproco.

Trunks se apartó de ella luego de pocos segundos con algo de color en sus mejillas también mientras dejaba ver una pequeña sonrisa, aunque sabía bien lo que había hecho no creyó que tendría el valor de hacerlo así.

¿Quieres que hablemos? Tengo algunas cosas que comentarte- le propuso con su tono caballeroso de siempre, la chica asintió aún con una mueca nerviosa y muy ruborizada. El hombre que le gustaba le había robado un beso de repente, era una sensación increíble.

Lo vio empezar a caminar mientras ella le daba tiempo a su cuerpo a reaccionar y seguirlo. Era la primera vez que se sentía embelesada así por alguien tan amable y honorable como lo era él.

Disculpa mi imprudencia, no quería incomodarte- dijo Trunks dándose la vuelta, aunque notó que Mai estaba varios pasos más atrás que él. Había decidido hablar primero ya que no había escuchado ninguna palabra más venir de ella.

Mai lo miró sorprendida y avanzó para acercarse a él, lo miró con ternura aunque todavía seguía procesando lo que había sucedido.

Dime qué pasó, vamos allá-dijo con confianza en sus palabras, Trunks le sonrió mientras afirmaba lo que ella le había propuesto.
Mai le plantó otro beso en los labios a él sin que Trunks pudiera prevenirlo y luego se dirigió corriendo hacia el lugar donde los dos iban a sentarse siempre cuando estaban en el refugio mientras aclamaba su nombre para que la siguiera.

El muchacho la miró correr hacia allí con una sonrisa y las mejillas un poco rojas por lo que acababa de pasar. Era muy reconfortante saber que los dos sentían lo mismo por el otro.

Ven, no hay tanto tiempo- lo apuró Mai desde donde estaba, Trunks volvió en sí y comenzó a caminar hacia donde estaba ella.

Sí, ya voy-dijo con su voz tranquila, se había dado cuenta de eso en cuanto sintió una inmensa felicidad al poder verla otra vez después de lo que había pasado.

Si las cosas salían bien de lo único que estaba seguro era que sería feliz si podía seguir viendo a Mai todos los días que restaban de su vida.

Buenas noches!!! Esta noche les traigo el tercer drabble del desafío Kisspril, en esta ocasión el shipp seleccionado para el beso robado es el Trumai. He leído algunos fanfics de esta pareja pero nunca me he atrevido a escribir alguno de los shipps de Trunks, espero sea de su agrado. Nos leemos en la siguiente parte.

Niebla.