Capitulo 10

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El cielo se estaba nublando, Ezran dejo a cargo a callum como regente mientras el no estaba, ambos hermanos obligaron a la platinada a ir con el médico para que revisara sus heridas
Ezran se fue sin embargo dejo en claro que reina era una invitada real y se le tenía que tratar muy bien.

Estoy bien callum ya te lo había dicho -rayla exclamó- no necesito un doctor.

- vamos Rayla solo que te revisen- callum razonaba con ella

- muy bien, pero una revisión y ya- Rayla se rindió

Un señor de unos 40 años llegó tenia lentes y una barba blanca con mechones cafés, era el doctor que traía consigo un maletín.

- me dijeron que me necesitaban gran mago- el doctor dijo haciendo una reverencia a callum.

- podrías revisar la herida de mi amiga por favor- dijo callum aunque aún le incomodaba lo de gran mago.

- por supuesto, donde está la herida?- el doctor procedió a acercarse a la elfa de luna

Rayla incómoda se levantó la camisa y enseño la herida con un poco de sangre en su ropa

- fue una herida profunda, necesita limpieza y reposo sin movimientos bruscos por 3 días mínimo- el doctor dio las instrucciones.

- no se preocupe doctor, eh tenido peores ya está muy bien- dijo Rayla en un intento de levantarse.

- las seguirá al pie de la letra- dijo callum poniendo una mano en el hombro de la elfa haciendo que se vuelva a sentar.

Rayla se sentó de mala gana, no le gustan el reposo no estaba acostumbrada a descansar después de una herida.

Un rato más tarde

Lluvia caía sobre el reino de katolis el gran mago se encontraba en su estudio verificando cosas sobre el reino, Rayla por su parte se encontraba en su cuarto en el reino de katolis una habitación contigua a la del príncipe.
Rayla estaba recostada afilando sus cuchillas hasta que tocaron la puerta,la puerta se abrió y una joven sirvienta entro a la habitación

- el príncipe me encargo estar a su servicio mi lady- dijo la sirvienta

Aquella sirvienta era joven pelo castaño piel blanca aunque un poco bronceada, sus ojos azules, no más de 16 años le calculaba.

- oh, muchas gracias pero estoy bien- Rayla le respondió, nunca había tenido nadie a su servicio, se sentía completamente capaz de hacer todo por su cuenta no la malentiendan pero los elfos de luna no tenían sirvientes en si, cada quien hacía su parte y todo funcionaba correctamente.

- me llamo Alice, mi lady- la sirvienta hizo una reverencia pues le daba miedo aquella elfa, no era muy común que las invitadas afilaran cuchillas mientras descansan.

- oh no no no solo dime Rayla- dice Rayla un poco incómoda, no se sentía una señorita de ropa elegante o modales era una asesina, fue entrenada y sus amigos le patearian su trasero ahí mismo.

- muy bien entonces me retiro- la sirvienta se fue dejándola.

Mientras con callum

- príncipe- la sirvienta Alice tocó la oficina del gran mago escuchando un adelante, un sonrojo se vio en el rostro de la sirvienta pues el joven príncipe había crecido y se había puesto más atractivo.

- paso algo? Rayla está bien?- callum pregunto pues no la había visto en todo el día.

- claro, ella dijo que no necesita mis servicios solo venía a avisarle- dijo la sirvienta.

- así es ella, solo podrías revisar que esté bien por favor- dijo callum volviendo a su lectura sobre cosas del reino.

- me retiro, mi príncipe- la sirvienta se fue. Pero en su mente pensaba - ni siquiera me volteo a ver, soy mejor partido que esa elfa- y procedió a irse.

Con Rayla

- hay no- Rayla se había levantado y puesto un pijama pero vio que su ropa estaba rasgada de un costado, necesitaba hilo y aguja. Pues era su ropa de asesina de guardia dragón y asesina pero aún extrañaba a su pueblo.

Rayla se levanto ya se sentia bien estaba estirándose cuando alguien entro a su habitación

- Rayla estás despie...., ¿que haces te dijeron que debes reposar?- callum entro y al ver a su amiga se preocupó.

- ya estoy bien eh tenido heridas peores y mirame- dijo Rayla para caminar hacia su mochila.

- debes descansar aunque sea un día mas- callum razonaba con ella pero se.le olvidaba que Rayla era muy terca.

- tranquilo soy muy difícil de acabar- la platinada río con una carcajada.

El cuarto de Rayla tenía una puerta que conectaba al de callum por lo cual estaban muy unidos y podía platicar

A la mañana siguiente

Rayla despertó cuando aún no amanecía, miro a callum que dormía plácidamente y roncaba un poco, se puso otra ropa típica de los elfos de luna y sus botas, de puntillas se acercó al escritorio y escribió una nota para dejarla ahí por si callum despertaba de puntillas salió del cuarto y se dirigió hacia las afueras del castillo.
Cómo aún no amanecía no había casi personas caminando aprovecho y se dispuso a caminar por el bosque estar encerrada la hacia sentir sofocada

Callum despertó minutos después se veía un poco de luz señal de que el sol ya iba a salir así que se levantó adormilado, tocó la puerta para ver si Rayla ya había despertado y abrió los ojos preocupado al no verla.

- Rayla!!- se acercó a su cama, busco en todo el cuarto hasta que llegó al escritorio donde había una nota.

Salía a dar una vuelta no te preocupes volveré en un rato, y tranquilo no te desesperes buscándome estoy bien

Callum se tranquilizo pero sabía cómo era Rayla, no podía quedarse quieta cuando vivió un tiempo en katolis lo hacía muy seguido.

Rayla regreso a la hora el sol apenas daba sus primeros rayos y las personas comenzaban a aparecer en las calles no tardo mucho en llegar al castillo, los guardias la dejaban pasar pues ya conocías que era amiga del príncipe y el rey.

Rayla camino por el pasillo y se tipo a callum quien corrió a abrazarla

- oye tranquilo solo fui a dar una vuelta- Rayla le dijo al verlo preocupado

- si pero me hubieras despertado al menos- le respondió callum.

- callum, no me iré de acuerdo- Rayla lo tranquiliza

- ¿que quieres de desayunar?- callum se levantó el ánimo y caminaron hacia el gran comedor.

Rayla era vegetariana pues los elfos se alimentaban de vegetales los cuales les daban las proteínas suficientes para una comida, el alimentarse de animales se consideraba malo pues compartían la misma fuente primaria y eran principios de los elfos.

En el gran comedor empezaron a comer Rayla tenía un plato de ensalada de frutas algo bueno para ella y de postre tartas de jalea.
Ambos jóvenes se dispusieron a desayunar

En otro lado

- estoy segura de que esa elfa hechizo al principe- murmuraba una sirvienta


Mi corazón por Xadia- RayllumDonde viven las historias. Descúbrelo ahora