Rely On The Stars [Fooligetta AU]

Capítulo 6

Vegetta.

Las letras de la pantalla de su celular habían comenzado a verse borrosas y los colores se mezclaban entre sí. Perdió la cuenta de cuánto tiempo pasó viendo aquel chat, obsesionándose con las palabras.

Vamos, no era tan difícil.

No debía ser tan difícil invitar a Foolish a una fiesta a la que tenía derecho a ser invitado.

¿Por qué estaba pensándolo tanto?

Las manos de Lolito se posaron con suavidad sobre sus hombros. Un beso en la mejilla que susurraba "Buenos días" e igual lo hizo saltar en su lugar, sentado frente a la barra desayunadora de su cocina.

—¿Qué haces, Vegettita?

Se recargó contra el cuerpo del pelirrojo que, había olvidado momentáneamente, pasó la noche en su casa. Le mostró unas hojas con nombres y números de teléfono impresos. El hombre las escaneó con la mirada y ladeó la cabeza.

—Envío invitaciones para la fiesta. Sólo me falta una.

—¿Quién?

—Foolish.

—Hm. ¿Era él con quien no te llevabas tan bien?

Vegetta asintió con la cabeza. Luego negó. Una sonrisa necia pintándole el rostro.

—Nunca dije eso. Es un poco serio y era difícil convivir si no estábamos creando. No es lo mismo.

—Es lo mismo —besó su otra mejilla—. ¿Por qué estás invitándolo?

El actor golpeó una de las manos que descansaba sobre sus hombros, sin fuerza, como reproche.

—Porque es parte del proyecto, Lo —suspiró—. La última vez la pasamos bien, trabajando. Tenemos una mejor relación ahora. No puedo no invitarlo.

Lolito le rodeó la cintura con ambos brazos desde atrás.

—Bien. Como tú digas —se encogió de hombros—. Sabes que si te trata mal, tendré que intervenir.

Vegetta giró en su lugar, encontrándose con el rostro pálido y los ojos verdes de aquel hombre. Sentía que los había visto en otro lado antes. Le rodeó el cuello con los brazos y negó con la cabeza.

—No va a ser necesario —le examinó el rostro cautelosamente y bajó la mirada—. Además, tendrías que quedarte toda la fiesta para saberlo.

Lolito suspiró.

—Tengo trabajo más tarde esa noche, lindo. Lo sabes.

Vegetta dejó de abrazarlo.

—Lo sé. Y también sé que te avisé hace dos semanas.

—Hey, ya lo hablamos —soltó al hombre y se desplazó por la cocina, sirviéndose agua en un vaso—. Necesitaba que me confirmaras la fecha, no pasó, acepté una oportunidad. No puedo grabar en ese estudio otro día.

El actor lo siguió con la mirada. Jugó con su celular con una sola mano.

—Pero sabías que era muy probable que fuera ese día. No te costaba nada-

—Yo no dije nada cuando no llegaste a comer con nosotros hace unos días —lo interrumpió—. Si sólo estamos saliendo y no es nada serio no pasa nada, ¿no?

Reconoció esas palabras como propias en una conversación anterior.

Lolito tomó su silencio como una victoria. Dejó un apretón en su mano antes de dirigirse a la entrada de la cocina.