Vegetta.
Primer día de rodaje, 6:00 P.M.
—¡Terminamos la primera parte del vídeoclip... Y Vegetta llega al set!
La mención de su nombre y una cámara pequeña a centímetros de su rostro lo hizo despegar, por fin, la mirada del "comedor real" y cómo ahora realmente parecía listo para albergar un banquete: Mesas largas llenas de comida del lado izquierdo y derecho del salón, copas alargadas en las mesas de manteles pulcros y decenas de extras caracterizados como miembros de la realeza.
Si ignoraba la cámara a mitad del lugar, los cables en el piso y las luces, aquel lugar era un verdadero palacio.
—¿Cómo te sientes?
Quiso hablar de cómo se sentía abrumado, confundido y de cómo llevaba días analizando cada evento de su vida bajo un microscopio imaginario. No le pareció correcto. No había sugerido a Missa para encargarse del detrás de escenas del vídeoclip para hacer que lamentara haber conseguido el puesto al usarlo de su terapeuta.
Bajo la luz dorada del atardecer que se teñía de una gama completamente nueva de colores al pasar por los vitrales del lugar, saludó a la cámara con una sonrisa que no sintió sincera y comentó estar emocionado por el proyecto.
Una chica rubia que sostenía una tabla de plástico con varias hojas de papel se acercó para guiarlo hasta el mismo baño donde lo habían vestido y maquillado para las pruebas, despidiéndose con un: "¡Tienen una hora!"
Había vivido aquel proceso tantas veces que jugaba a poder recitar todos los pasos, sin equivocarse, mientras giraba la perilla de la puerta: Cejas. Base. Corrector. Polvo. Vestuario. Cabello. Foolish.
Foolish, a quien le acomodaban el traje de oro y esmeralda en la espalda.
—¿Ahí ya está bien? ¿Te sientes cómodo?
Foolish, quien lo recibió con una sonrisa que parecía pedirle permiso para mostrarse antes de afirmar y agradecerle a la chica. Vegetta intentó sonreírle de la misma manera antes de involucrarse en una plática con la maquillista tan rápido como pudo.
El aire alrededor de ellos ya no se sentía como tallos espinosos y apretados alrededor de sus pulmones, aunque aún sentía el fantasma de haber sido pinchado alguna vez. Estaba seguro de que no era el único. Y, los huecos donde alguna vez hubieron espinas, ahora estaban llenos de incertidumbre.
Pasó un buen rato de la noche anterior pensando en cómo y sobre qué hablarle a Foolish durante esos dos días porque no estaba dispuesto a pasarlos en completo silencio otra vez. Resultó ser inútil. A él comenzaron a maquillarlo casi inmediatamente y Foolish volvió a cambiarse a ropa deportiva en uno de los cubículos minúsculos para cuidar el vestuario de mancharse cuando fuera su turno.
Y, cuando la plática comenzaba a fluir entre las chicas y Foolish y él se preparaba para intervenir, Missa obtuvo el permiso de Germán para entrar a documentar el proceso y a hablar con Foolish sobre el sencillo, ya que probablemente sería una de las pocas oportunidades que tendría para "obtener la primicia".
Entre nubes de polvo traslúcido frente a su rostro, diferenció como, en ese momento, el foco principal era el cabello dorado de Foolish, siendo arreglado con un cepillo redondo y una secadora frente al lente de la cámara de Missa.
—Cuéntanos sobre One Day At a Time y lo que hay detrás de ella —pidió una vez el ruido de la secadora se detuvo, observando al cantante.
A pesar de tener la mirada fija hacia el frente mientras detallaban su maquillaje, se mantuvo atento a la entrevista improvisada.
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Rely On The Stars [Fooligetta AU]
FanfictionCortometrajes, películas, premiaciones y un reciente trabajo en el departamento de producción acompañan el nombre de Vegetta en los encabezados de los artículos que se escriben diariamente sobre él. Con dos álbumes a su nombre y sus canciones siendo...