Inflexión

Capitulo 7

Gogeta se sentía muy ansiosa debido a lo que ambos hermanos estarían hablando, cuando regresaron Vegetto se sentó a su derecha cruzado de brazos con una expresión enojada en su rostro, Vegeta no se veía en mejores términos su malhumor se notaba de tal manera que podía ver una vena palpitando en su frente.

¿Vegeta se había percatado de que dejaba sobrevivientes y que Vegetto se lo permitía? La tensión era tal que podías cortarla con cuchillo, trato de tranquilizarse mientras su hermano permanecía sentado a su lado, pero Raditz también parecía sentir la opresión que la presencia de esos dos estaba causando. La comida llego, ella trato de calmarse comiendo, la buena comida siempre le hacía sentir mejor, hubo una pequeña discusión por la comida que pudo ser solucionada cuando se trajo más comida.

Después de eso no sabía que hacer, Vegeta estaba muy cerca de ella diciéndole o prácticamente ordenándole que fueran a ciertos lugares, Gogeta no se sentía cómoda con ello, no le gustaba que le estuvieran mandando, pero le siguió porque ella no estaba en su planeta.

Vegetto les siguió y por consiguiente Raditz que no tenía nada mejor que hacer, en algún punto de la salida se les unió Nappa, así que estaba todo el equipo reunido.

—Deberíamos ir a beber, como una celebración, además así podríamos celebrar que Gogeta está en el equipo ya que cuando entro no lo hicimos. —hablo Nappa, la noche había caído en el planeta, las luces de la ciudad comenzaron a brillar. —

—Tú lo único que quieres es una excusa para beber.

—Que ocurre, Raditz. ¿miedo a un poco de Kkor? ¿ya no aguantas el licor? Debí suponerlo eres un debilucho incluso más que tu hermana. —Se burló en un tono sarcástico mientras el nombrado erizaba la cola. —

—¡Ja! Perderás contra mí, anciano, soy perfectamente bueno de soportar cualquier bebida.

—Ese es el entusiasmo. —Nappa le palmeo la espalda riendo alegremente para mirar al resto de sus compañeros. —entonces ¿vamos? Solamente dos personas no es divertido beber.

El resto acepto, aunque ella solo los estaba siguiendo, caminaron por una calle que tenía varios carteles en los establecimientos brillando en color neón, las personas parecían verse atraída a los locales como polillas a la luz, ellos eligieron uno en particular el guardia ya parecía conocerlos y los dejo pasar.

Había distintas personas en el lugar cada una se veía que era de un planeta distinto ella se sonrojo al ver a mujeres usar trajes muy reveladores, incluso había un bailando en una especie de tuvo, se le debe hacer algo muy fácil porque tiene cuatro brazos y se ve muy flexible, sus compañeros le llevaron hasta una mesa, Vegetto se sentó a su derecha, Raditz se iba a sentar a su izquierda, pero Vegeta tomó ese lugar. ¿Qué le está pasando ahora?

—Bien, Gogeta ¿alguna vez has bebido alcohol?

—no, ¿Qué es eso? —respondió a la pregunta de Nappa y el hombre mayor pareció emocionarse por sus palabras —

—¡Jo! ¡Así que eres una novata! Esto será tan divertido.

Nappa llamo a una de las mujeres escasas de ropa que llevaba una bandeja consigo y le pidió que trajera cinco botellas de Kkor, la música sonaba fuerte en el lugar, el ambiente no era pesado, aun así, para alguien que se crio en las montañas y en lugares pacíficos, se podría decir que estaba fuera de su habitad. Unos minutos después las botellas llegaron.

—Bien a salud de la señorita. —comentó Nappa levantando su botella al aire. —porque deje de ser una guerrera de corazón blando.

—Tampoco pidas milagros, Nappa. —Se burlo Vegeta. —una patética guerrera de corazón blando siempre lo será.

—¿a quién le dices patética? Debo de contar todas las veces que te he ganado, guerrero de corazón frio. —Contestó mostrando los dientes y agitando la cola, ambos se miraron fijamente —

—Ignóralo solo quiere molestarte. —Menciono Vegetto dándole un sorbo a su bebida. —Es lo único que sabe hacer, molestar.

—¿Qué acabas de decir?

—oh, perdona, "Gran" hermano mayor, ¿te estas volviendo tan viejo que no escucha por la fuerte música? —Gogeta soltó una risita al escuchar el "gran" hermano mayor, pues Vegetto lo decía con todo el sarcasmo que podía reunir y en realidad Vegeta se quedaba un poco corto de nombre. —

Vegeta soltó un gruñido mientras Raditz trato de calmar el ambiente insistiéndole a Gogeta que probara el Kkor lo cual hizo, sabía amargo y paso agrio por su garganta provocándole una mueca de desagrado, no entendía como Nappa podía beber esa cosa tan horrible como si fuera agua.

—Camarera —llamo Vegetto a la mujer que pasaba — trae cuatro Kkor y un beso de luna.

—enseguida.

—¿un beso de luna? Que pasa hermanito, ahora pides bebidas de niña. —se burlo solo recibiendo una ceja enarcada por parte de Vegetto quien lo ignoro. —Tsk.

Nappa y Raditz comenzaron a hablar, bromeando sacando algo de conversación, Gogeta se unió un poco, aunque no estaba muy del todo adentrada en ello, la camarera regreso con la segunda ronda de bebidas mientras Vegetto le entregaba el beso de luna, Gogeta le miro con algo de desconfianza, la bebida tenía un color azul, además de unas bolitas plateadas en el fondo que parecían lunas, Gogeta miro hacia Vegetto que le dijo; pruébalo. Tomó un pequeño sorbo para notar que era dulce, no pasaba amargo por su garganta con un ligero sabor a acido como las fresas.

—oh, esto esta bueno. —su cola se movió de felicidad tomando otro trago y probando la bolita del fondo con forma de luna que tenía un sabor a moras. — me gusta.

—No te lo bebas tan rápido, es poco a poco. —protesto Vegetto observando que ya se lo había acabado. —

—¿por qué? Es muy saboroso, quiero otro. —sonrió debido a que ya se lo había terminado, Vegetto soltó un suspiro por ello. —me recuerda a los jugos de fruta.

—Si quieres otro, enseguida. —Habló Vegeta en un tono sarcástico pidiéndole a la camarera otra bebida. —

—Vegeta, no.

—Tú no me dices que hacer, hermanito. —Se burló mientras Vegetto fruncia el ceño no contento con sus palabras. —

Vegetto le pidió a Gogeta que no bebiera tan rápido, Gogeta se relamió los labios, pero asintió, estuvieron un rato bebiendo, hasta que Nappa se fue a hablar con una de las mujeres que estaban con poca ropa y se perdió por una puerta. Raditz no dejaba de mirarla, y Vegetto también, ella se sentía extraña tenía mucho sueño y soltó un bostezo largo.

—Vegetto, tengo sueño. —murmuro frotando su ojo para volver a bostezar apoyando su cabeza en el hombro del nombrado. —

—Bien supongo que regresare a los cuarteles a llevarla.

Gogeta no supo que paso luego de esas palabras sus ojos se cerraron cayendo dormida, al día siguiente se despertó en una cama cómoda, enterró más la cabeza en ese aroma delicioso solo par notar que era el de Vegetto.

—¿me sueltas, ya? —pregunto el hombre. —realmente que tienes demasiada fuerza.

—otros cinco minutos. —susurro soltando un quejido aferrándose más al hombre quien soltó un bufido, estuvo más abrazada solo para comenzar a sentir un ligero malestar en su cabeza, le dolía, haciendo que despertara mejor y sentándose. —¿por qué estoy en ropa interior?

—porque dijiste que te gustaba dormir cómoda y te quitaste la armadura junto a la ropa.

—oh, bueno eso es verdad. —comentó observando que el hombre estaba vestido con el spandex. —¿Qué haremos hoy?

—entrenar.

—suena a un buen plan. —Sonrió levantándose para buscar su ropa por el lugar, Vegetto le dijo que se cepillara a lo que asintió, ambos salieron de la habitación para desayunar y luego ir a entrenar. —