𝓕𝓲𝓷𝓪𝓵 𝓭𝓮 𝓷𝓾𝓮𝓼𝓽𝓻𝓸 𝓼𝓲𝓮𝓶𝓹𝓻𝓮

Capitulo 1.

Su-hoo.

¿Te a pasado alguna vez que despiertas y sientes ese vacío insaciable en tu corazón?. Bueno, pues así me siento yo;  desperté y solté un suspiro pesado, mire el lugar vacío  junto a mi, aquel que esa persona que tanto amo dejo así, me levanté sin ganas de querer hacerlo pero aún así lo hice, fui a tomar una ducha evitando el querer pensar pero era inútil.

¿Cómo podía ser que posible?, ¿En qué momento nos alejamos de esta manera?

No lo sabía, pero si sabía que había sido mi culpa por haberlo terminado sin explicarle nada, me siento demasiado estupido, lo termine y aún lo extraño. Pero, como no extrañarlo, mire el reloj mientras el desayuno se calentaba en el microondas, me fui a sentar y trate de comer.

Aun siento sus brazos rodear mi cintura, sus labios cálidos rosar mi mejilla y su voz. Pero solo es mi imaginación y mi cuerpo deseando tenerlo conmigo. ¿El pensara en mi?, no lo haría después de lo que le hice ¿Cierto?

Sin terminar mi desayuno me levanté y me  prepare para comenzar mi día, sabía que no sería uno muy bueno, empezando por mi estado de ánimo pero aún así me alisté. Al salir de casa camine tranquilamente por la calle, llegué a mi cafetería favorita y pedí un latte con leche para después sentarme para esperar mi pedido. Mientras esperaba recordé aquella cita..

                   *Flashback*

Su-hoo

Reí por la cara molesta que tenía Camilo

-¡Cam quien te manda a atravesarte! -dije riendo a carcajadas a lo que el me miró mal

- ese tonto que no se fija, no te burles, mira ¡me ensució todo!

- ya, no te enojes, te ayudo a limpiarte -le sonreí y tome la servilleta para limpiar su chaqueta, se perfectamente que el ama esa prenda pues yo se la di en su cumpleaños, desde entonces no se la quita y si se ensucia o la tocan se molesta demasiado, eso aún no entiendo de el, pero es lindo. Mientras limpiaba la dichosa prenda sentí sus brazos rodear mi cintura atrayendome hacia su bien trabajado cuerpo, lo mire con una pequeña sonrisa- ¿Que haces?, me vas a ensuciar

- me gusta tenerte cerca, eres precioso ¿Lo sabías?

Y ahí estaba de nuevo, me sonroje demasiado y le di un golpe en su pecho a lo que el solo río

-callate -desvie la mirada, el tomo mi mentón y levanto mi rostro hacia el suyo, sus ojos me hipnotizan, son muy profundos..

-¿Porque?, solo digo la verdad. Eres precioso, tus ojos son muy bonitos, tus mejillas abultadas cuando te sonrojas te hacen ver más tierno, tu cuerpo es perfecto y encaja a la perfección conmigo. Sin duda alguna eres la obra de arte más hermosa que e visto. -sus labios rosaron los míos en un suave beso el cual correspondi-

                  *Fin del Flashback*

Lo bese, ese fue el primer beso que le di, era demasiado lindo y nunca le importaba en donde estuviéramos, el me hablaba de la misma manera siempre, sin importar el lugar, las personas o si les incomodaba, eso me gustaba de el, jamás me escondió...

Al obtener mi orden agradecí y salí de aquella cafetería llena de recuerdos que a mi corazón invadían, camine hasta la parada del trasporte público y me senté en la banca a esperar. Me sentí fatal al ver a un chico en moto que iba a recoger a una chica, al parecer su novia.

"El también venía por mi..."

              *Flashback*

Vi una moto estacionarse frente a mi mientras esperaba el autobús pero lo ignore, creí que era alguien cualquiera hasta que escuche su voz detrás de ese fastidioso casco el cual se quitó dejándome ver su rostro.

- ¿Que haces ahí?

-espero el autobús, ¿Y tú?

- vine por ti, sube- sin duda alguna eso me sorprendió y con una pequeña sonrisa le respondí

-no, gracias. No quiero molestar tu neces-

-no es una pregunta, dije que vine por ti y si vas a decir una estupidez de "necesitas tu espacio" me da igual, sube

-¿Seguro?..

-muy seguro, vamos -el se bajó de la moto y me puso el casco, su cercanía me hizo sonrojar y apreciar su rostro de cerca a mi corazón hizo acelerar. Primero subió el y después subí yo, de manera torpe nunca había montado una

-sujetate de mi

-no..ya es mucha moles-no me dijo nada, pero pude ver su expresión seria por el espejo tomo mis manos y las abrasó a su cuerpo

-no te sueltes ¿Okey?. -asenti, fue todo lo que puse hacer, mi corazón estaba acelerado, mis mejillas ardían, su perfume invadía mis fosas nasales, me embriagaba de el.

                 *Fin del Flashback*
                

Mis ojos se aguaron y las lágrimas amenazaban con salir, llegó el autobús y subí dejando atrás a esa pareja, me senté y mire por la ventana.

Todo esto estaba mal, sabía que cualquier lugar me recordaría a el, cualquier cosa me recordaría a el, y quizá sea estupido pero no lo es. ¿Cómo pretendia olvidarlo si recorrimos cada rincón de la ciudad juntos?, esto sería más difícil de lo que esperaba.

Llegué a mi destino y baje del autobús, suspiré para así continuar caminando hacia mi trabajo, al entrar a la empresa trate de sonreirles y llegar de manera animada como siempre lo hacía, pero esto estaba siendo difícil, simplemente los salude y fui a mi zona de trabajo, al llegar a mi oficina me senté, encendí la computadora y comencé a trabajar.

[1:30pm]

Al ver la hora y la bandeja de mensajes vacía mi corazón se apretó sintiendo un gran dolor, pues a esta hora la bandeja de mensajes estaba llena de notificaciones de el. Para no sentirme mal o con ese vacío abrí su chat y busque en la conversación.

Ese día subió hasta mi oficina, al abrirle note todo lo que llevaba, entre ello un ramo de tulipanes, son mis favoritos y el siempre me regalaba ese tipo de cosas, era muy detallista conmigo. Suspiré y me levanté de mi silla, fui a la cafetería, noté que había comida entonces ordene algo y me fui a sentar; una vez obtuve el plato comencé a comer

"Sabe mal" pensé "le falta...". Y ahí estaba de nuevo, ese hombre en mi mente, pero ¿Cómo olvidarlo?, el me hizo acostumbrarme a el, a sus tratos, su atención, su comida, su aroma, sus labios, sus caricias, estuvo conmigo mucho tiempo, ¿Cómo podría olvidarlo de un día para otro?. Nuevamente estaban las lágrimas al borde de mis ojos, mire por la ventana en busca de que no me vieran mientras continuaba comiendo aquel horrendo platillo.