INTRODUCCIÓN
ALGÚN LUGAR DE RUSIA
12 NOVIEMBRE 2019
HORA 11:34 PM
La noche estaba fría ya había empezado el invierno hace unos días atrás, me encontraba en mi habitación golpeando mi estomago y vientre lo mas fuerte que podía, sé que va en contra del juramento que dije con tanto amor a mi profesión cuando me gradué de la universidad. No puedo con esto, simplemente quiero acabar con una parte de mi sufrimiento.
Seguía golpeándome con lo que consiguiese, hasta que escuché la puerta a mis espaldas, sabía quien era podía sentir su mirada en mi, tan fría y demoníaca como siempre, no quería verlo no tenia tiempo para lidiar con el en estos momentos.
Silencio.
Pensé que me dejaría sola hasta que lo escuché hablar.
—Ya deja de hacerte daño, eso no va a cambiar nada.— sostuvo mi brazo sin gentileza alguna y volvió a hablar, —Doctora ¿Va a quitarle la vida a alguien que ni siquiera se ha desarrollado?
No puedo controlar mis lagrimas, sabia que lo que estaba haciendo esta mal pero seria lo mejor y no solo para mi, sino para ese bebé.
—No, No estoy lista para ser madre, señor, por favor.—supliqué sin mirarlo, — No me obligue a tenerlo
—No dejaré que abortes a mi hijo, si llegas a hacerlo te embarazaré de nuevo hasta que te des por vencida.—su agarre en mi brazo fue mas fuerte,—Cuando llegaste te dije que debías hacer ¿Qué parte no entendiste? estarás conmigo para la eternidad mi pequeño cisne.
Quería llorar abiertamente pero no podía, me iría peor y no deseaba dar lastima así que solo me dediqué a respirar profundamente e intenté que él me soltara, no tuve éxito, dude unos segundos pero me decidí a mirarlo, hace tiempo no veía su rostro logré detallarlo un poco hasta que mis ojos se encontraron con los suyos, aparté la mirada al instante.
—Por favor suélteme, quiero descansar, ya es muy tarde y fue un día largo.— casi le rogué.
—Dormiré contigo esta noche ya que hace mucho frío y tampoco quiero que hagas una estupidez al igual que podré acariciarte.— siento como pone su otras mano en mi cintura y va bajándola hasta mis caderas.
—No, no quiero que lo haga así que váyase a su habitación por favor.— hago lo posible para que me suelte.
—Tú no me dirás que hacer, las ordenes las doy yo, mi lindo cisne.— el que me diga así me da ganas de vomitar, siento como me apega haciéndome sentir lo duro que esta allí, —Ten esto en cuenta, como estas esperando a mi hijo, no seré tan brusco como me gusta.
No lo dude y le di una bofetada lo mas fuerte que pude, eso lo hizo girar su rostro y que me soltara, sé que no le dolió, también sé que la acabo de cagar horrible.
—Tienes los ovarios bien puestos como para haber hecho eso.— voltea a verme, puedo ver la furia en sus ojos azules, — nos vamos a divertir eso te lo aseguro.
No quiero que abuse de mi estando embarazada, no me dio tiempo de pensar alguna otras cosa porque sentí su puño en mi mejilla que cuyo impacto me hizo caer sentada.
Mal. Muy mal ahí.
Tenia claro lo que se avecinaba así que solo intente prepararme mentalmente.
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Vale: Buenas tardes, noche, días pequeños patitos.
¿Qué tal la introducción? déjenme saberlo en los comentarios.
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Bajo la Sombra de un Hermoso Cisne
ActionAlessandra es una cirujana exitosa de la clínica en Moscú se ve enfrentada a momentos difíciles debido a las acciones de una persona en particular. A medida que la historia avanza, la protagonista se ve obligada a enfrentar desafíos que ponen a prue...