IV

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Ya en el departamento, decidieron que sería mejor hacer primero lo de Otake y luego lo de Arashi, pero ahora había un problemita, Otake no dejaba de mirar a Arashi, Arashi creia que el grandullón se estaba aburriendo o no quería prestar atención.

-Se puede saber que tanto me estás mirando?- pregunto el de baja estatura molesto, se sentía incómodo y empezó a sentir vergüenza de tanto que lo miraba - Presta atención Otake.

El mayor levantó sus orejas y se sorprendió, Arashi lo miro con cara confusa.

-Es la primera vez que me llamas por mi nombre - respondió tranquilo sin venderlo de vista.

-¿Que tiene eso de especial?

(Cierto, no tiene nada en especial ¿Entonces por qué me emocioné al escucharlo?)se cuestionó Otake.

-Lo siento, podrías repetirlo por favor.

-Esta bien - respondió después de dar un suspiro.

Estuvieron así por horas , hasta que Arashi se levantó, tomo sus cosas y se dirigió a la entrada dispuesto a irse.

-Espera, no ibas a ... ya sabes hacer eso de tu proyecto

-Pensaba hacerlo mañana u otro día ( aunque se me está acabando el tiempo ) está bien, pero será rápido.

Arashi saco un lápiz y una libreta.

-Bien, necesito que te pongas aquí - dijo señalando el lugar, Otake se movió al instante - bien, necesito que ... bueno que te quites la ropa.

-!QUIERES QUE ME DESNUDE?

-Yo no dije eso, te quedas con el boxer y ya tarado.

(En serio tengo que hacer esto? O acaso es un pervertido?) Otake se empezó a quitar la ropa rápidamente, siendo una leve brisa que provenía de la ventana.

-Ahora?

-Ahora las poses

Otake no entendía del todo y Arashi tuvo que acercarse, tocando su brazo mientras lo movía un poco, Otake sintió un escalofrío al sentir como Arashi rozaba con su cuerpo algunas partes suyas, como la parte baja de su espalda y sus brazos.

-Bien, quédate así por unos minutos - pidió Arashi mientras dibujaba

-¿No sería mejor que me sacarás fotos?

- el problema es la iluminación del cuarto, además el flash del celular tampoco ayuda mucho ya que no podría ver ... tu cuerpo con más detalle, por eso quería hacerlo mañana.

-¿Yo cuanto tiempo debo quedarme así?

-Unos 10 minutos más.

Otake se sentía muy observado, y eso era vergonzoso y nuevo para el, nunca mostraba su rostro o de los pectorales para arriba, pues la cámara que usa para grabar sus videos lo graba la parte de abajo ... la penetración ... y los gemidos, y gracias a que la cámara graba a visión nocturna no se reconocía el color de su pelaje,por eso era un completo enigma para todos de quién se trataba el sujeto que follaba en las grabaciones, pero ahora está mostrando gran parte de su cuerpo, a un chico de 26 años.

-¿Tienes frio?

-Un poco

-Cerrare la ventana- Arashi se levantó rápido y se dirigió de nuevo a su ubicación, Otake quería empezar una conversación por muy extraño que suene , pues por lo general no le interesa hablar con alguien, pero hay algo en Arashi que le da bastante curiosidad.

-Es la primera vez que .... haces eso

-¿Hacer que?

-lo de ... lo que estabas haciendo en ese edificio con el lobo.

-Sexo? Pues no, lo he tenido que hacer en el pasado un par de veces.

-¿Por que?

-Porque cada vez que necesitaba algo ellos ... por alguna razón siempre querían que llegaramos a eso, y no solo me ha pasado por necesitar algún modelo o algo así,  ha sido por diversos motivos.

-¿Como cuales?

-Esto parece un interrogatorio pero está bien. En una ocasión no tenía dinero suficiente para pagarle a un taxista asi que el propuso que follemos para pagar, en otra ocasión un profe mío me tenía ganas y trataba de darme malas calificaciones, una tarde me dirigí a la oficina de profesores reclamando la injusticia, y para su suerte nadie estaba allí para escuchar lo que me dijo.

-Acaso te dijo que ...

-Exacto, el me había dicho que estaba deseándole en su cama y que fantaseaba conmigo, que quería que esté en su cama debajo de él en cuatro, al final tuve que hacerlo porque nadie iba a creerme si contaba la verdad, estuve así por casi un año entero.

-¿Y por qué no lo denunciaste?

-Ese oso era conocido por tener bastantes contactos con algunas autoridades, de nada hubiera servido.

- Y tus padres...

Susurros del corazón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora