𝕻𝖚𝖙𝖆 𝖉𝖊𝖑 𝖌𝖔𝖇𝖎𝖊𝖗𝖓𝖔// 𝕽𝖚𝖘𝖆𝖒𝖊
— ¿A dónde irás? Si es que puedo saber... — Preguntó cuando vio al de tierras frías tocar el cerrojo de la puerta que llevaría hacia la calle.
— Iré a desestresarme, es todo. — Afirmó, dejó a U.S.A con las palabras de despedida en la boca.
— Uh... — Suspiró mientras caminaba hacia un lugar sin rumbo, solo sabía que caminaría hasta llegar a un sitio espacioso.
— Tengo demasiado tiempo que no práctico... — Abrió la puerta de una habitación, esta estaba totalmente vacía y a decir verdad, era tan espaciosa como un departamento de segundo piso, solo que su diferencia es que no tenía paredes para dividirla.
— Y si... — La idea le vino a la mente, como si algo le golpeara la cabeza levemente.
Aseguró la puerta con el bloqueo del cerrojo, mientras cerró la pequeña ventana para que nadie pudiera ver lo que hacia dentro, la pequeña luz se encendió, era pequeña pero, alumbraba todo el espacio que necesitaría, no de manera fuerte pero, con eso se conformaba.
Empezó sentándose en el suelo mientras estiraba sus piernas y las abría, tal cual como alguien flexible. Si bien, le dolía un poco, pero solo un poco, el estaba acostumbrado y no podía dejar de perder la flexibilidad que le costó años de su infancia.
Dato: U.S.A practicó danza contemporánea y gimnasia.
Sus piernas fueron cediendo, mientras iba doblando su espalda poco a poco, haciendo la típica pose del "arco" mientras sus pies tocaban su frente. No fue mucho el tiempo que pasó estirándose antes de que aplicará los ejercicios que hacía en la danza la cual practicaba.
Su canción favorita se llamaba "Mount Everest" ya que para el, interpretarlo en su tipo de danza era algo fácil y se vería bien, en su cabeza y en algunas mentes ajenas.
Sus movimientos eran a veces repentinos, delicados, fuertes, débiles, y uno que otro doloroso, pero tolerable de accionar; concentrándose solo en la canción, ajeno al pensamiento de una mirada encima suya.
— Estamos jodidos. — Frotó su cara totalmente estresado.
— ¡Es tu maldita culpa, Oriental!
— ¡¿Y tuya también no fue, occidental?! — Gritó, buscando defenderse.
— ¡Pero fue más tuya, tu abriste el puto hocico sin siquiera mirar si estaba vacío el lugar!
— ¡Fue de tu culpa también no avisarme! ¡Y tú mismo dijiste que contestara!
— ¡Calmense! ¡¿Que creen que logran con gritar, par de estúpidos?! — Habló central.
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𝕻𝖚𝖙𝖆 𝖉𝖊𝖑 𝖌𝖔𝖇𝖎𝖊𝖗𝖓𝖔// 𝕽𝖚𝖘𝖆𝖒𝖊
Short StoryParece que U.S.A ha llegado a una mansión super lujosa en Rusia, Moscú, le contrataron para tomar el rol de pr*stituta para un hombre el cual todavía ni U.S.A ni Rusia saben el uno del otro, cuando se encuentran ambos no saben si se llevarán bien o...