XXVIII

161 13 44
                                    

El sol entraba resplandeciente por la ventana. La atmósfera alrededor era tranquila y la noche había ayudado a reposar todo lo ocurrido el día anterior.

Desperté, envuelta en los brazos de Jutty y recostada sobre su pecho que subía y bajaba en sintonía con su respiración. Lucía tan tranquilo, tan pacífico, sin duda alguna era una vista digna de apreciar. Me giré lentamente para ver mi celular, eran las 9:20 a.m. así que con cautela intenté levantarme de su lado.

Revisé mi alrededor, topándome con una gran cantidad de ropa regada por el suelo, pista de lo que había pasado durante la noche. Tomé una de las sabanas y la envolví alrededor de mi cuerpo mientras iba a recoger mi ropa interior. Estaba a punto de ponérmela de nuevo después de haberme quitado la sábana, cuando su voz a mis espaldas me hizo sobresaltarme.

-Prefiero que no lo hagas ¿Sabes? - dijo con voz ronca

- ¿Ah no?

Jutty se incorporó sentándose en la cama, bostezó y me miró durante algunos segundos. Me pidió que me acercara a él así que lo hice. Aún sostenía las sabanas a mi cuerpo ya que no había tenido oportunidad de ponerme mis bragas. Posó sus manos en mi cadera, sonriendo dulcemente y acercándome más a él.

- ¿Por qué tienes prisa por vestirte? Llevo mucho soñando con ver tu piel así

-No quiero que se haga tarde. Tobias no debe tardar en mandarnos los vuelos de regreso- respondí

-Cierto. Déjame aclararle algunas cosas antes- agregó

Tomó su celular y pareció mandar algunos mensajes, después dejó de nuevo el dispositivo en algún lugar sobre la cama y volvió su atención a mí, rodeándome de la cintura y haciéndome sentar sobre sus piernas. Acarició suavemente mi cabello y después me dio un corto beso en la mejilla.

-Tu y yo tenemos una charla pendiente sobre eso- dijo

- ¿De qué hablas?

-Bueno, no quiero parecer impaciente, pero muero porque me visites en mi casa- mencionó

-Jutty, solo traje equipaje para una semana- objeté

-Una semana es suficiente para mí. ¡Por favor! Quisiera que pudieras familiarizarte con mi hogar, así también te acostumbrarás si decides mudarte- explicó

- ¿Mudarme?

-Sé que es algo apresurado y no te estoy diciendo que lo hagas ahora mismo. Pero de verdad quiero quedarme contigo- añadió

Pensé durante unos segundos. En realidad, era una decisión complicada, dejar mi ciudad y mi departamento atrás sería difícil, sin embargo, sentía que estaba dispuesta a hacer lo que fuera por quedarme con el hombre que atesoraba. Jutty interrumpió mi reflexión cuando volvió a hablar, acariciando mi cadera.

-Si lo prefieres podemos quedarnos en tu departamento un tiempo, algo como unas vacaciones. Vivir un tiempo en tu ciudad- dijo

-Lo pensaré- respondí

-Está bien, pero de verdad me gustaría que vinieras conmigo, al menos durante unos cuantos días ¿qué dices? - exclamó con entusiasmo

-No tengo pendientes en mi ciudad, así que puedo tomarme unos días para vacacionar- contesté poniendo mis brazos sobre sus hombros

Él me abrazó con una notable emoción en su toque, juntándome cerca de su pecho y acariciando mi cuerpo casi desnudo. La sabana comenzaba a resbalarse por mi piel, amenazando con dejarme expuesta una vez más. Jutty también parecía tirar de estas de forma sutil.

- ¿Qué estás haciendo? - cuestioné

-Las sabanas están haciendo que te resbales, prefiero quitártelas- contestó con burla

Ghoul o Ghoulette (Swiss Ghoul X Female Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora