Capricho

Primer día (Cap 7)

—Me despierto nuevamente por culpa de un ruido, abro mis pesados párpados y miro a mi alrededor confundida hasta que recuerdo todo, alzó mis brazos estirandome y bostezo, muevo el cuello de derecha a izquierda haciéndolo crugir, me levanto de la cama y me voy al baño, noto que el baño es muy grande y se ve muy limpio y bello, me quito la ropa para entrar a la ducha, dejó correr el agua fría y me empiezo a pasar el jabón por varias partes de mi  cuerpo mientras tarareo parte de una canción que no recuerdo el nombre.

—Hit me baby, One More Time —Cantó en voz baja la única parte que recuerdo, al terminar salgo de la ducha y tomó una toalla que estaba colgada, me la envuelvo alrededor del busto y salgo del baño, me seco el cuerpo y el cabello, me pongo la ropa que hay en mi maleta, voy al baño y me peino el cabello, después me pongo un poco de sombra de ojos y me hago un delineado simple.

—Ya estoy. —murmuro, voy a buscar mis lentes negros y me los pongo, luego bajo hasta la sala donde hay muchos sirvientes a los alrededores, uno se acerca a mi.

—Señorita, el desayuno esta servido, venga conmigo por favor. —Yo arqueo una ceja de confusión y sigo al sirviente, preguntándome como sabían que iba a bajar en este momento. Llegó al comedor y veo a Kaden sentado al otro lado de la mesa, yo me siento lo más lejos de él con molestia.

—No me gusta la idea de quedarme con él tanto tiempo. —Pienso mirando la comida, no hay ningún sirviente alrededor, solo Kaden quien parece no mirarme aún, tomó un rollito de canela y me llevo a la boca sutilmente.

—Me encantan los rollos de canela, lo único que me gusta de este lugar son los rollos de canela. —Pienso nuevamente empezando a comer, bebo un poco de café y a la vez me devoró otro rollito de canela. Me siento feliz por primera vez en este día, ya que estoy con las dos cosas que más me gustan, el café y los rollos de canela.

—Te encanta lo que te preparé, ¿no? —Pregunta Kaden dándome su mirada, yo me detengo en seco, trago la comida y lo miro sorprendida.

—¿Tu hiciste esto? —Pregunto con ambas cejas alzadas, Kaden sonrie de forma orgullosa.

—Si, pero solo prepare los rollitos de canela y el café que estas bebiendo, supuse que eso era lo que más te gustaba. —Dice Kaden muy relajado, yo me incómodo levemente por el nivel de atención que él le pone a las cosas, pues para saberlo debió haber puesto muchísima atención ayer cuando yo comía.

—Usted parece ser muy observador..
—Digo limpiando con una servilleta los restos de comida en mi boca.

—Pues eso no es algo muy difícil de notar. —Exclama Kaden con un tono confiado mientras mira al techo.

—Hmm —Me quedo en silencio por un momento. —¿Cómo pudo saber que yo prefería este tipo de café que cualquier otro? —Pregunto con un tono pesado, Kaden solo responde sin mirarme.

—Pues simplemente usted tomó el mismo café el día de ayer, así que supuse que ese le gustaba, no por nada ordené que le llevarán más de cinco tipos de café. —Yo lo miro con el ceño fruncido, dejó de comer y me levanto de la mesa.

—Con permiso. —Digo y me alejo de Kaden, quien no parece preocupado en absoluto.

Salgo de la mansión y me dirijo a una parte un poco alejada, llegó a un lugar muy bello con animales bastante peculiares. Me limito a observar desde la distancia, pero un búho se me posa en el hombro asustandome.

—¡Ay!, ¿Qué estas haciendo amiguito?
—Pregunto antes de que el búho me dejara acariciar su cabeza, yo trago saliva y lo toco sin presión alguna.

—El búho hace un sonido que alerta al cuervo, el cuervo emite un sonido y todos los animales se me acercan, entre ellos una culebra y un puerco espín. —Esto es muy extraño..
—Enunció, los animales me admiran sin más, algunos se me acercan para que los acaricie, el único que parece ignorarme es el Caracal.



—Al parecer ya conociste a mi mascota. —Dice un voz profunda que me posa su mano en mi hombro.