𝘛𝘦𝘯𝘵𝘢𝘥𝘰𝘴 𝘱𝘰𝘳 𝘦𝘭 𝘥𝘦𝘴𝘦𝘰 | 𝘕𝘢𝘯𝘢𝘮𝘪 𝘒𝘦𝘯𝘵𝘰

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                     Madeline Moretti
                             マデリン

Estábamos todos en el salón, me senté en los últimos puestos para no llamar tanto la atención en el interrogatorio que en pocos minutos tendríamos con el profesor Nanami.

Ya había entrado al salón, mis nervios y vergüenza me impedían levantar el rostro, él simplemente dejó sus cosas en el escritorio y escribió en el pizarrón él título del tema que nos había mandado a estudiar para el interrogatorio. Sin más empezamos, las preguntas iban y venían, varias me sabía la respuesta pero no tenía el valor del alzar mi mano y responder, pero no me servía de nada, igualmente él tendría que evaluarme.

— Bien, algunos interactúan mucho y otros están muy callados. — Dijo mientras pasaba en medio de las filas, veía como se aproximaba a mi y solo podía esconder mi rostro con mi brazo disimuladamente, hasta que sentí su presencia en el puesto de adelante.

— Podría decirme, la función de ellas. — Miró al chico sentado en frente de mí el cual no sabía que respuesta dar.

— No hay funciones. — Respondí y baje mi mirada de nuevo.

— Excelente. — Agregó sin más en un tono seco y se fue de los puestos de atrás,  pude volver a respirar.

Apenas sonó la campana recogí mis cosas con una rapidez increíble y apresurada por querer salir.

— Moretti, fuiste muy poco evaluada. Deberías quedarte para presentar una evaluación ahora. — Lo escuché decir antes de salir del salón, nobara se aproximó conmigo y me miró de manera confusa ya que es verdad, no había dicho nada durante las 2hrs de interrogatorio.

— Claro, es tu decisión, sino yo te pondré 3pts, por tu única respuesta hoy, 03, estas de acuerdo?. — Dijo y finalmente alzó su cara de la lista en sus manos para verme.

— Tranquila, yo te espero afuera de la uni. — Dijo nobara y salió del aula, ya solo estábamos él y yo.

— Te pondré unas preguntas en el pizarrón, responderlas con mínimo 5 líneas cada una. — Él solo empezó a escribir tranquilamente en el pizarrón y yo saque una hoja junto con mi bolígrafo, mis manos temblaban y mi corazón latía a mil.

— Ahí están. — Agregó dejando la tiza a un lado de su escritorio y sentarse a poner las calificaciones.

Yo simplemente respondía las preguntas, trataba de hacerlo lo más rápido, no quería equivocarme pero también mis ansias de salir eran más fuertes. En menos de 7 minutos ya había acabado.

— Muchas gracias, aquí tiene. — dejé el hoja en su escritorio con apresuro y antes de que pudiera salir, me dijo algo que me hizo detenerme.

— Moretti, no trates de evitar las consecuencias de tus actos.

Nos quedamos en silencio, yo apunto de salir del aula y él sentado en la silla de su escritorio sin siquiera voltear a verme, después de unos segundos de silencio incómodo salí del aula prácticamente corriendo.

El ya me había dado el primer aviso, el siguiente ya estaríamos hablando frente a frente.