¿Por que te amo tanto? - Radioapple

Una luz de esperanza

...Al día siguiente...

Vox se despertó temprano y volteo a ver a Alastor quien aun seguía durmiendo, Vox sonrió maliciosamente y paso sus manos por las piernas de Alastor mientras relamía sus labios con deseo, Vox quería más que solo acariciar a Alastor.

—Qué lindo e indefenso se ve, no creo que le moleste si lo despierto de una forma creativa.

Dijo Vox mientras se disponía a tocar sin cuidado el cuerpo de Alastor quien para la mala suerte de Vox, despertó.

—Vox? Q-qué estas haciendo? —pregunto asustado alejándose de Vox—

—Nada querido, solo tocaba lo que es mío —dijo mientras se levantaba de la cama agarrando su saco y pantalón— Bueno, es hora de levantarse hoy tendremos un día ocupado y tú estarás a mi lado en todo el día, entendido?.

—P-pero no puedo siquiera salir un rato?. —pregunto mientras se levantaba para colocarse su camisa y seguido a eso los cinturones en su pecho—

—No, nisiquiera un rato, hoy nos visitan los reyes, Lucifer y Lilith Morningstar, así que te quedaras a mi lado y más te vale no decir nada. —dijo mientras se colocaba el pantalón y la camisa—

—Pero, por que vendrían ellos aquí? Solo hay cuatro Overlods, que querrían los reyes de nosotros?.

—No lo se, el puto de Valentino pidió una audiencia con ellos para ver cual de los dos serviría para su tipo de trabajo, ya sabes, como actores porno —soltó sin ánimos mientras arreglaba su camisa por debajo del pantalón—

—Y Velvett no estará presente? —pregunto curioso mientras agarraba un saco algo elegante para ponérselo con cuidado—

—No, ella tiene una reunión en privado con Carmilla, no es de tu incumbencia la verdad. —se acerco a Alastor y le dio un gentil beso en la mejilla— Así que solo seremos Valentino, tú y yo.

—Si, entiendo. —dijo apartando a Vox y saliendo de aquella habitación—

Vox no hizo ni el mínimo esfuerzo en seguir a Alastor, no perdería su mañana en él así que simplemente salió de su habitación dirigiéndose a la sala de reuniones que tenían en el edificio, se sentó en alguna de aquellas sillas del lugar y sacó el celular revisando algún plan para poder hacer que los reyes del infierno se aliaran con su compañía y así sacar provecho del poder y estatus de los reyes.

                                                                    ... Mientras tanto con Alastor...

—Esto debe ser una broma... —dice mientras camina en dirección a la planta baja del edificio— Una jodida broma.

En eso que Alastor llegaba al primer piso, entran dos personas, una Omega muy hermosa de gran estatura, cabello largo y rubio con unos cuernos que sobresalían, una corona bien posicionada entre aquellos cuernos y un vestido morado, aquella mujer tenía el cuerpo similar a la silueta de un reloj de arena, era simplemente impresionante y a su lado se encontraba un Alfa que Alastor al verlo se dio cuenta de que fue con el que tropezó el día de ayer, pero esta vez estaba vestido de pantalones negros con el conjunto de las botas negras, una camisa blanca con un pañuelo de bolsillo color rojo en este y un saco de color negro y en vez de aquel sombrero de copa de ayer, tenía una corona en forma de serpiente mordiendo una manzana y claro, su bastón, Alastor no pudo despegar la mirada de aquel Alfa y sin darse cuenta desprendió ligeramente sus feromonas las cuales no fueron bien recibidas por la Omega que se encontraba junto al Alfa.