Ride or Die | Yeongyu

5

Carraspeó y soltó la bolsa en la mesita de noche de la habitación. Es incómodo y solo quiere soltar un comentario sarcástico pero no es el momento para hacerlo. Menos si el que tiene frente suyo es al que golpeó con una llave inglesa y lo dejó inconsciente.

— Bueno, cuídalo por mientras. Tengo algunas cosas que hacer. — dijo Taehyun tecleando algo en su celular y recostado en el marco de la puerta — cualquier cosa llámame.

Dicho eso solo se fue dejando con las palabras en la boca a Beomgyu que se arrepintió de venir, no quiere estar allí y menos con su patineta que Yeonjun ha estado viendo con tanto recelo. De hecho estaba con una expresión molesta desde que llegó. 

Para su mayor incomodidad , pasaron los siguientes veinte minutos en total silencio. Estaba queriendo morir por dentro, que la tierra lo  trague y lo escupa en la comodidad de su cama, pero no es posible así que solo permanece simulando que lee una revista que ni siquiera sabe de que trata.

— Esta al revés. — quiso morir de la vergüenza, ni para disimular servía.

— Oh, gracias.

"Gracias". ¿Qué había sido eso? 

Cuando esta nervioso actúa de manera torpe y a veces no piensa en lo que esta diciendo. 

— ¿Por qué agradeces, eres imbécil? — ataca el rubio.

— ¿Quieres que te noquee de nuevo? no tengo llave pero si mi patineta. — cayó en cuenta de lo que estaba diciendo y solo se calló.

— Si puedes pagar la factura de un hospital y no terminas con un hueso roto no lo veo posible. — indignado dejó la revista a un lado.

— Imbécil

— Estúpido.

— Idiota. 

— ¡Aniñado!

— ¡Pandillero de quinta! 

— ¿Qué acabas de decir? — sin darle tiempo de reaccionar a Beomgyu, le tiró el libro que tenia al lado al igual que el jarrón de agua que ya no pudo esquivar.

Antes de que la situación escale a mas y alguna del personal del limpieza termine con mas trabajo hoy, tocaron la puerta.

— Taehyun tenia razón, parecen perros y gatos. — habló el doctor que venia a revisar al rubio.

Ambos pararon y se miraron con odio, definitivamente no se soportaban. Yeonjun era demasiado hostil para tratar con alguien que lo supero en algo, peor si sabia que era solo un golpe de suerte, no puede aceptarlo. Y  Beomgyu no se dejaba minimizar o tratar mal por los demás, respondía de la misma manera o peor, era algo que su padre le había enseñado y tanto como su tía que tenia un carácter fuerte.

— Puedes ayudarme? — Pidió el doctor de encantadora sonrisa a su parecer.

Quito las vendas y Beomgyu vio la horrible marca entre morada y verdosa que estaba cerca de la cien. El no era el mas fuerte pero si el mas ágil.

— Bueno, la hinchazón ya bajo y solo debes esperar a que el hematoma desaparezca por si solo. No hay nada de que preocuparse. — Beomgyu pudo respirar tranquilo, no había sido nada tan grave después de todo.

El mayor se retiró luego de una advertencia a Yeonjun para que se comportara y dejasen de pelear. Dejando a ambos de nuevo en ese tenso e incómodo silencio. Sabe que debe disculparse pero también espera una disculpa de parte del mayor que solo vuelva a recostarse en la camilla.

Quizá sea por la ganancia de las carreras, el que pueda pagar un hospital privado, no entiende muchas cosas pero solo va por la bolsa donde estaba su postre de disculpas para su tía. Ahora solo lo cambiaria dirigido a alguien mas. Por lo que Yeonjun no entiende porque le esta dando aquel rollo de canela que se ve demasiado tentador y apetitoso luego de solo comer gelatina sin sabor alguno, muere de hambre.

— Se me cansa la mano sabes. — dijo aun ofreciendo el postre.

— De donde habrás sacado eso. No quiero saberlo, pero muero de hambre. — se lo arrebato de las manos y le dio un gran mordisco. 

Beomgyu sonrió a medias y se sentó en la silla al lado de la camilla.

— Taehyun te dijo a que hora volverá?

— Puedes irte, nadie te esta agarrando. — se abstiene de golpearlo y guarda la calma ante ese comentario.

— No es como si quisiera estar aquí. Tengo una hermana a la cual cuidar.

— Pensé que eras hijo único. — parece tomarle un poco mas de atención.

— No tengo a mi hermana menor, no puedo dejarla tanto tiempo sola, solo sigo aquí porque tengo algo de conciencia de lo que hice y estoy en deuda con Taehyun.

— Solo ganaste por suerte.

— Lo se, las motos no van conmigo, prefiero andar en patineta.

Desde que tenia 7 años empezó su gusto por las patinetas, luego de agarrar el gusto se le unió Soobin ya que también quería aprender y compartir un hobby con su mejor amigo.

— Las motos son mejores. — dijo cruzando sus brazos.

— No para mi. — afirmó — Cuando competí sentí la adrenalina que muchos decían, pero no me gusto sentirla del todo. Menos cuando mi cuerpo temblaba después de eso, no se si te sentirás así luego de competir. Supongo que no por el tiempo que llevas compitiendo. — ahora estableció contacto visual —estuvo mal lo que hice, no debí estar allí desde un inicio, pero tampoco lo estuvo el que reacciones de esa manera cuando no tuve nada que ver con lo que le hicieron a tu moto. No me dieron la oportunidad de hablar si quiera.

Para su sorpresa, Yeonjun lo escuchaba atentamente.

— Yuta es mi amigo.

— Pero mintió. Me inculpo de algo que no hice, así que por lo que dijo ten en cuenta tus amistades. Quiero solucionar esto sabes.

— Yo igual.

Ambos quedaron en silencio, el orgullo no los dejaba decir algo tan esencial como un "Lo siento". Pero Beomgyu quiere salir de esto, quiere estar tranquilo dejando las cosas en claro de una buena vez, al igual que ya no verlos a ellos otra vez si es posible aunque probablemente tome un tiempo.

— Hagamos algo. Estaré haciéndote algunos favores hasta recompensar tu moto.  

— No estoy del todo convencido. — bufo fastidiado ante la terquedad.

— ¿Qué propones entonces? Dinero no tengo.

— Dinero es lo de menos, solo pongo unas condiciones

— ¿Cuáles son?

— No importa lugar, hora o fecha. Estarás a disposición. — quiso refutar pero se adelanto —¿quedamos? no aceptaré bajo otras condiciones.

— Te odio. — a regañadientes asintió.

Yeonjun sonrió satisfecho, asustando a Beomgyu, verlo sonreír le aterra o eso cree debido al raro escalofrío que le pasó por la espalda..

Luego de algunas charlas mas triviales no midió el tiempo y se le hizo tarde, Yeonjun terminó dormido y a los pocos minutos apareció Taehyun con comida para los tres. Pero Beomgyu se disculpó y se fue lo mas rápido posible en su patineta hasta su casa, definitivamente otro regaño de parte de su tía.