3. Robado

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Su corazón iba a mil por hora aunque por fuera se veía tranquilo. A su lado, Bad seguía dando vueltas una y otra vez, incluso llegando hasta el punto de silenciar las pobres palabras que a6d estaba tratando de emular, algo absolutamente grosero que en una situación normal no habría hecho. Viéndolos a ambos desde güera, se podía ver el claro contraste de sus actitudes. Ambos habían dado lo mejor de sí para ganar, pero sabían que no eran exactamente los mejores jugadores. Y, sin embargo, ambos tenían el claro deseo de ganar.

Bad comenzó a rezar en voz alta, rogando por no conseguir el segundo puesto por segunda ocasión. Skeppy no podía decir nada, sólo podía esperar lo mejor.

Fue sólo un segundo. No estaban allí, y repentinamente lo estaban. Pilares con estatuas en su cima aparecieron, cada una de diferente estatura, estando en lo más alto aquellas que simbolizaban a los ganadores del primer lugar. En el pilar más alto en la izquierda, la estatua viviente mostraba a un habitante del pueblo gema, un diamante de piel oscura, sudadera azul y shorts negros, con el cabello negro esponjoso y desordenado, que sonreía de forma jactanciosa y miraba a los participantes, orgulloso. En un parpadeo, se transfiguró en un gran demonio Wither con una sonrisa tranquila y los ojos completamente blancos entrecerrados, la piel negra como la noche, con alas, grandes colmillos, cola, un halo y una vestimenta de negros y rojos, siendo un contraste obvio con su compañero de equipo. Las estatuas continuaron cambiando entre uno y otro, pero eso no detuvo los siguientes acontecimientos.

—Ganaron —dijo a6d, sin ningún tono especial en su voz.

—Lo hicimos, lo hicimos —murmuró Skeppy, repentinamente encontrándose sin palabras. No se lo podía creer. Desvió la mirada un segundo hacia su compañero, que parecía haberse estado conteniendo por un buen momento antes de saltar en el aire, gritando de felicidad, llamando la atención de todos los presentes.

—¡OH, POR DIOS! ¡SÍ, SKEPPY! —Los gritos resonaban por todo el lugar, incluso al aire libre—. ¡OH, POR DIOS, SÍ! ¡TE AMO, SKEPPY! ¡GANAMOS, GANAMOS, GANAMOS! ¡DOS VECES SEGUNDO LUGAR Y UNA VICTORIA! ¡OH, DIOS! Oh, Skeppy, Skeppy…

La gema se giró en el momento exacto para sentir unas grandes manos sostener sus mejillas y jalarlo hacia el frente, sin mucho cuidado, como normalmente lo haría. Lo siguiente que supo es que otro par de labios estaban sobre los suyos y duraron allí un buen rato mientras la multitud soltaba jadeos de confusión.

Skeppy apenas tuvo tiempo de cerrar los ojos y corresponder a medias, abrumado por la situación repentina.

Luego, como si no hubiese sido nada, el demonio se separó con una gran sonrisa y continuó con su pequeño ritual de la victoria, diciendo lo feliz que estaba y repentinamente acercándose al dúo que había quedado en segundo lugar, felicitándolos por su desempeño durante el juego y luciendo tan normal como siempre.

Skeppy levantó una mano para tocar sus labios, intentando ignorar las miradas de todos a su alrededor y después soltó una risita nerviosa. Evitó mirar a todos mientras caminaba distraídamente por allí antes de sacar su intercomunicador y escribir el nombre de Techno en el chat grupal, tratando de llamar su atención porque de verdad necesitaba hablar con él sobre la situación, pero rápidamente se dio cuenta del escenario en que aún se encontraba y se apresuró a escribir «Suscribete a Technoblade. Technoblade nunca muere», dejando la inevitable práctica para después. Y, después de todo, necesitaba felicitarlo públicamente por su increíble desempeño en la competencia. Techno era simplemente genial.

A lo lejos, Bad seguía siendo una pequeña bola de energía de aquí para allá, dando vueltas en completa felicidad entre los otros participantes, quienes apenas podían seguirle el ritmor. Y pese a que sus últimas acciones no habían hecho nada más que confundir al diamante, este sonrió al verlo tan contento.

Luego se dio la vuelta para comenzar a hablar con a6d, que parecía casi tan en shock como Skeppy, aunque al francés no le habían robado ningún beso. Un segundo después, ambos se encogieron de hombros.

Y así, en silencio y con las miradas curiosas de todos los demás concursantes clavadas en la espalda, ambos se dirigieron con el demonio para celebrar.




















Notas:

A decir verdad, nunca entendí Minecraft Monday. Y bueno, tampoco me esforcé en hacerlo. Sólo me vi un par de vídeos de Techno y ya. Eso sí, ese clip de BadBoyHalo gritando que besaría a Skeppy si lo tuviese al lado cuando ganaron MM es demasiado icónico, y por eso estamos aquí. ¡Nos vemos!

The4Demons

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