Una reunión programada, no podía evitar encarar al de rasgos asiáticos, el cual hacia en total silencio moviendo con la cucharilla de su té verde, mientras se notaba cada mínimo movimiento con total elegancia.
El italiano, miraba a ambos aliados, cada momentos, esperando que el momento incómodo desapareciera en algún momento, ciertamente, no espero que la reunión acabará en un ambiente tan raro.
——¿Y como va su día?
Decidió hablar primero, para finalmente recibir la mirada del alemán, el cual suspiro, debía informar de todas formas a sus aliados principales sobre su próxima adquisición.
——No sólo se programó esta reunión para discutir los planes, los territorios y todo aquello, también por respecto informó que próximamente la Unión Soviética se volverá un aliado momentáneo.
El sonido de un golpeteo de la cuchara contra la taza de porcelana fue lo único, el golpe fue brusco, tan llamativo que captó la atención de los presentes.
El japonés ignoro aquella mirada de confusión y simplemente tomó su taza con total elegancia que lo categoriza bebiendo el líquido cálido, para al alejar sus delgados labios de ello, para finalmente mirara directamente al de tez carmín.
——No estoy de acuerdo con tu nuevo juguete, va encontra de los principios de cada territorio, sería una ofensa relacionarnos con esa clase de seres.
——Entiendo tu disgusto, pero sólo me refiero a mi territorio ya ustedes mantengasen en sus lugares sin hacer estupideces, eso va más para ti Facista, escuche rumores que Musolline esta teniendo sus movidas y problemas con su población.
——Oh, tranquilo, simplemente e causa de que los naz*s no tienen una relación como el cristianismo y nuestro lado más religioso no está de acuerdo con aquello, pero ya se está movilizando para evitar más incidentes. -sonrió inocentemente, terminando su café, re-lamiemdo se los labios gustoso. ——Solo evita llamar mucho la atención con esos pequeños problemas.
——Se intenta más vale que lo tengas controlado, ahora pueden retirase.
El italiano sin esperar más, salió a pasos tranquilos, dejando a solas a al europeo y asiático.
El japonés, finalmente término su bebida, decidiendo levantarse de su lugar, para caminar hacia el hombre de ojos mar, noto como este fruncio el celo ante la desobediencia, pero no dijo nada.
Acercó su cuerpo al contrario, para finalmente estar cerca del oído del esvástica.
——Eres MI estragedia perfecta para conquistar el mundo. Grrr~
Sin más el hombre se alejó del baja estatura, para salir a pasos tranquilos, dejando confuso y molesto al de piel carmín.
Dudas:➥
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Piropos
HumorThird Reich comezón a recibir piropos, lo que más le causa incomodidad era la persona que comenzó a soltar tales comentarios, ¿Que carajos le pasa a Imperio japonés? •Cortos. • I.Japones x T.Reich