"𝐃𝐞𝐚𝐫 𝐂𝐡𝐚𝐫𝐥𝐨𝐭𝐭𝐞:" || 𝘛𝘩𝘦 𝘢𝘳𝘵𝘧𝘶𝘭 𝘥𝘰𝘥𝘨𝘦𝘳

1.1 "La treta Yanqui"

27 de octubre 1855

Cada mañana, las dos hermanas se reunían en la habitación de Lady Charlotte, como ya era costumbre.

Un aroma particular y penetrante impregnaba la habitación, obligando a las hermanas a usar una mascarilla. Mientras Lady Charlotte estaba sentada leyendo sobre un nuevo descubrimiento, Lady Belle tomaba nota de los síntomas de su hermana.

-¡Son tan obstinadas!. Nunca piensan en el trabajo que me lleva buscarles una buena pareja. - Se escucharon pasos en la escalera, resonando hasta la habitación. - Siempre enfocadas en algún disparate descabellado...

Ambas se voltearon al notar que su hermana menor había entrado sin llamar.

-¡No hagan eso! -exclamó alarmada Fanny Fox, la pequeña de la familia, quien al parecer había tenido un pequeño ataque al corazón al ver a sus hermanas con sus mascarillas picudas viéndola fijamente.

-¿Qué cosa?. - respondió Belle, con tono burlón.

-Lo que sea eso. - Contestó Fanny.

- Tú nos asustaste primero. - Expresó Charlotte mientras se quitaba la mascarilla.

La joven Fanny simplemente esbozó una sonrisa incrédula.

- ¿Qué es ese hedor insoportable?.

- ¿Tu perfume? - bromeó Charlotte, con la intención de ridiculizar a su hermana. - No es cierto. - una risita se dejó escuchar.

-Es Éter. - continuó Belle. - El último informe de Lancet reporta algo extraordinario.

-¡Se le puede dar éter al paciente y no sentirá nada! Y así operar sin dolor, ¿Comprendes, Fanny? Esto lo cambia todo. - añadió Charlotte, mientras la agarraba de los hombros y le sonreía.

Fanny, quien al parecer no captó o simplemente no se impresionó, se limitó a sonreír forzadamente.

-Vaya, qué interesante... Vamos. El honorable Mortimer Smales está por llegar y hay mucho trabajo por hacer. - Esta vez se dirigió a su hermana mayor Belle.

- ¿Quién era? Recuérdamelo.

- El honorable Mortimer Smales acaba de llegar tras un arduo viaje de cuatro meses desde Inglaterra. - exclamó la joven más pequeña - ¿Te das cuenta de todo el esfuerzo que hice para traer pretendientes hasta Australia?

- Lo siento, pero ahora mismo no tengo tiempo para atender a alguien llamado Mortimer. - respondió Belle, tomando un estetoscopio para posteriormente usarlo en su hermana Charlotte. - Inhala y exhala, Lottie.

- ¿Podrías apresurarte y casarte con alguien pronto, así yo podría...?

- ¿Te refieres a entrar en lo que de manera tan refinada llaman en el servicio de bodas "Unión sexual"? - la interrumpió Charlotte.

-¡Shh!, no emitas ni un sonido. -La interrumpió ahora Belle.

- Oh, eres tan vulgar. - respondió con una sonrisa reprimida. - Este es el sexto pretendiente que rechazas Belle. ¿Qué tenía de malo el último, Sir Jeremy Glasscock?

- Sus dientes. - contestó lacónicamente.

- Sabes que no puedo casarme hasta que lo hagas tú. Y luego, incluso después de eso, debo esperar a que Charlotte se case.

-Ya está.- murmuró Belle hacía Lottie, y está con una sonrisa agradecio.

- A mí no me importa en lo absoluto, soy muy feliz siendo soltera. - agregó Charlotte, guiñándole un ojo a su hermana.