Por favor, sé mi novio 🎀✨ || Kook Min || Adaptación

🎀 Capítulo 43. Comida 🎀

— ¡Aaaa! ¡Cucaracha! ¡Aaaa! — grito Ji-eun.

Hyung-Sik sostuvo su sandalia en su mano derecha y de un solo golpe la mato.

— Listo, está muerta.

— ¿Está realmente muerta? ¿Y si vuelve a la vida? — pregunto la pelinegra dudosa.

— Mira, está muerta. Voy a tirar estoy, ve a darte una ducha. — dijo Hyung-Sik mientras recogía la cucaracha del suelo.

Ji-eun miró a la cucaracha con disgusto y se fue al baño mirando alrededor, tenía miedo de que volvieran a salir cucarachas.

Jungkook acababa de llegar a casa, vio a su padre sosteniendo una cucaracha en la mano. El pelinegro se acercó lentamente a él.

— Papá, ¿de dónde sacaste esa cucaracha?

— De el baño, tu hermana estaba gritando incoherentemente cuando la vio. — dijo mientras levantaba la cucaracha en su mano.

— De acuerdo. — dijo Jungkook, alejándose.

Entró a la casa, pero no encontró a su madre en esta.

— ¿Dónde está mamá? Papá y ella suelen estar juntos como uña y mugre. — se pregunto el pelinegro sorprendido.

Caminó hacia su habitación, abrió la puerta del dormitorio y se acostó en su suave cama.

Después de estar fuera todo el día, finalmente pudo relajarse, aunque solo fuera por un momento, vio marcas de graffiti en sus manos.

El pelinegro era demasiado vago para ir al baño a limpiar las marcas de bolígrafo en su mano, cerró los ojos por un momento.

Al principio sólo quería cerrar los ojos por un momento pero fue demasiado lejos y se quedó dormido hasta la noche.

Jungkook se despertó cuando escuchó un golpe en la puerta desde afuera de su habitación, abrió la puerta lentamente.

— ¿Por qué llamas a mi puerta? — dijo medio consciente y con los ojos aún cerrados.

— Jungkook, ya es tarde. Todavía estás usando tu uniforme. Duchate y luego bajas a cenar. — dijo Shin-Hye, alejándose después de decir eso.

Jungkook asintió y luego fue a su habitación y tomó una toalla. Shin-Hye se sentó en una silla junto a la mesa del comedor.

— ¿Dónde está Jungkook?  ¿Todavía no se ha despertado? — Preguntó Hyung-Sik.

— Está despierto. Le dije que se diera una ducha. Comamos primero.— dijo Shin-Hye mientras ponía arroz en su plato.

Hyung-Sik, Shin-Hye y Ji-eun comieron con gusto, Jungkook había terminado de bañarse y estaba comiendo con los tres.

Shin-Hye vio que había marcas de graffiti en la mano de su hijo.

— ¿Por qué rallaste así tus manos? — le pregunto.

— Cuando estaba en la escuela, Taehyung me rayo la cara y las manos. Por eso mis manos están llenas de rayas. — dijo mientras tomaba algunas guarniciones.

— ¿Por qué no las limpias con jabón? — preguntó Shin-Hye sorprendida por su hijo.

— Me acabo de dar una ducha rápida para poder comer con ustedes.

— Después de comer lávate las manos con jabón. — ordenó Shin-Hye.

— Sí mamá, las limpiaré después de comer. — contesto Jungkook.

El pelinegro devoró su comida con gusto, Shin-Hye y Hyung-Sik habían terminado de comer. Jungkook y Ji-eun se encontraba solos en la mesa del comedor.

— Hermano, peleé con Soo-bin. No entiendo, la actitud de él siempre cambia. A veces es amable conmigo y a veces se mantiene alejado de mí y es frío. Desde que me acerqué a Namjoon, Soo-bin ha cambiado. — dijo Ji-eun.

— ¿No sabes por qué se está comportando así contigo? — Dijo mirando a la pelinegra por un momento.

— Dímelo, hermano. — dijo impacientada.

— Descúbrelo por ti misma, solo tú puedes hacer que Soo-bin vuelva a ser como era antes. Adiós. — dijo alejándose.

— ¡Hermano! — grito molesta.