Por favor, sé mi novio 🎀✨ || Kook Min || Adaptación

🎀 Capítulo 55. Verdades 🎀

Jimin y Jungkook llegaron a la escuela, el rubio se acercó a sus dos amigos y conversaron juntos.

— ¿Cómo va la relación con Jungkook? — pregunto Nayeon.

— Va bien, ¿por qué preguntas eso?

— Solo estoy realmente sorprendida de que sigas saliendo con él.

— No necesitas estar sorprendida, Jungkook realmente se preocupa por mi y me ama. — dijo sonriendo, sentía que todo ese tiempo, Jungkook era la persona que siempre estaba ahí para ayudarlo.

— Qué dulce, realmente quiero tener un novio como Jungkook. — dijo Hoseok.

— No te hagas ilusiones, encontrar a alguien como él es raro. — dijo Nayeon, haciendo que Hoseok fuera consciente de que los sueños podian no hacerse realidad.

— Nayeon, tal vez conozca a alguien como Jungkook cuando vaya a la universidad o al trabajo. Hay muchas posibilidades para mí. — dijo Hoseok obstinadamente, estaba seguro de que su destino lo llevaría al príncipe de sus sueños.

— Como digas.

Cuando terminó la clase, Jungkook y Jimin se fueron a casa. Dirigiéndose hacia el estacionamiento, Jimin vio a Ji-hyo riéndose a carcajadas junto con Jin.

Esa fue la primera vez que Jimin vio a Ji-hyo tan feliz en su vida. El rubio miró fijamente a la chica durante mucho tiempo hasta que finalmente Jungkook agarró su mano.

Hyunjin también habia llegado a la escuela, tenia la intención de recoger a Ji-hyo hoy y llevarla a la tumba de su madre.

Hyunjin se acercó a Ji-hyo que estaba hablando con Jin, ella se sorprendió un poco al ver a su hermano ahí.

— ¿Por qué estás aquí? — pregunto la castaña.

— Quiero llevarte a un lugar, ven conmigo ahora. — dijo tomando a su hermana de la mano.

Hyunjin llevó a Ji-hyo en moto y cuando llegó a la zona del cementerio esta empezó a sentir algo extraño.

— ¿Por qué me trajiste aquí?

Hyunjin miró a Ji-hyo por un momento, ella se sentó junto a él. Hyunjin respiró hondo.

— Está es la tumba de nuestra mamá, Ji-hyo. — dijo.

— ¡¿Qué?! hermano, no bromees conmigo. — dijo incrédula.

— No estoy bromeando contigo, te estoy diciendo la verdad. Esta es la tumba de nuestra madre. Mamá murió cuando te dio a luz. La que está contigo ahora no es nuestra madre. — dijo HyunJin, explicando todo con lágrimas en los ojos.

Ji-hyo no podía creer en las palabras de su hermano, inclusive parada frente a la tumba de Eun-Bi, solo se quedó en silencio, no podía expresar los sentimientos que tenía.

— Siéntate a mi lado. — dijo Hyunjin mientras tiraba de la mano de su hermana para que se sentara.

Ji-hyo jadeó y luego salió corriendo del área del cementerio. Hyunjin sólo pudo ver a su hermana huir.

— Tal vez es demasiado duro para Ji-hyo aceptar que mamá está muerta. Pero no te preocupes mamá, estoy aquí para cuidar de ella. — dijo HyunJin mientras se secaba las lágrimas.

Ji-hyo entró a la habitación con sentimientos encontrados.

— Eso significa que todo este tiempo me han mentido. ¿Por qué me mintieron, por qué? — grito con rabia y decepción.

De repente, recordó las fotos que le había regalado su abuela, sacó la caja debajo del colchón.

Ji-hyo volvió a mirar la foto de la cercanía de su padre con Eun-Bi, hasta que encontró una foto de la boda de Eun-Bi y Ji-Soo.

De repente las lágrimas de cayeron profusamente, Ji-hyo no entendía nada.

En cada cumpleaños la abuela seguia regalándole cosas de Eun-Bi, quien Ji-hyo siempre había pensado que era su tía, pero en realidad era su madre biológica.

La castaña siempre sintió que So-Hyun nunca la amó, finalmente entendió por qué la mujer siempre actuaba así con ella.

— No es de extrañar que durante todo este tiempo, mi madre nunca me haya amado, lo que he hecho todo este tiempo siempre ha estado mal a los ojos de ella. Nunca ha pensado en mis sentimientos durante todo este tiempo, si no hago lo que dice simplemente me pega, finalmente entiendo porque. — dijo con lágrimas en los ojos.

Ji-hyo empacó sus cosas con determinación, quería irse de esa casa y vivir con su padre biológico, Ji-Soo.

Ji-hyo llamó a Jin, sabía que solo él la podía ayudar.

— ¿Puedes venir por mi?

— Sí, espera ahí. — dijo Jin por teléfono.

Ji-hyo colgó la llamada. Salió de la habitación cargando varias maletas, So-Hyun, que acababa de llegar a casa, la miró.

— ¡¡¿A dónde vas?!! — le pregunto, mirándola fijamente.

— Quiero ir a casa de papá, es hora de que vuelva con él. — dijo, mirando fijamente a So-Hyun, quería salir de esa casa.

— ¡Entra ahora a la habitación! — dijo en voz alta.

— ¡No quiero! Me iré a casa de papá y no puedes impedirme que me vaya. — dijo conteniendo su enojo, estaba harta de todo el trato que So-Hyun le daba, está vez ella iba a contraatacar.

— Ji-hyo, soy tu madre, ¿Cómo te atreves a hablarme así? — grito con ira.

— ¿Mi verdadera madre? Mi verdadera madre está muerta. Deja de fingir que eres mi madre.

— Soy tu madre, no creas lo que dice tu padre. — Dijo So-Hyun con una voz que se hacía cada vez más alta. No quería simplemente perder a Ji-hyo.

— No fue papá quien me lo dijo, simplemente termina el drama, tía. Ya no soy una niña y a partir de ahora no volveré a verte.— dijo mientras sacaba algunas de sus maletas.

— ¿Crees que puedes salir de esta casa? — pregunto la mujer, mirándola fijamente.

So-Hyun pidió a sus hombres que arrastraran a Ji-hyo, la chica siguió rebelándose mientras buscaba a Min Kyu Bong y Hak Si-U.

"¿Dónde están?" Penso.

Ji-hyo fue arrojada a un almacén oscuro y sucio, So-Hyun se paró frente a la puerta con una sonrisa malvada.

— ¡¿Por qué me estás haciendo esto?! — grito Ji-hyo.

— Este es el resultado de todas las acciones de tu madre.

— ¿Qué hizo mi madre para que me hagas esto? — dijo mientras intentaba levantarse.

— Tu madre se llevo todo lo que tenía, incluso a tu padre. No dejaré que sus hijos vivan felices nunca.