El poder tiene límites (TLH) (+18)

El inicio

Narrador: Lincoln

Era un día como otro, me levanté fui al baño y sorpresivamente no había mucha fila para entrar, tarde aproximadamente unos 10 minutos y pude salir tranquilamente viendo cómo mis hermanas ya estaban formadas esperando su turno y algunas otras apenas despertaban, yo me límite a saludar un poco frio igual que siempre hasta llegar a mi cuarto.

Me seque el cabello y me cambié rápido para no desperdiciar tiempo, arregle mi mochila y sali al pasillo directo con dirección a las escaleras topandome con mi hermana Lori quien interrumpido mi andar.

"Lincoln! Hoy tendrás que asistir a una cita doble conmigo, Ronnie Anne y Bobby, quedo claro?" Comento la rubia con tono amenazador que para colmo empeoraría si respondo de mala manera cosa que como siempre hacía.

"Jeje hoy tengo algunas cosas que hacer así que..." Fui interrumpido justo cuando ya iba a salir del corredor y bajar las escaleras por otra de mis hermanas e incluso por la misma Lori.

"Lincoln! Más tarde vas a ayudarme a prepararme para mi concurso de belleza del próximo viernes" Exigió la más caprichosa de mis hermanas.

"Oh no Lola! Él irá con su novia a una cita romántica más tarde así que puedes ir pensando que haras." Comento con superioridad la mayor, como si fuera a acceder alguna de las 2 peticiones.

"Para empezar no iré a participar en ninguna de sus actividades y díganle a Liberty que tampoco asistiré al entrenamiento hoy" Comenté safandome de esa situación con rapidez y bajando las escaleras a toda velocidad para hacer mi desayuno rápido y salir.

Algunos dirán que soy algo duro con mis hermanas ya que a veces las ayudo y a veces no, por qué? Simple, me dan igual sus vidas y cuando tenga tiempo les ayudaré, pero yo estoy siempre primero que esas rubias. Y algunos se preguntarán 'a que me refería con entrenamiento?' pues es simple, hoy tenía que asistir junto a Liberty a un entrenamiento espiritual para aumentar nuestros poderes, si escucharon bien, todos los Loud incluyendo me tenemos algunos poderes que varían mucho por ejemplo Lynn puede controlar el fuego sin daños mientras que Lori puede crear distintos dispositivos tecnológicos con solo pensar los.

Dejemos estás explicaciones de lado y vayamos a la maldita escuela.

Llegué desplazando me con un pequeño truco hasta la escuela donde ví a varios de mis compañeros recorriendo la institución, algunos en sus casilleros, otros ya listos en sus aulas o escuchando música. Yo me límite a salir al campo de entrenamiento de la escuela que es lo único bueno de estar aquí, era un lugar grande cubierto de rocas y un poco de vegetación, en él encontré a mis grandes amigos donde curiosamente había un nuevo integrante, Chandler.

"Hola Lincon!" Saludo la más alta y de tez morena llamada Stella

"Hola chicos y... Chandler" Dije de mala gana, ese tipo siempre era una molestia.

"Hola Larry, cómo llevas tu cicatriz en la espalda?" Maldito imbécil, le demostraré lo que de verdad es una cicatriz.

"Aún duele, tu cómo llevas la humillación pública que te dió un don nadie?" Respondí algo molesto, ese desgraciado de verdad que es un estorbo.

"Tu ganas Larry" comento sonriente a lo que yo le respondí de igual manera pero yo sin sonreír tanto, chocamos los puños mientras todos los demás reían. De verdad creían que me caía mal este tipo? Es la mamada!

"Por qué estás aquí viejo?" Comente mientras todos nos sentamos en alguna roca o árbol artificial que había cerca.

"Nada del otro mundo, quería saludar a mis viejos amigos y de paso invitarlos a que vayan al club de peleas que mi papá acaba de inaugurar, qué dicen chicos?" Este hombre siempre está lleno de sorpresas, me encantan las sorpresas!