Star Wars: Cambio de Rumbo

Capítulo 13.- Sith y fábricas

Santiago observo con detenimiento los tres mapas que mostraban las zonas más ricas en minerales dentro de los planetas poblados y con infraestructura ya desarrollada, los representantes de la federación de comercio estaban presentando los planos para la construcción de la dichosa fábrica droide, argumentando que esto podría atraer ingresos y abrir más oportunidades de trabajos dentro del sector.

Claro, Santiago sabía a ciencia cierta que la mayor parte de estos trabajos eran automatizados, y abría muy poca exigencia de mano de obra, aparte que la federación no se destacaría precisamente por ser buenos empleadores, de hecho, estaba seguro que obligarían a las poblaciones nativas pese a estar afiliadas a la CSI a trabajar hasta el último aliento

- Y supongo, dará el visto bueno para empezar la construcción inmediata de una fábrica de droides dentro del sector - hablo un Neimoidiano bastante motivado

- Solo requerimos un poco de asistencia local, y la fábrica estará construyendo droides en menos de un año, debe ver los beneficios al construir estas instalaciones - señaló el otro Neimoidiano que Santiago pudo reconocer, Nute Gunray

- En parte, creo que tienen razón, sería un beneficio tener una fábrica de droides, porque dicha fábrica deben tener una cadena de montaje, así como técnicos, mineros que explotan la riqueza mineral, y el trabajo atrae gente - Nute Gunray y su compañero Neimoidiano asintieron

- Exactamente Lord Revan, ¿entonces nos dará el permiso? - pregunto ansioso Nute

- Si, pero tendran que buscar un mundo no colonizado para eso - Gunray miró a su compañero quien negó con la cabeza confundido

- ¿Por que un mundo sin colonizar? - preguntó el virrey

- No soy experto en colonizar un planeta, pero tengo un conocimiento básico sobre el tema en mi opinión personal - Señaló algo nervioso Santiago a su invitado no deseado pero enviado por el conde Dooku - Si construimos una fábrica, ¿no sería hacerlo en un lugar menos visible? - pregunto

- Bueno, en ese punto puedo razonar con usted su alteza - declaró Nute, frotándose las manos - pero podríamos encontrar un lugar más apartado dentro de uno de los mundos del sector, nada tan atrevido como colonizar un mundo desde cero - Santiago penso rapidamente un contraargumento

- Si, pero al referirme a menos visible, me refiero a un mundo menos poblado o virgen, puede que mi sector no destaque por su increible población, ni por una economía fuerte, así que si una mega corporación como la suya de repente empieza a invertir así como así llamara la atención, pero si ponemos esto como un proyecto para una nueva colonia, quizá no se fijen dos veces en dicha fábrica - Nute Gunray movió su cabeza pensativo, como sopesando la idea

- No lo creo su alteza, al senado poco le importa las actividades de la federación, y si llegan a fijarse solo basta con unos cuantos créditos para que desvíen las miradas - declaró el otro neimoidiano con aire cómplice

- Sigo insistiendo, además, mi gente no recibirá a bien a la federación de comercio, por lo que colonizar un planeta sería más apto, aparte, sería más beneficioso para Aldrovia si lo hacemos de esa forma, atraeremos colonos, y si es necesario, pagaremos todos los gastos - insistió Santiago

Por un momento los representantes se miraron, Nute Gunray mira a su colega, hablan un rato entre ellos en su lenguaje natal, parecen llegar a un acuerdo cuando Nute Gunray se gira aparentemente satisfecho, frotándose las manos 

- Bueno su alteza, podríamos aceptar construir la fábrica en cualquier planeta de su elección, solo indíquenos el tiempo en que la desea - se expresó con una sonrisa el Neimoidiano

- Eso puede verlo usted, dado que yo costeare la fábrica, dicha fábrica sería mía ¿no es así? - pregunto de forma inocente, antes de recibir una respuesta Santiago volvió a hablar - Estaría a pagar un 10% de las ganancias de esta fábrica, dado que no producirá exclusivamente droides de batalla, y pienso usarla para alimentar la industria de la nueva colonia ¿sería algo beneficioso para ambos lados? - Nute Gunray lo pensó

- 50% de las ganancias - ofreció 

- 20% de de las ganancias - respondió Santiago

- 40% en total - insistió Nute

- 25% por diez años - Nute analizó esta contraoferta de Santiago

- Que sea por quince años - Santiago soltó un suspiro, si todo seguía su curso el Neimoidiano estaría muerto antes siquiera de llegar a los diez años

- Suena justo - se expresó

- Bueno, la Federación proporcionará los materiales, los constructores y arquitectos, además de los técnicos que harán funcionar dicha fábrica, indíquenos qué planeta y comenzaremos tan pronto sea posible, solo no olvide la última parte del acuerdo es más... - Nute se frotó las manos con Avaricia - ¿Podría proporcionarnos su firma Lord Revan? - Santiago asintió queriendo poner fin a esta discusión

Coruscant
26 ABY
Zona Industrial abandonada

- Así que el muchacho sabe sobre una conspiración - pregunto Sidious

- Así es maestro, en realidad no sabe mucho, solo sabe sobre rumores de una conspiración dentro de la república - explicó Dooku caminando al lado de su maestro

- ¿Que más te ha contando? - preguntó el sith

- Sabe sobre grievous, pero cree que soy el autor intelectual de todo - el viejo sith se rio

- Curioso, te extorsiono y exigió unirse, si fuera un usuario de la fuerza probablemente lo reclutaría, tiene un método peculiar para trabajar - Dooku asintió

- Algo particular, pero en verdad parece creer en la causa separatista, dudo que se nos oponga o dude de nuestros métodos - el Viejo sith se detuvo frente a una ventana practicada en la pared que daba vista hacia las zonas abandonadas de coruscant

- Mantenlo cerca Dooku, tanto para vigilarlo y como aliado, si ya rasca la superficie de la conspiración puede que sea peligroso, no quiero que mis planes se arruinen solo por que un niño busca más de lo que debe - Dooku asintió nuevamente

- Si maestro, ¿alguna otra cosa que desee? - pregunto

- Uhm... déjame ver... - Sidious estuvo meditando un momento, pensativo, sonrió dejando ver sus dientes amarillos - Infórmame de cualquier cosa que haga el chico - fueron sus palabras