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Era un hermosa mañana en Ostania, no había nubes en el cielo y se podía visualizar el bello cielo azulado, la mayoría de personas estaba o descansando o paseando por la ciudad, la familia Forger se encontraba descansando, aprovechando que era fin de semana.
—No, lo estás haciendo mal, mira, aquí está el error —Loid apunta una parte de el procedimiento que había realizado su hija Anya en una fracción, el espía no perdia ninguna oportunidad para poner a estudiar a su "hija".
—Anya ya se aburrió, Anya quiere ver dibujos animados- —Su "padre" niega con la cabeza
—Aun te falta desarrollar estos problemas—Anya infla sus cachetes y frunce el ceño, el espió suspira exhausto—Bien, creo que saldré un rato-El se levanta del sofá, y camina en dirección a la puerta-Yor ¿Puedes ayudar a Anya a terminar sus deberes? -Yor deja de limpiar los platos y voltea en dirección a Loid, está asiente con alegría
—Papi, mami es mala ayudando—Anya comenta de forma seca, apuntando a su madre
-¡¿Tan mala soy!?-Una pequeña lágrima sale del ojo de Yor—¿Por cierto, a donde vas?—La pelinegra pregunta con curiosidad
-Solo voy a comprar algo en el supermercado —El sonríe amigable—¿Necesitan algo?
-¡Mani!—La infante alza sus brazos con emoción, provocando una risita por parte de la mayor
—No necesito nada, muchas gracias—Loid asiente y se despide, se coloca su sombrero y sale por la puerta.
El espía camina por la ciudad con tranquilidad, agradeciendo internamente por tener el día libre y no estar tan lleno de misiones como estaba acostumbrado, solo con la Operación Strix era suficiente.
Pero estaba seguro de que dentro de días volveria a estar repleto de misiones secretas, el estaba consciente de ello, el trabajo de un espia no era fácil y lo sabía, después de todo, la paz entre las naciones básicamente dependía de el.
El suspira, toda esta presión a veces lo carcomía por dentro, era el peso que tenía que llevar al ser el mejor espía de la asociación...era un sacrificio noble incluso si sus acciones no salían en la prensa o al público en general.
Luego de comprar todo lo necesario va directamente a rumbo a su casa, sin intenciones de distraerse comprando en algún otro local, además que quería aprovechar su tiempo libre al máximo, sin embargo hay un lugar que le llama la atención. Un pequeño edificio con un cartel que se leía lo siguiente.
"Cafe Smile"
“¡Especial, aniversario de inauguración! ¡25% de descuento!”
¿Un nuevo local? Loid alza una ceja, sin darle mucha importancia, sigue caminando pero se detiene, algo lo atraía a ese lugar y no sabía porque, como si lo llamara, primero lo ignora, pero luego de varias veces de meditarlo seriamente, el camina hacia la cafetería.
