-Han pasado la primera prueba, atenderán a la segunda en el campo de entrenamiento número 44 o bosque de la muerte. Mucha suerte, mocosos-entonó Ibiki desde el frente.
Miré mi hoja del examen con cansancio, no había podido responder ni una sola pregunta ya fuera copiando o con mis propios medios, no lo había logrado. Deprimido me levanté lo más rápido que pude y salí de la academia, logrando exitosamente evitar a Hinata.
Afuera de la academia encontré a Sakura esperando por Sasuke, me mantuve cerca de ella hasta que llegó Sasuke y así empezamos a dirigirnos al bosque de la muerte. Al llegar me acerqué rápidamente a ambos disimulando mi entrada.
-Pensamos que nunca llegarías, Naruto- resopló Sakura tan pronto estuve a un lado de ambos.
-No seas demasiado engreída, Sakura- con sorpresa giré mi cabeza hacia Sasuke, mi mirada llena de intriga- acabamos de llegar- terminó, me miro con velocidad para señalar a donde había iniciado a hablar una shinobi sobre la siguiente prueba.
...
-Nos iremos por la derecha, vi a el equipo de la arena irse hacia el otro lado, lo mejor será evitarlo por ahora-Sasuke se acercó a mí, entregándome el pergamino que debíamos mantener a seguro para pasar la segunda prueba- mantenlo seguro, confió en que podrás- girándose hacia de nuevo hacia el bosque ordeno avanzar con un simple vamos.
Antes de empezar a avanzar, guardé con velocidad el pergamino en mi bolsa, luego unos cuantos pasos, rezagado, emprendí el camino que Sasuke había marcado, no mucho después de lo que Sakura tardo.
...
-¡Narutoo!-grito Sasuke.
Antes de que pudiera voltear lo suficiente para ver la causa de su advertencia me encontré siendo tacleado por una serpiente gigante, y mucho antes de siquiera pensar en liberarme ya había sido tragado.
Mi primer intento de escapar fue raspar las paredes de piel con un kunai para crear una abertura, como se puede pensar, fracasé, la piel era demasiado gruesa y áspera como para que el kunai le hiciera algo. El segundo intento fue usar mis clones de sombra para que por la cantidad la serpiente tuviera que vomitarlos, este funcionó mejor de lo que podría haber planeado haciendo a la serpiente explotar por la cantidad y lo repentino de los clones, luego empapado de su sangre comencé a correr a través del bosque en busca de mi equipo.
Con velocidad encontré mi camino de regreso con el equipo, para darme con la sorpresa que estaban siendo atacados por una shinobi de Kuza. Normalmente, habría escapado y tratado de completar el examen por mi cuenta o simplemente hubiera esperado a que terminaran con el problema en el que se habían metido, pero Sasuke estaba siendo extrañamente amable conmigo y por más que quisiera que no me afectase, lo estaba haciendo, no podría cerrar los ojos ante la situación.
Con el sigilo que había aprendido a tener durante mi infancia, me escabullí lo más cerca que pude de la Kuza-nin aprovechando su atención en Sasuke. Saqué un kunai con velocidad y me abalancé apuntando a su yugular.
-Muy lento, pequeño demonio- rio la voz, luego levanto su brazo con la mano completamente extendida, casi pude ver en cámara lenta como esa mano se aferraba a mi cuello y me estrellaba contra un tronco. Elevé mis manos, intentando liberar la presión en mi cuello, para mi mala suerte éstas estaban aprisionadas con los cuerpos de dos serpientes, enroscadas con fuerza alrededor de mis antebrazos - Es un gusto al fin conocerte, jinchuriki- me sonrió macabramente la figura.
-¡Suéltalo¡- estalló Sasuke, con mi vista periférica noté la robusta figura de Sasuke, en posición de batalla, con un delgado cuerpo completamente congelado en shock a su lado, Sakura.
-Por supuesto, querido-se burló. Con velocidad la segunda mano de la shinobi que se había mantenido colgando a un lado de torso se movió para abrir mi chamarra y destrozar parte de mi playera de malla, dejando mi abdomen expuesto; luego con la misma velocidad, se elevó en el aire, cada dedo se iluminó con un kanji y pronto esa mano alcanzó mi abdomen, alcanzando mi sello sentí los kanjis hundirse en él dolorosamente, recibí el ataque con un estruendoso grito de dolor. Finalmente, la mano que retenía mi cuello volvió a caer flácidamente a un lado del torso de la shinobi, al mismo tiempo caí al suelo patéticamente.
-¡Narutoo¡- volvió a gritar Sasuke.
Mirando la preocupación en su cara, intenté ponerme de pie. Tan pronto como me moví inclinando un poco mi abdomen para ponerme de pie sobre una rodilla y darme impulso, me vi obligado a retorcerme sobre mi abdomen en dolor. Intenté concentrarme para aliviar el dolor con los conocimientos que había aprendido de mi madre, sin embargo no podía controlar mi chakra lo suficiente para eso.
-No puedo, Sasuke. Vete- trastabillé mis palabras a través de la cortina de dolor.
-Naruto...-Sasuke dudaba...y yo también.
Cerré mis ojos. Después de unos segundos los volví a abrir, liberándome el tiempo necesario de las dudas.
-¡Maldita sea, Sasuke. Lárgate. Ahora¡- me doble de nuevo con un repentino espasmo de dolor, cuando mi cabeza volvió a su lugar y lo vi parado sin poder decidir qué hacer, solté mi ira-¡H.U.Y.E. AHORA¡-repetí sacando el pergamino de mi bolsa y lanzándoselo a la cara conrabia.
Como si eso fue lo único que Sasuke necesitara, se movió en automático, tomando la mano de Sakura en el camino y arrastrándola a correr a través del bosque. Antes de que la shinobi lograra alcanzarlos me tire desde un costado, con mi último kunai en mano. El kunai aterrizó en su pecho, justo en el lugar del corazón.
-Maldito mocoso- soltó con una calma aterradora, sacando el kunai de su pecho con una lentitud igual de aterradora, dándomela vista de su herida curándose con velocidad, mostrándome los músculos y la pielvolviéndose a unir con la ayuda de una membrana transparente. En cortos pasos la shinobi se acercó a mí desechando mi kunai a un lado,demasiado lejos de mí, con poco interés- arruinaste meses de planeación. Ahora es mi turno de enseñarte a no entrometerte en el asunto de los demás.
Intenté moldear mi chakra con desesperación. Al no lograrlo mi única alternativa era quedarme a ver mi muerte con impotencia. Pude ver como la shinobi invocaba una espada que no tenía ningún parecido a ninguna que hubiera visto. Cerré mis ojos esperando el impacto.
ESTÁS LEYENDO
Unión forzada / Kyunaru_ Kuranaru
Fiksi Penggemar-Te matare, Naruto. Es necesaria tu muerte para la muerte de Itachi- tras esas palabras sentí el chidori de Sasuke impactar de lleno contra mi pecho, perforándolo, después de eso todo se volvió oscuridad. -Naruto y sus personajes pertenecen a Masash...