28

462 30 5
                                    

-No puedo creer que este pasando eso.-Me cruce de brazos molesta.

-Tranquila _______, es solo algo de un tiempo, no estarán siempre juntos.

-A pasado una semana Lee y no se le separa para nada, apenas y puedo hablar con el.

-Es una gata rompe hogares.-Se cruzo de brazos Tenten.

-No seas grosera con la señorita Tenten, es nueva aquí ________ no piensa así y es Novia de Neji ¿Verdad _________?.

-Es una gata rompe hogares muy bonita.-Afirme.

-_________ eso es muy grosero de tu parte.-Se quejó Lee.-Neji solo está cumpliendo con una misión.

-Tienes razón.-Suspire avergonzada.

-Mira hablando de ellos están haya.-Señaló Tenten.-Uh..no mires.-Sonrió nerviosa tapándome los ojos.

-¿Qué? ¡Tenten me estas dejando sin ojos deja de apretarme!.-Me queje soltandome.-¿Porque no quieres que vea?.-Pregunte dandome la vuelta.-Oh..es eso.-Sonrei forzadamente.

Meiji estaba susurrandole algo al oído a Neji mientras este veía en nuestra dirección y se sonrojaba, su mirada se topo con la mía y rápidamente la apartó.


-Tranquila ______, no puedes matarla.

-No quiero matarla, solo estoy confundida, se están tomando mucha confianza.

-Vienen para acá chicas, disimulen.-Gritó Lee.- ¡¡¡Hey!!! Es raro verlos aquí no los estábamos observando.

-¡¡Lee!!, nosotros ya nos vamos, tenemos que ir a hacer algo.-Hablo con rapidez Tenten jalando a Lee.

-Hola..-Sonrei forzadamente.

-Hola, Neji y yo iremos a comer y después a un campo de flores ¿Quieres ir con nosotros?.

-¿Un campo de flores?...-Pregunte frunciendo el ceño viendo a Neji el cual desvió la mirada.

-Sí, Neji dijo que era un lugar especial y me da mucha curiosidad verlo más a fondo esta algo escondido ayer fuimos y es realmente hermoso.

-Oh...-Solté sin más.

-_______ escuch-

-Tengo que irme diviértanse.-Sonrei ampliamente para desaparecer de ahí.

Respiré hondo, intentando calmar el torbellino de emociones que me llenaba

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Respiré hondo, intentando calmar el torbellino de emociones que me llenaba.

El campo de entrenamiento estaba vacío, y cada golpe que daba a los muñecos de práctica era un intento de silenciar los pensamientos que me atormentaban.

La soledad del lugar era un reflejo de mi estado de ánimo, y cada golpe que daba a los maniquíes de práctica era un intento de liberar la frustración que sentía dentro.

Una Luz en tu mirada (Neji Hyūga y Tu) CONCLUIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora