En medio de su egoísmo le pidió a los dioses que se llevaran al niño sin madre, que lo alejaran para nunca volverlo a ver. La peste llego y los dioses le arrebataron a su primogénito y su amado esposo. Ahora el Bastardo es un Stark, se sienta en la...
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Ingreso temeroso seguido de cerca por sus acompañantes; mirando con interés las antiguas ruinas que habían encontrado. Era la primera vez desde que comenzaron las expediciones a las tierras más allá del eterno invierno, donde nunca antes habían encontrado rastro alguno de vida o presencia de algún pueblo humano, que encontraban algo como esto.
Era una gran estructura de roca negra como la noche parecía ser una gran torre enterrada en medio de la nieve; Benjen se encontraba fascinado cuando la vieron por primera vez, siempre supo que la tierra iba más allá de las tierras conocidas como el Corazón del invierno, después de tantos viajes y expediciones fallidas para descubrir algo que le diera un nuevo propósito a la ya moribunda hermandad de la Guardia de la Noche.
Nunca espero encontrar dicha estructura, viajaron por meses, tal vez incluso ya habría pasado un año completo desde que se despidió de su sobrino y sus sobrinas; pero su espíritu aventúrelo le impulso a seguir hacia adelante, quería poder cruzar las grandes montañas azules y ver con sus propios ojos que había detrás de esa tierra tenebrosa que incluso el antiguo pueblo libre evitaba.
Entonces vieron a la gran torre Negra que resaltaba por todo el lugar, pero no fue fácil ir a ese lugar, un gran cumulo de agujas de hielo se encontraban por medio del camino, con cada paso que daba tenía la extraña sensación que la muerte los estuviera asechando.
El fuerte viento comenzaba a golpear con fuerza su rostro, como si la misma naturaleza les indicara que deberían regresar. Pero Benjen quería avanzar, siempre hacia adelante y nunca retroceder, pero cada paso que daba su cuerpo se inundaba mas en la nieve y cuando por fin llegaron a la parte superior de la torre sobresaliente, ingresar resulto ser mucho más difícil.
Usaron la cuerda que tenían, la cual de por si era poco, tuvieron que recoger algunas rocas del lugar las cuales eran demasiado escasas hasta que al final decidieron acumular algo de nieve en un intento por conseguir más altitud.
Cuando por fin ingresaron por la única ventana visible de todo el lugar notaron de inmediato unas escaleras cubiertas por el hielo que descendían a lo que parecía ser el interior de aquella extraña; Benjen no lo dudo y comenzó a descender.
"Espere, señor no creo que debamos seguir"
Benjen volteo su mirada para ver a uno de sus acompañantes completamente temeroso, pero no le importo algo construyo este lugar y deseaba ver con sus propios ojos quienes pudieron haberlo hecho.
Que pueblo o que clan, tribu alguna de hombres construyeron este lugar en medio de la nada y mientras cada paso que daba, sentía que su corazón se aceleraba y estaba a punto de estallar ya fuera por la emoción o por ese viento helado que parecía susurrarle - regresa, regresa - una y otra vez, pero decidio ignorarlo completamente.
Pero el avanzo, la oscuridad nublaba todo el lugar, encendía una antorcha - Un parte esencial en su equipo como primer guardabosques - Uso su pedernal para encender la lana envuelta y bañada en una capa de grasa de ballena y consiguió por fin iluminar todo el lugar.
