Capitulo 3.

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Len.

Desperté temprano, me levanté de la cama y Rin se había ido, salí de la habitación directo a la sala de estar.

—Buenos días Len—escuche una voz que me saludaba desde el sofá frente a la televisión, era Miku.

—Buenos días, ¿como amaneciste?—dije sonriendole.

—Muy bien, gracias por preguntar—me sonrío y siguió mirando la televisión.

—¿Ya desayunaste?—abrí la nevera buscando algo de comer.

—No, estoy esperando a Rin y a Kaito, por cierto, ya se demoraron—me volteó a ver y miro el reloj.

—¿A donde fueron?—intenté fingir que no estaba algo celoso.

—Dijeron que irían a comprar algo para desayunar, pero ya se han tardado un poco, estoy hambrienta—se echo de espalda en el sofá y tocó su estómago.

—Mm ya veo...—me crucé de brazos.

—Ya hemos llegado—se escucho abrir la puerta y Kaito grito.

—Genial, me moría de hambre—Miku se levanto del sofá, hacia Kaito que traía una bolsa.

—Buenos días Len—dijo Rin, mientras ponía otra bolsa sobre la mesa.

—Buenos días—dije fríamente, mientras me acercaba hacia la bolsa que Rin había puesto sobre la mesa.

—Bien, a comer—Kaito abrió la bolsa y saco unos panqueques, hot—cakes y crepas.

—Gracias por la comida—me levanté de la mesa después de comer y lleve mi plato al lavavajillas.

Me fui a mi cuarto y comencé a jugar videojuegos; Así que, Kaito, Ahora que recuerdo, hace tiempo, pasó algo con Kaito. Pensé tratando de recordar aquel día.

•Recuerdo de Len•

—Len, ¿como estas hermano?—Kaito se sentó junto a mi en el sofá del salón.

—¿Que hay?—chocamos las manos.

—Oye Len, ¿puedo hablarte de algo?—Kaito me miro seriamente.

—Te escucho—apague el televisor y voltee a verlo.

—Me gusta Rin—me miro seriamente, hablaba enserio.

—¿Qu—que dices?, pero...—me sorprendí.

—Sólo quería que lo supieras, y que me dejaras estar con ella, porque, ya sabes, es tú hermana—me interrumpió.

—Voy enserio y haré todo lo posible por quedarme con ella—se levantó del sofá y se fue.

•Fin del recuerdo de Len•

—No permitiré que Kaito me la quite—dije en voz alta frunciendo el ceño.

Pasaron como 30 minutos y alguien tocó la puerta de mi habitación.

—Len, ¿Estas ahí?—preguntó Rin tras la puerta.

Abrí la puerta y ella entró, cerrándola detrás de ella.

—¿Te pasa algo?—Rin se sentó en una silla frente a la computadora.

—No—continué jugando videojuegos sin voltear a verla.

—Entonces, mírame—se acerco a mi, tomo mi rostro y me forzó a mirarla a los ojos.

—No me pasa nada—sostuve la mirada y le fingí una sonrisa.

—Eres pésimo mintiendo Len—apartó la mirada y bajo la cabeza. —Dime la verdad por favor—me miro de nuevo.

—Estoy celoso—me acerque a ella y la mire a los ojos, ella se sorprendió.

Amor Entrelazado.(LenxRin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora