Capitulo 13.

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Len:

—Ahora sólo quiero tú perdón, por todo lo que te dije y te prometo que de ahora en adelante jamás volveré a lastimarte—Ya no pude aguantar, y deje salir las lágrimas que se me habían acumulado.

—Tienes mi perdón Len—Me dijo, lloré aún más, pero ahora esa lágrimas eran de felicidad, ella se acerco hacia mi y me abrazo, correspondi a su muerta de afecto y la estreche fuertemente.

—Extrañe tanto tus calidos abrazos—Le susurre oido, ella no dijo nada, no me importo mucho, en ese momento me sentía tan feliz que sólo pensaba en ella y yo.
Después de mucho tiempo nos separamos, había dejado de llorar, y al parecer ella también, su celular comenzó a sonar y ella contesto alejándose un poco.

—Era, Kaito, tengo que decirle que regresaremos a casa—Al escuchar aquel repugnante nombre se me erizo la piel, se había ganado tanto mi odio que sí lo volviera a ver, le partirá la cara, no me importarse sí el fuera más grande que yo.

—Rin—Dije algo desanimado y ocultado la furia que sentía, —Kaito, no me agrada en lo absoluto—Dije sin más, ella suspiro.

—Pero sí quieres que vuelva a casa, el también lo hara—Dijo y me sonrio.

—¿Quieres que te acompañe por tus cosas?—Ella tenía razón.

—Claro, vamos—Comenzó a caminar, llegamos al hotel y subimos el ascensor hasta llegar al piso.

—Len, no hagas nada tonto—Abrió la puerta y Kaito la recibió al instante.

—¿Porque el está aquí?—Kaito se altero al verme.

—Volveremos a casa—Rin trato de tranquilizarlo.

—¿Que dices?, ¿hablas en serio?—Se enfado con Rin haciendo que ella se asustara.

—Kaito—Rin lo tomo del brazo y este se zafo al instante.

—Rin, piensalo bien, el sólo te hará sufrir otra vez—Kaito estaba realmente enfurecido.

—No lo haré—Dije entrometiendome, Kaito me miro fulminante.

—No digas estupideces—Se abalanzo sobre mi tirandome al suelo, Rin trato de separarlo pero el la arrojó fuertemente haciéndola que se golpease en la espalda contra el sillon, junté todas mis fuerzas y lo aleje de mi, para ir hacia Rin.

—Calmate idiota, no quiero que ella salga lastimada por tus imprudencias—Dije ayudandola a levantarse.

—Yo no me iré, vete tú sí eso quieres, yo me qudare aquí—Se dirigía Rin, mientras se paraba y se iba su habitación, para nuestra suerte Neru y Nero no estaban en casa, así que no pudieron ver nuestra pelea, por suerte.

—¿Estás bien?—Le pregunté y ella asintio sonriendo, —¿Segura que quieres regresar a casa?—Le pregunté ella tomo sus maletas y asintio con la cabeza, la ayude con algunas y salimos del edificio, tomamos un taxi y nos dirigimos a nuestra casa.

Rin:

Había aceptado el volver a casa, apesar de que había dicho que sí, otra vez ese mal presentimiento me invadia completamente, ahora me sentía feliz, pero a la vez muy agobiada.

—¿Segura que estas bien?—Len tocó mi hombro para llamar mi atención.

—Claro—Le sonreí, me encantaba estar cerca de el otra vez, el me hacia sentirme tranquila, el sonrio y volvió a dirigir la vista hacia el frente, llegamos a casa, el me ayudó a bajar mis cosas.

—Bienvenida—Me dijo mientras contemplabamos nuestra casa, había olvidado incluso lo bonita que era, me sentía muy bien de regresar apesar de que sólo me había ido 2 semanas, entramos a la casa, Miku recibió a Len con un fuerte abrazo y un beso en la mejilla, "¿Para esto regrese?", pense algo molesta.

—¿Así que has vuelto?—Miku me miro desanimanda.

—Así es—Dije mientras caminaba en dirección a mi habitación, o la que se supone que es mi habitación.

—Espera Rin—Len corrio detrás de mi y tomo algunas maletas que yo traía y entramos a mi habitación.

—¿La limpiaste?—Pregunté algo sorprendida, ya que antes de irme, había dejado un completo desastre.

—Por supuesto—Me dijo y dejó mis maletas en el suelo.

—Gracias—Le sonrei y el hizo lo mismo.

—Y-yo iré a ver que cenaremos—Tartamudeo un poco y salió de mi habitación.

Saqué todo de mis maletas y comenze a acomodarlas, "me alegra que ahora todo vaya bien", pense y no pude evitar sonreír.
Pasaron varias semanas, ya no supe nada de Kaito, no me llamaba ni escribía, estaba algo preocupada, pero el tampoco me contestaba el teléfono, se lo dije a Len, el me mostró su celular, al parecer Kaito había enviado mensajes amenazantes a Len, diciéndole que se alejara de mi, eso me demostró que el sí estaba bien.

—¿Que le pasa a Kaito?, el definitivamente no era asi—Dije y Len levanto los hombros.

—Le gustas Rin—Len bajo la cabeza.

—Eso no tiene nada que ver—Replique algo molesta.

—Bueno ya no pienses en eso—Dijo y tocó mi hombro, durante estas semanas, nuestra confianza había regresado, el problema era Miku, ya que ella vivía con nosotros, siempre se entrometia y coqueteaba mucho con Len, me sentía muy celosa, pero esos celos desaparecían cuando Len la ignoraba y rechazaba por completo, estaba muy claro que a Miku le gustaba Len, pero Len no tenía esa misma idea, por suerte.

Amor Entrelazado.(LenxRin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora