"New life"

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Espere sentada en la cama que Tom volviera para que me llevara a el bar donde me recogió, pero pasé todo el día sentada esperando, miré por la ventana y me di cuenta que ya era de noche y que Tom no tenía intenciones de llevarme ahora.

Pude escuchar desde afuera unos pasos fuertes que venían a el cuarto, y la puerta se abrió era Tom, con su voz firme y sin ninguna expresión en su cara me ordenó.

"Adriana ven acá". Me levanté de la cama y con pasos lentos y sin romper el contacto visual me acerqué a él, dejó de mirarme y se dio la vuelta, fui a tras de él, se subió a su camioneta y yo alado de él, comenzó a manejar no me volteo a ver ni siquiera sentí que fuera por con él, condució asta el bar mi jefe Nick esperaba en la entrada y se miraba preocupado.

Tom paró afuera del bar. Me bajé de la camioneta y fui directamente hacia adentro ni siquiera quería ver a Nick, él en cuanto me vio trato de abrazarme pero no lo dejé.

Fui asta uno de los cuartos y comencé a quitarme esa ropa y ponerme la mía, estaba muy molesta me sentí traicionada por Nick.

Se abrió la puerta, Nick y Tom estaban afuera juntos Tom me miraba mientras me cambiaba me di cuenta pero no dije nada.

"Adriana puedes venir por favor." Pidió amablemente Nick, y después serró la puerta para que terminara de cambiarme; cuando acabe salí del cuarto y los miré a ambos.

"¿Que quieren?"

Tom se fue no tan lejos para que yo y Nick pudiéramos hablar.

"Nick por qué me vendiste, yo te dije que yo no quería meter con hombres y mucho menos que me llevaran asta su casa, ¿sabes todo lo que me hizo?" Grite con lágrimas en los ojos y con la vos débil; me miraba con la cabeza agachada miraba hacia el suelo porque no podía mirarme a los ojos .

"Lo siento Adriana, pero yo te prometí que tu vida iba a cambiar y lo estoy cumpliendo, Tom es tu oportunidad para cambiar tu vida, él quiere que te vallas con él a su casa, está ofreciendo dos millones por qué te vallas a su casa y te dejes tratar con reina." Lo estuve pensando mucho tiempo, y creo que tiene razón, es una oportunidad única.

"¿Sabes lo que me hizo ayer? Tú sabías que yo era virgen Nick, me traicionaste." Volvió a mirar abajo, se miraba avergonzado y culpable.

"Lo que pasó anoche Adriana, no volverá a pasar al menos que quieras." Tom dijo con una voz seria, voltee a verlo y por fin me dio una sonrisa que no me daba inseguridad.

"Está bien, pero no quiero estar encerrada en el cuarto." Sonrió aún más mostrando sus dientes.

"¿Entonces te irás Adriana?" Preguntó Nick con lágrimas en sus ojos.

"Sí..." se apresuró ha abrazarme, y darme un beso en la frente, también lo abracé con todas mis fuerzas, y salieron una que otra lágrima.

"Cuídate niña, tal vez no nos veremos en mucho tiempo." Lo volvió a abrazar y el beso mi frente otra vez, Tom me tomó del brazo y me jaló apartándome de Nick, uno de los hombres de Tom le dio tres maletines llenas de dinero a Nick y después nos fuimos.

Entramos a la camioneta y como siempre no dijo nada, en todo el camino estuve llorando, Nick me ayudó en todos mis problemas, me ayudó a salir de las drogas y depresión por la muerte de mis padres; y me compró un departamento y ropa.

Me di cuenta que Tom manejaba a una dirección diferente, pero no le di importancia, después de unos minutos llegamos a una casa lujosa y grande: tenia un jardín grande con una alberca enorme, la casa tenía piso de madera, tenía cinco cuartos y la habitación principal (la mía) tenía un balcón donde se miraba una vista hermosa de la ciudad; la casa estaba muy iluminada por las ventanas que dejaban pasar la luz del sol, atrás de la casa avía otro jardín donde avía una caballeriza, con los caballos más hermosos y grandes que he visto en mi vida.

In love with a demon || mafia Tom Kaulitz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora