Rafael Cauã Pereira Da Silva, Un brasileño de 26 años, es tranquilo, inteligente y divertido según sus familiares y Amigos
Samantha Rivera Treviño, Mexicana de 25 años, Streamer que ama a sus seguidores, es enojona
Estos dos se conocieron en Rio de...
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Narrador Omnicente
El sol comenzaba a ponerse cuando Samantha finalmente llegó al departamento de su novio, Rafa. Con cada paso que daba por el pasillo, sentía el peso del entrenamiento en sus músculos fatigados. Se detuvo frente a la puerta y respiró profundamente antes de girar la llave y entrar.
El departamento estaba envuelto en una tranquila penumbra, solo iluminado por la luz suave que se filtraba por las cortinas. El sonido de la música suave flotaba en el aire, y el aroma tentador de comida recién cocinada la saludó al instante.
-Hola Samy- dijo Rafa desde la cocina.
Samantha sonrió al escuchar su voz y dejó caer su bolso suavemente en el suelo antes de dirigirse hacia él. Rafael estaba parado frente a la estufa, concentrado en revolver algo en una sartén.
-Cómo te fue en el entrenamiento?- preguntó, sin apartar la vista de la comida.
Samantha se encogió de hombros, tratando de ocultar su desánimo. -Fue... duro. Creo que no lo estoy haciendo tan bien como esperaba.-
Rafa se giró hacia ella, con una sonrisa reconfortante en los labios. -No digas eso, bonita, con lo dedicada que eres, estoy seguro de que estás mejorando cada día-
Sus palabras fueron como un bálsamo para el alma de Samantha. Se acercó a él y le dio un abrazo reconfortante, sintiendo el calor de su cuerpo contra el suyo.
-Gracias por siempre creer en mí- dijo murmurando mientras lo abrazaba
Rafa le devolvió el abrazo con ternura antes de separarse y señalar hacia el sartén. -Mira te prepare una cena, creo que mereces una deliciosa cena después de ese entrenamiento. ¿Qué te parece?-
-Pasta?-
-Mjmm, no te gusta?-
-Me encanta, mi mamá siempre me hacía de esa, por eso te amo- se acercó a el y le dió un beso
-Yo más-
-Oye crees que me pueda bañar?-
-Pero no tienes ropa aquí...ah no si tienes solo tienes el short jordan, que por cierto es mío-
-Ahi me prestas una playera-
-Ok si está bien, sirve porque todavía no termino de cocinar-
-Bueno dejame voy...- desapareció de la cocina
Después de un rato, Samy se dirigió a la sala y vio a Rafa acomodando su plato y el de ella con la comida.
Rafa escucho las suaves pisadas y volteo encontrándose con Samy, con el pelo medio húmedo dejando ver su pelo medio ondulado, traía el short y una playera roja.
-Te queda gigante esa playera- dijo mientras reía
-Pero huele mucho a ti y eso me gusta-
-Ven siéntate para cenar- dijo mientras sonreía
-Sip...- se acercó a el y empezaron a comer, Samy estaba muy feliz de por fin estar con su pareja después de un largo y cansado día, le gusta que su novio la apoye en todo lo que hace, simplemente lo ama, encontro la persona correcta...
