Emilio es un Alfa dominante que proviene de un linaje muy fuerte y puro, él es dueño de la mafia de México más grande, a aquellos que se meten con él no saldrán vivos. Emilio es muy serio, frío, con un carácter tremendamente fuerte y no está interes...
"Nada cómo estar con aquellas personas que amas, te hacen sentir lleno de amor y paz"
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Mientras la linda pareja dormía plácidamente, habían pasado exactamente 5 horas que se habían encerrado en su habitación, y habían tenido varias rondas de sexo, cómo si nunca hubiesen estado juntos.
Emilio despertó peresosamente mientras intentaba abrir bien sus ojos, viendo a su hermoso Omega durmiendo plácidamente sobre su pecho, con su boquita esponjosa entreabiertita y sus lindos cabellos castaños sobre su frente era demasiado sexy y tierno a la vez, era perfecto para él.
Mientras miraba cada detalle de su omega, quitando los mechones castsños de su frente, haciendo que Joaquín se removiera y comenzara a despertar poco a poco abriendo lentamente sus hermosos ojitos mieles cómo el mismo ámbar, tan brillantes, el Alfa se quedó tan hipnotizado por aquellos ámbarinos que sentía cómo si fuera la primera vez que los viera.
Ambos se miraban fijamente, regalándose una hermosa sonrisa, el Alfa comenzó a acariciar las mejillas sonrojaditas de Joaquín, adoraba tanto sus cachetitos y más cuándo estaban rojitas cómo jitomate, recibiendo de su omega, hermosos ronroneos. Después comenzó a besar sus mejillitas haciendo que Joaquín soltara unas risitas, luego dió besos en sus ojitos, luego en su naricita de botón, y por último en los labios esponjosos de su omega dando así un beso suave y dulce lleno de tanto amor, sin segundas intenciones, mientras sus aromas se mezclaban formando un exquisita combinación llena de amor, que los hacía sentir cálidos y tranquilos.
Mientras estaban en su hermosa burbuja de amor, un guapo Omega de hombros anchos tocó la puerta de la habitación de la pareja tan fuerte, haciendo que Emilio soltara un gruñido haciendo reír a su hermoso Omega.
Emilio: ¡¡¡¡Diego!!!! ¡¡Deja de tocar así la puerta!! ¿¡¡Ahora que quieres!!? — lo dice molesto, pues su oppa nunca iba a dejar de tocar la puerta así, ó entraba sin permiso, ó tocaba la puerta tan fuerte al punto de casi tirarla sólo para molestarlo.
Joaquín: Alfa~ tranquilo, no te enojes — lo dice con una sonrisa tomando las mejillas de su alfa mientras hacía un hermoso pucherito que Emilio besó de inmediato.
Diego: ¡¡¡Mendigo dientes de conejo!!! No me hables así, vengo a decirles que bajen a comer, recuerda que Joaquín no ha comido, así que muevan el tracero y bajen — dicho ésto se vá lejos de la habitación de la pareja no sin antes escuchar los gruñidos de Emilio que sólo lo hicieron reír.
Emilio: Ya oíste bebé~ hay que bajar para que comas cariño — lo dice dando un beso en la cabecita de Joaquín.
Joaquín: Emi~ quiero seguir durmiendo así contigo, no quiero comer, no tengo hambre, sólo sueño — lo dice viendo a su Alfa con un pucherito, el cuál Emilio besó para después morder suavemente el labio inferior de su omega sacándole un jadeo.
